Lucía Juliana Pinto murió de 32 puñaladas propinadas, al parecer, por su hijo Pablo Julián Lozano Pinto, de 28 años de edad, el pasado jueves 21 de septiembre en el barrio la Concordia de Bucaramanga.
En medio de una audiencia, la fiscal del caso aseguró que hubo ciclos de violencia verbal y física desde hace varios años por parte del sujeto quien además le atribuía a la víctima sus problemas personales por su orientación sexual.
Lucía Juliana Pinto murió de 32 puñaladas propinadas, al parecer, por su hijo Pablo Julián Lozano Pinto, de 28 años de edad, el pasado jueves 21 de septiembre en el barrio la Concordia de Bucaramanga.