Las negra Raquel Cassiani y las otras 29 que trabajan en el Centro Amurallado desde mañana empezarán a lucir las nuevas polleras 'colorás' para vender frutas y dulces de coco a nativos y extranjeros, en las plazas y andenes de las calles.
Tras un mes de capacitación para afianzar sus conocimientos en atención al público, historia, cultura y civismo, ayer estas negras oriundas del Palenque de San Basilio recibieron su dotación de polleras nuevas, que ya son un atractivo más de la ciudad colonial.
Son palenqueras orgullosas, que hablan cantadito, con mucho sabor de la lengua ancestral africana; que aprendieron a 'defenderse' con el inglés para interactuar con los viajeros de los barcos de placer que llegan a la bahía; y que ofrecen ya no solo las frutas maduras y de temporadas enteras, sino que diversificaron su oficio presentándolas en ensaladas con leche condensada y yogourt, para los más refinados.

El alcalde Dionisio Vélez Trujillo, en las instalaciones de la Escuela de Gobierno y Liderazgo, dirigida por el afrodescendiente Bernardo Romero, presidió la ceremonia de entrega de nuevos vestidos para quienes se consideran 'patrimonio de la ciudad y de la humanidad', como dice la negra Raquel y sus amigas.
Esta reluciente dotación de polleras con los colores del sol de verano reforzará aún más la reciente selección del centro histórico de Cartagena como uno de los diez más coloridos del mundo, según el diario estadounidense The Huffington Post, uno de los más leídos en el mundo.
El diario extranjero dijo que el casco histórico de Cartagena de Indias 'es un verdadero espectáculo'. Habló de las maravillas de sus fortalezas, plazas y barrios de la época colonial donde se destacan los colores amarillos. En marco de este paisaje de esplendor estarán ahora de amarillo y salmón, justamente, las negras palenqueras con sus palanganas de metal.
El programa de dotación que se inició con las negras que venden en las calles turísticas de la ciudad abarcará, según el Alcalde, a las que trabaja en otros sectores de la ciudad, como por ejemplo en las playas de Bocagrande.
Vélez dijo que son en total 320 las beneficiadas y se espera que en la próxima entrega de vestidos típicos, ellas mismas contribuyan a diseñarlos.
'Ellas son parte de la tradición y la cultura de esta ciudad. Por eso nos esforzamos por prepararlas y ubicarlas de la mejor manera en la ciudad vieja', dijo Vélez.