Compartir:

Cinco hombres y una mujer que hacen parte del área de Prevención y Educación Ciudadana de la Policía Metropolitana de Barranquilla se encargan de transmitir a la ciudadanía, por medio de letanías, mensajes enfocados en la corrección de conductas que favorezcan la adecuada aplicación de las normas con un toque de sabrosura.

La conformación del grupo ocurrió hace dos años, como parte de la búsqueda de una estrategia que, combinada con el ambiente festivo de la época, permitiera a la Policía entregar de forma práctica a la ciudadanía la información relacionada con las infracciones a la ley que tienen mayor incidencia durante la temporada de Carnaval.

'Conductas como hurto a personas, a vehículos y a residencias fueron siendo seleccionadas y a cada una le compusimos una letanía que fuese folclórica, pero que impactara a la gente', dice el subintendente Richard Feria, líder y rezandero de la agrupación.

Respecto a la elaboración de las letanías, indicó que entre todos se encargan de darle forma a sus letras. Inicialmente escogen el tema y, a partir de eso, todos aportan sus ideas para ponerle ‘sazón’ a las oraciones. Este año, como no podía ser de otra forma, el grupo se inspiró en el nuevo Código de Policía para ilustrar de una forma entretenida al público currambero.

Dicen los miembros de este colectivo que cuando llegan a un lugar, las personas los miran y creen que están allí para una misión diferente a la que ejecutan. 'Ya cuando nos escuchan, se empiezan a reír y nos muestran más aceptación', comenta el patrullero Pedro Marriaga, miembro de la agrupación.

Esta vía de difusión de la información le apunta, además, a que los barranquilleros vean a los agentes de Policía como seres más cercanos a la comunidad. 'Las personas están acostumbradas a ver al policía como una figura rígida, a la que no pueden acercarse ni hablarle. Con nuestras letanías queremos, precisamente, lograr una cercanía con la gente', comentó Feria.

Alegría con autoridad

Aunque este grupo de uniformados pone su empeño en expresar de manera folclórica las recomendaciones precisas para que los ciudadanos eviten ser contraventores de la ley, sus integrantes aclaran que la idea es cumplir su misión sin perder la autoridad que representan ni el respeto por la ciudadanía.

La patrullera Leidy Cuero, corista y única mujer de la agrupación, manifiesta que 'lo mejor' de hacer parte de este conjunto es que, además de cumplir su tarea como agentes de la ley, por medio de las letanías están 'llevando un mensaje positivo' a los barranquilleros. La caleña se declara 'encantada' con la ciudad y sus habitantes, a quienes define como gente 'muy amable y servicial'.

'Con esto queremos que la gente también se sienta comprometida con la seguridad en el Carnaval y que nos colaboren a nosotros, como autoridad, a prevenir los delitos y a hacer cumplir las normas que contempla el Código', agrega Cuero.

Para el patrullero Jorge De la Hoz, corista del grupo, es el primer año con el grupo. En su opinión, un factor que les ha facilitado cumplir este rol artístico es el hecho de desenvolverse constantemente en sectores populares de Barranquilla, localidades en las que el Carnaval se viven con un fervor singular y donde las expresiones folclóricas hacen parte de lo cotidiano.

Este grupo de uniformados que ha tenido el valor de enfrentarse al público barranquillero con sus letanías desde el 2015, no solo está dándose a conocer en la capital del Atlántico, sino también a nivel nacional e internacional, gracias a las redes sociales.

Los seis agentes que incursionan en el arte de las letanías cuentan con el visto bueno del Comando de la Policía Metropolitana, que los autorizó para que asistieran —llevando sus mensajes preventivos— a todos los espectáculos masivos que se realicen durante carnavales. Además, el martes de Carnaval estarán en la Plaza de la Paz, participando en el Festival de Letanías, en el que ya están inscritos.

'No te las tires de guache/ en los días de Carnaval/ ponte ‘pilas’ donde orinas/ porque te pueden multar', dice el letaniero, mientras sus coristas responden al unísono: 'con el Código en vigencia/ se debe tomar conciencia'.

Otro de los mensajes que buscan transmitir es que, dentro de esa figura en representación de la autoridad, que vela por el cumplimiento de las leyes y que los ciudadanos no infrinjan las normas, habita un ser humano.

'En el interior del policía está esa persona a la que le gusta el Carnaval y sus raíces, alguien que en otro tiempo tal vez participó en una cumbiamba', afirma el patrullero Iván Arellana, quien aclara que la idea con la conformación del grupo de letanías es dejar que aflore todo eso que los constituye como personas.

Por lo pronto, están listos para seguir divirtiendo e instruyendo a los ciudadanos en Carnaval.