En una sesión extraordinaria del Consejo Departamental de Gestión del Riesgo, la Gobernación del Atlántico declaró la calamidad pública debido al aumento del nivel del Canal del Dique y el río Magdalena tras alcanzar los 7,18 metros.
La medida permitirá agilizar obras de mitigación en la zona sur del departamento, con el fin de proteger a las comunidades afectadas y garantizar su seguridad. Esta declaratoria activa mecanismos legales que aceleran los procesos técnicos, administrativos y contractuales necesarios para atender la emergencia.
El gobernador Eduardo Verano explicó que con esta decisión se busca mitigar los riesgos para prevenir afectaciones en las poblaciones del sur del departamento.
“Desde la Gobernación mantendremos un monitoreo constante de los cuerpos de agua y trabajaremos de la mano con las autoridades locales. Nuestro compromiso es proteger la vida, los bienes y brindar tranquilidad a las comunidades ribereñas del Atlántico”, dijo Verano.
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Asimismo, reafirmó el compromiso que tiene el departamento con la protección de la vida y los bienes de las poblaciones ribereñas.
A su turno, Nelson Oquendo, subsecretario de Gestión del Riesgo del Atlántico, advirtió que –pese a que en la región Caribe el clima se encuentra en una etapa de transición entre la temporada de lluvias y la temporada seca– las fuertes precipitaciones en el interior del país están elevando de forma significativa los niveles del río Magdalena.
“No estamos en una cota de inundación todavía, pero sí enfrentamos niveles altos que nos obligan a estar en máxima alerta”, explicó Oquendo en diálogo con EL HERALDO.
Reiteró que la declaratoria de calamidad permitirá que el consorcio responsable de la megaobra de recuperación y manejo del canal del Dique pueda ejecutar labores de mitigación inmediatas en la ribera del Atlántico, mientras avanza el proceso de licenciamiento ambiental para la construcción de esclusas.
“Desde la Subsecretaría ya hemos iniciado acciones de mitigación para evitar inundaciones, especialmente en sectores que históricamente han funcionado como zonas de amortiguación, donde hoy campesinos tienen cultivos. Allí hicimos contenciones temporales para que pudieran salvar sus cosechas”, dijo.
Agregó que “en conversaciones del gobernador Eduardo Verano con el gerente del consorcio se concluyó que esta declaratoria es necesaria para dar vía libre a las acciones preventivas mientras se materializa el proyecto de gran escala que está concesionado por 15 años”.
Emergencias atendidas
Aunque no se han presentado emergencias de gran magnitud, el funcionario contó que ya se han registrado situaciones menores en varias zonas del sur del departamento.
En Luruaco, Arroyo de Piedra, Santa Lucía y Campo de la Cruz se han atendido casos y han articulado esfuerzos con las alcaldías municipales para contrarrestar los daños causados.
Una de las situaciones más recientes ocurrió en el corregimiento de Campeche, jurisdicción de Baranoa, donde según un informe preliminar alrededor de 25 viviendas resultaron afectadas por una inundación provocada por un arroyo que cruza la zona.
“Estamos esperando el informe oficial de la Defensa Civil y el censo municipal. Este sábado estaremos en el sector verificando de primera mano los daños y entregando la ayuda humanitaria correspondiente”, informó Oquendo.
A su turno, el alcalde de Baranoa, Edison Palma, explicó que la emergencia en Campeche se presentó debido a un fuerte aguacero presentado en la tarde de este jueves .
“El barrio Santander fue el más afectado debido al desbordamiento del arroyo, generando afectación en cuatro viviendas, que fueron las que mayor afectación han registrado hasta el momento”, declaró Palma.
El mandatario aseveró que desde que se presentó la emergencia, los organismos de socorro y autoridades locales han hecho presencia para que las ayudas humanitarias lleguen en el menor tiempo posible.