Con 40 semilleros de músicos que interpretaron su primer concierto ayer ante la ministra de relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, empezó a funcionar la casa lúdica en San Bernardo del Viento, zona costanera del Departamento de Córdoba.
Se trata del quinto proyecto de ese tipo en el país, con un costo de $ 600 millones de pesos.
Al son de flautas y percusión folclórica, niños hijos de pescadores y mototaxistas amenizaron el sábado la jornada con temas del fallecido maestro Lucho Bermúdez, bajo la batuta del licenciado en Música Edwin Cogollo Espitia.
Las casas lúdicas del Ministerio de Relaciones Exteriores es una estrategia de prevención y lucha contra el reclutamiento armado infantil. La iniciativa surge a través de la resolución 1612 de 2005, del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
La de San Bernardo del Viento beneficiaría inicialmente a 400 menores, a través del programa integral de la Cancillería denominado Niños, Niñas y Adolescentes con Oportunidades.
'Lo que buscamos es que los niños después de la jornada escolar puedan pasar un tiempo entre amigos y hacer cosas positivas a través de la música, la pintura, el deporte y otras manifestaciones artísticas, lejos de la violencia. Esperamos que en agosto de este año hallamos entregado 23 casas lúdicas en igual número de municipios del país', dijo la Canciller Holguín.
Sostuvo que las iniciativas que se han inaugurado además en Samaniego (Nariño), Codazzi (Cesar), Tadó, Quibdó e Istmina (Chocó), cuentan con nuevas alternativas en la práctica del deporte como el rugby, que incluso también empieza a practicarse en San Bernardo.
La Canciller Holguín destacó que en la obra de este municipio cordobés existió más compromiso de la comunidad y la caracterizó distinta a las demás, por la frescura del diseño y los colores del espacio donde los niños y jóvenes se alejarán del riesgo de ser conquistados por los grupos armados al margen de la ley. 'Es la misma inversión en todas partes pero esta casa lúdica es más linda que las otras. Tenemos que lograr que los muchachos piensen en cosas positivas con un espacio para el deporte, la cultura y la música. Queremos blindarlos de tantas promesas falsas de los grupos armados', dijo Holguín.
POR UN ESTUDIO DE RIESGO. El proyecto en San Bernardo se deriva de un estudio de riesgo de la Alcaldía en el 2011, que arrojó como resultado que muchos niños estaban siendo reclutados por bandas criminales y otro grueso grupo muy vulnerable estaba en el mismo riesgo. En San Bernardo hay entre 11 y 12 mil menores de acuerdo al censo local. Unos 300 terminan anualmente el bachillerato y de ese número solo el 10 por ciento tiene acceso a algún estudio superior o técnico.
El alcalde de la localidad, Luis Francisco López, dijo que más de la mitad de los bachilleres deben dedicarse a la pesca, el trabajo informal o al mototaxismo, debido a la distancia del municipio con Montería (83 kilómetros) para asistir a un instituto o una universidad.
'El tema del reclutamiento fue un indicador que nos impulsó a gestionar el proyecto ante la Cancillería. Por fortuna se han realizado acciones y actualmente el flagelo del reclutamiento desapareció', dijo el mandatario.
EL TRABAJO MUSICAL
Edwin Cogollo Espitia, licenciado en música de la Universidad de Atlántico e instructor de los niños en San Bernardo, dijo que se está trabajando con ellos el proceso de pre-banda, estrategia que se coordina a través del Ministerio de Cultura. El propósito – dijo – es que los menores aprendan inicialmente a marcar el pulso rítmico y leer partituras con flauta dulce, para posteriormente abarcar la instrumentación de viento como el clarinete, saxofón, trombón y trompeta e incursionar en una banda folclórica con todas las de la ley. 'En este municipio hay mucho talento, lo que faltaba era un proyecto de este tipo que ayude a identificar lo que los niños guardan. La idea es que en vez de empuñar un arma, se empuñe un instrumento', dijo Cogollo.
Por el momento existe un recurso logístico limitado, pero el propósito es que la administración local dote la escuela musical de todo lo que se requiere para avanzar con la iniciativa.