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Un día después de que 12 perros fueron masacrados en Pileta, corregimiento de Corozal, los habitantes lloran su muerte. La incertidumbre y el silencio invaden las polvorientas calles de este poblado en el que sus habitantes se habían acostumbrado a dormir al son de los ladridos de sus canes.

De estos que fueron envenenados por hombres que llegaron a robar a una casa, solo queda el recuerdo de las cabuyas con que los amarraban en el día, el viejo plato donde le echaban los desperdicios de lo que comían sus amos y una que otra fotografía que hoy permanece de protector de pantalla en los celulares de sus dolientes.

Las autoridades, que desde hace poco más de 7 años no tenían conocimiento de un hecho como estos, han guardado silencio, mientras en cada una de las calles caminan chismes, comentarios y especulaciones de la forma en la que pudo ocurrir este hecho.

Sucre no es ajeno a estas masacres animales, en la época de la cruda violencia y como preludio a las masacres los grupos armados al margen de la ley mataban a los perros para que no dieran aviso de su presencia en el pueblo.

Los que sí no pudieron callar su voz de protesta fueron los miembros de la Sociedad Protectora de Animales, quienes catalogaron el hecho como inadmisible y cruel.

Olga Barrios, vicepresidenta de la Sociedad en Sucre, manifestó que la semana anterior un hombre mató con agua caliente un perro en Betulia, pero lo ocurrido en Pileta es un acto de barbarie.

'Esperamos que en un futuro las personas tomen consciencia de lo importante que son estos animales para nuestras vidas, estos que se encontraban en Pileta eran guardianes, y el pago que reciben es la muerte. Estos actos no lo hacen los animales sino los seres humanos bajo un estado de sevicia', dijo Barrios.

Añadió que la única forma de combatir estos hechos es con educación y sensibilización.

Este hecho ocurrió la madrugada del domingo cuando unos hombres ingresaron a una casa en la calle Las Peñitas y para no ser descubiertos envenenaron los perros que custodiaban el sector. Tras este acto cruel maltrataron a la familia León y se hurtaron 25 millones de pesos.

Por LAURA TOSCANO