
El Gobierno de Costa Rica afirma haber sido víctima de un 'engaño' al aceptar que una empresa de la que es ejecutivo el colombiano Gabriel Ricardo Morales Fallón, presuntamente con vínculos con el narcotráfico, le prestase un avión privado a la mandataria Laura Chinchilla, pero el escándalo no cesa y puede costar más cabezas.
En un comunicado divulgado el miércoles por la noche, Chinchilla, que aceptó la renuncia de su ministro de Comunicación, Francisco Chacón, por este asunto, calificó lo ocurrido como 'inadmisible' y aceptó que la imagen del país y hasta su propia seguridad quedaron expuestas.
Por ello, 'ordenará en las próximas horas las acciones necesarias para que nunca más se repita', señala el comunicado. Según la versión del Gobierno, Morales Fallón se presentó el pasado 8 de mayo ante el entonces ministro Chacón y la asistente personal de Chinchilla, Irene Pacheco, con el nombre de Gabriel O'Falan.
Chinchilla indicó a través de un comunicado su 'profunda preocupación' por 'la cadena de fallos' que hizo no se implementaran los filtros que hubieran permitido saber del vínculo del avión utilizado con 'una persona cuestionada por actividades ilícitas'.
El colombiano, que también tiene la nacionalidad costarricense y no tiene antecedentes en este país, ha sido denunciado ante la Fiscalía por suplantación de identidad.
Los denunciantes fueron Chacón, cuando todavía era ministro, y el Comisionado Antidrogas de Costa Rica, Mauricio Boraschi, quienes reconocieron que fallaron todos los protocolos de seguridad.
Las autoridades se enteraron de la verdadera identidad del ejecutivo de THX Energy el pasado martes, gracias a investigaciones periodísticas. Para entonces Chinchilla ya había viajado en dos ocasiones en el avión de THX: en marzo al funeral de Hugo Chávez en Caracas y el pasado fin de semana a Perú para asistir a una boda.
Medios colombianos han ligado durante años a Morales Fallón con el reconocido narcotraficante Juan Carlos Ramírez, alias Chupeta, pero esas acusaciones no han sido nunca comprobadas.
En 2003 Morales apareció en los registros de las autoridades colombianas por una millonaria importación irregular de lujosos autos Skoda. En 2009 se le vinculó con un escándalo por uso ilegal de dineros de una petrolera y en 2010 fue condenado en Colombia por falsedad material de documento público agravado, aunque ganó una apelación y fue absuelto.
La diputada del Partido Acción Ciudadana, Carmen Muñoz, calificó ante los periodistas lo ocurrido como un 'ridículo' para el país.
Por Nancy De Lemos
SAN JOSÉ.





















