El Heraldo
Barranquilla

‘Xavi’, el burro que pasó entre rejas tras participar en robo

Este es ‘Xavi’, en el patio de la estación de Policía de Juan de Acosta. s:3:

No se trató del Asalto al tren del dinero, mucho menos del Robo del siglo, pero al mejor estilo de los robos bien planeados donde primero se sustrae un vehículo cualquiera para cometer la fechoría, lo primero que robaron dos ‘avispados’ ladrones de Juan de Acosta, y lo curioso es que esta vez no se trató de un ‘zapatico’ o de una moto de alto cilindraje, pero nuestros incógnitos pillos, a lo mejor presionados por la premura echaron mano de lo primero que tenían al alcance, y es así, aunque parezca insólito que los ‘genios’ de esta historia se embarcaron en un robo a lomo de burro.

Este mamífero de unos 10 años, lento y apacible, al que algunos pobladores llaman Xavi, como el talentoso jugador del F.C. Barcelona y aunque el orejudo no sea precisamente veloz, ni suspicaz, mucho menos ágil,terminó involucrado de carambola en el robo de la tienda llamada Donde Fabio.

Vale la pena aclarar que esto no es un cuento extraído del universo mítico de Macondo, tampoco una fábula costumbrista que intenta extraer la picaresca idiosincrasia de nuestros pueblos del Caribe, no, estos ‘genios’ tropicales del mal, que buscaban su fortuna no precisamente ‘en un callejón por donde nunca pasa nadie’, irrumpieron en el tradicional barrio Calle Grande, aprovechando la complicidad del silencio y del sueño profundo de sus residentes para ingresar en la tienda de propiedad de Fabio Orozco, pensando hacerse su agosto de manera sencilla.

El par de amigos de lo ajeno, treparon por el balcón de la casa a hurtadillas a eso de las tres y media de la mañana y con la complicidad de la oscuridad y las sombras, procedieron a llenar un saco y una caja con varias botellas de ron, aceite, varias libras de arroz, latas de atún y de sardinas entre otros víveres y una grabadora con la que cargaron al cuadrúpedo, al paciente Xavi que esperaba como cualquier ‘burro amarrado a la puerta del baile’.

Los ‘ingeniosos’ ladrones la tuvieron fácil ya que nuestro ingenuo y confiado comerciante, pese a que como él mismo lo afirma, con esta sería la tercera vez que se le meten en el rancho en menos de 15 días, y sumido como estaba en un profundo sueño, ni se enteró que su tienda estaba siendo desvalijada.

Una certera llamada a la estación de policía realizada por un vecino solidario, puso en alerta a los agentes de turno que reaccionaron de manera inmediata.

Los agentes se presentaron en la puerta de la tienda a las 4 de la madrugada y se encontraron con algunos víveres desparramados, y a unos cuantos metros, al pobre burro amarrado a un árbol, cargado con una grabadora y cerca de sus patas un saco con algunos de los víveres sustraídos envueltos en un saco y con una caja vacía. Unos cuantos metros más allá, unas tantas botellas de Ron Blanco.
Las evidencias no podían ser más claras, Xavi fue agarrado con ‘las patas en la masa’.

“Yo estaba dormido cuando sentí que tocaron la puerta. Eran como las 4 de la mañana y mi esposa se asomó y cuando vio la policía lo primero que pensó fue que se nos habían metido otra vez. Cuando salimos, afuera nos encontramos con algunas cosas tiradas y vimos al burro amarrado como a dos casas con la grabadora en el sillón y el saco a un lado. Se iban llevando entre 500 a 600 mil pesos entre las cositas que tenían,la policía nos devolvió todo enseguida antes de llevarse al burro a la estación”, contó el comerciante.

Gloria Burgos, esposa del tendero, contó que los ladrones dejaron rastros por todos lados y en su huida abandonaron al burro al que pretendían llevarse cargado de víveres. “La policía nos dijo que a ellos los habían llamado porque dos personas eran las que estaban cargando el burro y el animal lo dejaron ahí solo y los tipos se perdieron”, contó Gloria.

Aunque a Fabio y la gran mayoría de los residentes de su barrio les parece absurdo e incomprensible utilizar a un burro como apoyo para cometer un robo, la realidad estaba frente a sus narices.

En la mañana de ayer, el personaje más popular y que se encontraba de boca en boca en todo el pueblo era Xavi, el burro.
Orlando Olivares, un campesino de 51 años que vive de ordeñar vacas y del trabajo en fincas, contó que Xavi estaba bajo su cuidado la misma madrugada en que pasaron los hechos.

Él despertó como a las dos de la madrugada y el burro estaba tranquilo en el patio de su casa con su sillón a un lado. Olivares retornó a su cama y cuando faltaban un cuarto para las 4 despertó como de costumbre y al salir al patio se dio cuenta que tanto el sillón como el asno habían desaparecido.

“El burro se lo habían llevado. Ese burro no es mío a mí me lo prestan donde Mario, porque yo les llevo la leche y eso. Lo que pasa es que tengo mi burra enferma de una pata y bueno, yo soy amigo de la familia. Yo fui enseguida a avisarles que el burro no estaba y pensé que ellos lo tenían , pero nada”, dijo.

Orlando tenía una semana de estar cuidando a Xavi por lo que se llevó una sorpresa tras enterarse de que el animal que lo lleva hasta a la finca, era el mismo que estaba en la estación de policía a la espera de que apareciera su dueño y el mismo del que todos venían hablando por el famoso robo frustrado a la tienda.

Mario Jiménez, dueño del animal, se encontraba en sus labores en la zona rural del municipio y hasta el mediodía de ayer, no había podido ir a reclamar al burro que se encontraba bajo la custodia de los agentes de policía quienes fueron tajantes al decir que solo entregaban el animal a su legítimo dueño.

De los ‘creativos’ ladrones, aún no se sabe nada y por el momento el único que se encuentra bajo la custodia de la ley, es el más orejón, el menos culpable, el más trabajador,a quien metieron en este lío simplemente por ser burro.

Por Carlos Polo

Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.