El venezolano del gol ‘maradoniano’ tiene sangre barranquillera

Fue un gol de Play Station. Una poesía, una fantasía, ‘Maradoniano’, ‘Messiano’... Yohandry Orozco recupera el balón en el mediocampo, se mete entre dos hombres y avanza fino con la cabeza levantada, supera a un tercero, deja regado al cuarto, adiós al quinto, encara y elude a un sexto.

¡Ya quedaron seis rivales en el camino! Al borde del área se abre espacio con exquisita técnica, apunta y, antes que el planchazo de un séptimo adversario corte la trayectoria del balón, despacha un zurdazo potente que se cuela por el ángulo superior izquierdo del arquero de Perú: ¡Golazo! En mayúscula, para enmarcar. ¡Qué irreverencia! ¡Qué atrevimiento! ¡Qué categoría!

El autor de esa obra maestra que le significó a Venezuela el empate 1-1 ante el equipo anfitrión el lunes pasado, en la cuarta jornada del Grupo A del Torneo Sudamericano Sub-20, tiene sangre barranquillera.

Yohandry Orozco, capitán y volante creativo de La Vinotinto, es hijo del currambero Sadys Orozco Medrano y la marabina de padres guajiros, María Eugenia Cujía.

'Tiene raíces colombianas por todos lados. Sus abuelos maternos y paternos son de Villanueva (La Guajira) y yo soy de Barranquilla', dice orgulloso a EL HERALDO el progenitor del moreno con zurda hábil, panorama, velocidad y fortísimo disparo.

Sadys nació hace 44 años en La Arenosa y sus padres se lo llevaron al país vecino a muy corta edad. Allá conoció a María Eugenia y formaron una familia de la que surgieron tres hijos: Sadys Carlos, de 24 años, Devanis, de 22, y Yohandry, de 19.

Se residenciaron en el populoso barrio de Maracaibo, Cardenal Norte, conocido por su alta peligrosidad y por la masiva presencia de colombianos, la mayoría procedentes de la región Caribe.

Sadys, hincha del Junior, a pesar de las distancias, les inculcó a sus hijos el amor la camiseta rojiblanca y por el fútbol.

'Yohandry tiene cosas de Pachequito (Víctor Pacheco), es muy ágil y elegante para jugar. Todo eso es de la sangre barranquillera, juega igual que lo hacía yo', destaca su padre, que estuvo a punto de jugar profesionalmente con la ayuda del cantante Rafael Orozco (q.e.p.d.), que fue su amigo y lo estaba recomendando en el desaparecido Sporting de Barranquilla en aquellos días que las balas apagaron la vida del artista.

Yohandry Orozco se había convertido en figura en los anteriores partidos del Torneo Sudamericano ante Uruguay y Argentina, sobre todo frente a los Gauchos, cuando conquistó su primer tanto. No obstante, la antológica anotación contra los Incas puso a sonar su nombre en todo el continente y en el mundo. Claro, si él fuera brasileño o argentino, el ruido sería mayor.

'Es un gol importante para mí y para toda Venezuela', declaró el jugador del Zulia FC, equipo de la primera división del fútbol venezolano, donde fue compañero del barranquillero Fredys Arrieta, ahora en el Junior.

Su padre sueña con verlo jugar en el cuadro Tiburón, equipo al que Yohandry vio cuando sólo tenía 12 años de edad, durante su única estancia en la capital del Atlántico, donde visitó a los tíos y primos que todavía viven en los barrios Carrizal y Los Almendros.

'Siempre que voy a Barranquilla me pide la camiseta del Junior', dice Sadys.

Aunque asegura que ningún club se interesó todavía en sus servicios, su golazo hará que empiece a repicar el teléfono de su representante, el colombiano Luis Felipe Posso.

'No hay ofertas. Estoy concentrado en la Selección', dijo Yohandry Orozco, que estuvo en el Mundial Juvenil de Egipto en el 2009, pero por su escasa edad en ese entonces, tuvo pocas oportunidades de actuar.

Ahora, dos años después de esa experiencia, da de qué hablar con su gol ‘maradoniano’.

Hasta el presidente venezolano Hugo Chávez, que poco y nada sabe de fútbol, elogió el martes al volante de la selección vinotinto sub-20, Yohandry Orozco.

El mandatario comentó que cuando el jugador sacudió la red, emitió un grito tan potente que provocó la movilización de los agentes de seguridad en el palacio de gobierno.

'Nuestro Yohandry Orozco hizo tremendo gol, corrió desde la media cancha; ese gol de Yohandry es 20 veces más gol que el de Perú. Yohandry se sacó a varios jugadores, los dribló a todos y metió el gol. ¡Viva Yohandry Orozco!', afirmó Chávez en un discurso televisado.