Rayo impacta a una adolescente y le causa quemaduras de segundo y tercer grado
La joven está en una UCI de Montería y deberá ser sometida a procedimiento de cirugía plástica.
Una adolescente de 17 años, estudiante de noveno grado de la institución educativa Julián Pinto Buendía, en el corregimiento de Mateo Gómez, zona rural de Cereté, fue impactada por un rayo a las 6.20 a. m., de hoy cuando caminaba desde su vivienda hacia el colegio, mientras empezaba a llover en gran parte del Departamento.
El incidente ocurrió en el sitio conocido como la orilla del canal de esa misma población rural, en momentos en que la joven, en compañía de un hermano menor, pasaban por debajo de un árbol de mango que está en la orilla de la vía, y al cual están adheridos varios cables de energía de una instalación callejera. De allí fue llevada al hospital Sandiego, de Cereté.
El coordinador médico del citado centro asistencial, Tony Pacheco, relató que la paciente recibió quemaduras de segundo y tercer grado en la región posterior del dorso y glúteos, lo que obligó a que, después de estabilizarla fuera remitida a una UCI en Montería, para manejo por cirugía plástica.
“La joven fue traída a las 7 a. m., después de haber recibido la descarga eléctrica, llegó con agitación psicomotora, se le hicieron los exámenes de rigor, entre ellos un electrocardiograma, se estabilizó y por las complicaciones fue remitida a una ICI. Lo que quisimos fue prevenir complicaciones que se pudieran presentar debido a la descarga”, explicó el médico Pacheco.
En el lugar donde recibió la descarga la joven fue auxiliada por el ciudadano Cesar Martínez, quien se alarmó con el destello que derivó en gritos de ayuda desde la calle.
“Estaba en la sala de mi casa cuando escuché gritos en la parte de afuera, llegué al lugar, recogí a la joven y con la ayuda de un mototaxista la llevamos hasta las instalaciones de la empresa Autopistas de La Sabana, donde prestaron el servicio de ambulancia hasta el hospital. Se quejó mucho en el camino, pedía ayuda pero con dificultad para hablar”, relató Martínez.
Insistió en que la joven pudo mantenerse con signos vitales gracias a los estímulos del paramédico que la acompañó en el traslado hasta el centro asistencial donde fue estabilizada.
La noticia tomó por sorpresa a la comunidad educativa de la institución Julián Pinto Buendía, hacia donde se dirigía la estudiante cuando recibió la descarga, que por fortuna no le causó daño al hermano menor de la joven.
La licenciada Guillermina Rodríguez, directora del curso donde estudia la adolescente, dijo que durante la jornada académica se realizaron múltiples cadenas de oraciones en todas las aulas del plantel para pedir por su pronta y completa recuperación.
