Escolástica, representación femenina de la Restitución de Tierras en Sucre
En 9 años la Unidad ha devuelto 6 mil hectáreas a 1.224 campesinos de nueve municipios.
Escolástica Mercado de Martínez tiene 79 años de edad, un pasado difícil, pero una sonrisa esperanzadora. Mide 1.48 metros de estatura, tiene tez trigueña y un rostro apacible. Esas características la hacen única en la vereda Pertenencia, zona rural del municipio de Morroa, en Sucre.
Con ella, la Unidad de Restitución de Tierras conmemoró los 9 años de su creación. Fue en ese ambiente, donde vive ‘doña Esco’, por ser la primera restituida en Sucre.
En la Parcela No. 1 recibió un retablo con su fotografía, una tarjeta, un ramo de flores e insumos alimenticios, que fueron entregados teniendo en cuenta los protocolos de bioseguridad y acatando las medidas de prevención establecidas en el departamento.
“Mi mamá estaba feliz, la acompañamos seis de sus hijos y algunos nietos y aunque por su avanzada edad pronuncia pocas palabras, nos hizo saber su emoción y gratitud al recordar que gracias al proceso de restitución de tierras pudo recuperar la parcela que abandonamos por culpa de los violentos”, expresó Lucy Martínez, hija de la señora.
A ella junto a su familia, conformada por 11 hijos, les tocó abandonar el predio el 20 de agosto de 2001 por la presencia de grupos armados ilegales. Estuvieron radicados en el corregimiento Sabanas de Cali.
“Doña Escolástica es el ejemplo de la mujer campesina, resiliente, que, a pesar de que su esposo falleció en el 2012, sacó a sus hijos adelante y fue una luchadora incansable por recuperar su tierra. Por eso conmemoramos con ella el noveno aniversario de la Ley 1448 de 2011, como un reconocimiento a su valentía, tesón y productividad”, dijo Dina Luz Montalvo Puente, directora de la Unidad de Restitución de Tierras en Córdoba, Sucre y Bajo Cauca.
La noticia de su restitución le llegó el 17 de enero de 2013 a manos del Juzgado Primero Civil del Circuito Especializado en Restitución de Tierras de Sincelejo, que profirió la sentencia que le devolvió las 13 hectáreas de su parcela. En esta producen miel, cacao, yuca, ñame, plátano, maíz y frutales.
“Recuperar nuestro predio fue volver a la vida, eso me ayudó a forjarme como persona y empresaria de la miel, ahora soy apicultora, tengo mi propia empresa, que con mucho esfuerzo ha ido creciendo en extensión y reconocimiento”, concluyó Lucy Martínez, beneficiaria del proceso restitutivo.
