En Sincelejo también se hicieron sentir por Javier Ordóñez
La de este domingo fue la segunda muestra de rechazo por parte de la ciudadanía en Sincelejo.
Las dos caras de la moneda se vieron en la tarde de este domingo en los alrededores del CAI La Ford, ubicado en el barrio del mismo nombre en Sincelejo. Mientras por una de las puertas de acceso a este sitio un grupo de estudiantes universitarios protestaba en contra de “los abusos” de la institución, en otro costado una joven llegó para entregarle detalles a los uniformados del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) que también se hizo presente en el lugar.
La cita para protestar en contra de la Policía Nacional por la muerte del ingeniero y estudiante de derecho Javier Ordóñez, ocurrida en Bogotá, fue convocada a partir de las 4:00 p.m., pero esta inició más tarde para darle tiempo a que llegaran más personas, como en efecto lo hicieron cerca de 50, la mayoría jóvenes que expresaron ser estudiantes universitarios.
Llevaron pancartas, banderas y pasacalles con mensajes de rechazo, y también lanzaron arengas en contra de la institución y de sus hombres. Las palabras soeces no faltaron, por el contrario fueron el común denominador, pero todo transcurrió en calma.
La Policía de Sucre, conocedora de las situaciones registradas en contra de los CAI en otras partes del país, se había preparado y mantuvo custodiada con antelación la zona aledaña a ese sitio, lo que no fue del agrado de los manifestantes, pues así lo expresaron públicamente y ante esto justificaron la necesidad de reformar la Policía.
Una de las mujeres que hizo parte de esta protesta que se extendió a los CAI Cruz de Mayo y San Carlos, todos en la zona norte de Sincelejo, en su intervención hizo alusión a varios hechos que a lo largo de la historia vinculan a la institución y que según ella no han sido sancionados.
Por su parte, Mariana Durán, llegó en representación de 25 jóvenes a llevarle detalles, envueltos en papeles de colores, a los uniformados que estaban en ese servicio.
Adujo la ciudadana que hace parte de una fundación que ha decidido que a partir de hoy “no van a esperar que sucedan cosas como las que todos conocemos que han ocurrido en el país para decirle a los policías cuanto valoramos el trabajo que realizan, el turno de noche y de día. Gracias por abandonar a su familia por ir a cuidar a una ciudadanía que no sabe quiénes son ustedes. A partir de este momento vamos a trabajar para premiarles a ustedes el trabajo que hacen. Que Dios los bendiga y acompañe en cada uno de sus pasos. ¡Ánimo!, no están solos, somos más los buenos que los malos”, anotó Durán.
Como esta ciudadana otras que hacen parte de la Red de Mujeres, de las juntas de acción comunal en Sincelejo y los niños y jóvenes que integran las policías, cívica infantil y juvenil se tomaron en esta semana los CAI para llevar una voz de aliento y apoyo a los policías.
