Envejecimiento poblacional, un factor que nos toca a todos

Escuchar comparaciones sobre el estado de salud de generaciones anteriores en una misma familia hace deducir a primer vistazo que antes “se vivía” mejor. Sin embargo, diversos estudios han realizado proyecciones poblacionales en el mundo y se ha determinado que existirá un aumento en las próximas décadas, todo un reto para los gobiernos y los sistemas de salud.

Recientemente una investigación publicada en la revista The Lancet y desarrollada en 195 países y territorios proyectó que en Colombia, por ejemplo, la expectativa de vida para 2040 será de 81 años. Cerca de tres años más de la expectativa de 2016.

Además, según las estimaciones de la ONU presentadas durante la 52.ª reunión de la Comisión de Población y Desarrollo, la población mundial llegará a los 9.700 millones de habitantes en el año 2050. Por lo cual, a partir de los análisis, la cifra que actualmente se calcula en 7.700 millones, llegará los 11.000 millones para fines del siglo XXI.

En la publicación de The Lancet también se proyectó un significativo aumento en las muertes por enfermedades no transmisibles como la diabetes, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad renal crónica y cáncer de pulmón.

Entonces los análisis presentan un aumento en la vida útil, pero a su vez las enfermedades crónicas afectarán más a la población. 

“Todos los países de la región experimentarán no solo el envejecimiento de la población, sino también el envejecimiento interno de la población adulta mayor”, según el Observatorio de Salud y Envejecimiento.

Los jóvenes empezarán a envejecer, es claro, pero ¿qué tanto estamos preparados?

“Con buenas líneas de comunicación, vínculos entre Gobierno, hospitales, médicos, farmacéuticas y el mismo paciente se podrá preparar para estos estadios”, asevera Eduardo Magallanes, vicepresidente senior de la división pharmaceuticals de Bayer región Latinoamérica.

Enfermedades. Solo en 2018 se registraron en el mundo más de 18 millones de nuevos casos de cáncer, de estos, según la Organización Mundial de la Salud cinco millones de casos podrían haberse tratado más eficazmente de haber sido detectados de manera temprana.

En el continente y el país. En América, esta patología es la segunda causa de muerte con 1,3 millones de fallecimientos y la detección de 3.7 millones de nuevos casos.

Mientras que en Colombia se presentaron el año pasado 101.893 nuevos casos de cáncer según las proyecciones de la OMS.

Cardiopatías y otros males. Esta institución sostiene también que actualmente no se dispone de pruebas que indiquen que las personas de edad gocen actualmente de mejor salud que la de sus padres, una respuesta a la situación planteada al comienzo de la nota.

“El foco debe estar en las áreas terapéuticas. Hay mucha necesidad, pero la oncología y cardiología, por ejemplo, son las que acompañarán el cambio demográfico fuerte”, asegura Magallanes.

Sobre esto, es importante conocer que los principales problemas de salud que afectan a las personas de edad son las enfermedades no transmisibles, tales como las cardiopatías, diabetes, artrosis y cáncer.

Datos de la OMS indican además que se prevé que en 2050 se habrá cuadruplicado el número de ancianos que necesitarán ayuda para realizar sus actividades cotidianas.

Así como un millón de personas mueren al año por casos de cardiopatías, otro millón de casos de cáncer se diagnostican anualmente. “Esto va acelerado hacia el crecimiento de 60 años y mayores. Hay que estar muy consciente de ellos porque puede ser una bomba de tiempo”, asegura Magallanes.

Todo lo anterior cae en las recomendaciones que una y otra vez dan los especialistas para llevar una mejor calidad de vida: dieta saludable, ejercicio y ahora Magallanes suma un factor importante que por estos tiempos algunos desestiman: “llevar un equilibrio entre vida y trabajo”.

“Hay que ir al médico también y no solo cuando nos sentimos mal. Hacerse los exámenes que pueden identificar y diagnosticar cómo te encuentras en ese momento, algo que no solemos hacer en Latinoamérica y que debería convertirse en un hábito”, dice.

Llegar a la prevención será el reto que empezará desde nuestras casas para que aquella expectativa de vida sea más un disfrute con nuestras familias que un largo recorrido entre hospitales y medicinas que terminará afectando en masa a la sociedad.

Estadisticas. Para el 2030: Según las proyecciones del estudio Global burden of disease para el 2030, citado por la Organización Panamericana de la Salud, las enfermedades isquémicas del corazón se mantendrán en la primera posición de las causas de muerte de adultos mayores en países de bajos y medianos ingresos de América.

“Siendo los adultos mayores el grupo poblacional de mayor crecimiento y que mayor contribución hace a la mortalidad, mejorar la calidad de los registros vitales será un factor fundamental para bajar las proyecciones de la mortalidad en las próximas décadas”, sostiene el análisis del Observatorio de Salud y Envejecimiento.