El Heraldo
Diseño de sonrisa realizado a una mujer adaptado a sus necesidades. Cortesía
Salud

El dilema de hacerse o no un diseño de sonrisa

Especialistas hablan de los pros y los contras de someterse a este procedimiento estético.

En los últimos años el auge de los denominados diseños de sonrisa ha ido en aumento. Es normal ver fotos de antes y después de diferentes dentaduras colgadas en redes sociales, así como promociones ofreciendo este procedimiento a bajo costo. 

También están los odontólogos experimentados que explican en qué consiste en realidad y hacen un trabajo profundo, y otros que, basándose en conocimientos académicos, rechazan tajantemente esta nueva ‘moda’.

Un estudio realizado por la red de centros de soluciones odontológicas Dentisalud determinó que la implementación de resinas en los dientes, en bordes o carillas, se convirtió en el tratamiento más realizado en Colombia para los diseños de sonrisa. 

Carlos Fernández De Castro, odontólogo especialista en rehabilitación oral de la Pontificia Universidad Javeriana y miembro de la ALD Academy of Laser Dentistry, explica que “la gente cree que un diseño de sonrisa son muchas cosas y no es así. Cada persona es diferente, no significa que los diseños de sonrisa sean sinónimo de carillas, a veces solo se arregla la forma”.

Asegura que se trata de algo netamente estético. “Eso lo hace la persona cuando siente la necesidad”.

La realización de este procedimiento se basa en un compendio de cuatro cosas. “Cuando llegan a mi consultorio y me dicen que quieren un diseño yo miro cuatro aspectos importantes en la boca: forma de los dientes, el color, la textura y analizar la funcionalidad de la boca. Tengo que estar dentro de los parámetros”, asegura el especialista.

Sin embargo, hay quienes no están a favor de estos procedimientos, argumentando que no es la naturaleza del diente y crea graves afectaciones a la salud de los pacientes. “Hay mucha gente que habla mal del diseño de sonrisa y no estoy de acuerdo con eso. Es como si un cirujano plástico hablara mal de un aumento de mama o una liposucción”, explica Fernández De Castro.

Este es el diseño de sonrisa “estándar” que critican muchos especialistas por ser “mercantilista”.

“La gente cree que porque ve en la televisión unas sonrisas rectas es normal mandar a sellar los espacios en sus dientes con resinas, pero la verdad es otra. Los dientes no son cuadrados, son levemente redondeados y no son del mismo tamaño. El apego a los llamados ‘diseños de sonrisa’ hace parte de un boom que tiene un trasfondo muy serio y es la televisión, porque la gente está bajo una presión social y estética muy fuerte”, afirma Isauro Abril Parra, investigador del Grupo de Investigación de Materiales Dentales de la Universidad Nacional de Colombia, en un artículo publicado en la Federación Odontológica Colombiana.

Aclara que no se trata de satanizar esta práctica, “pues debe valorarse como un adelanto de la odontología. Sin embargo, está pensado para un tipo de pacientes muy específicos que en realidad lo necesitan”.

Saber elegir el especialista

El odontólogo Fernández De Castro explica con un ejemplo que una joven de 22 años tiene los dientes de un color “agradable” comparado a los 47 que los dientes están más oscuros. “Veo esa joven y puedo decir que necesita un poquito de blanqueamiento, no tanto como el de adulto”.

Es enfático en decir que “el diseño no es igual para todo el mundo, y ahí todo depende de la persona que lo hace”.

Señala que quien realice esto debe ser una persona idónea, “que sabe muy bien cuáles son los procedimientos que hay que hacer”. 

Los pacientes muchas veces van a odontólogos que no son especialistas y Fernández De Castro cuestiona eso, así como que “hay hasta blanqueamientos por $90.000 en promociones en Internet”. 

“¿Cree que le pondrán algo bueno? Ahí dañan el diente. Hoy en día hay muchas cosas comerciales y hay odontólogos que llegan los pacientes y le quieren hacer lo mismo a todo el mundo. Todos los pacientes iguales”, agrega, argumentando que existe en algunos casos un ‘diseño estándar’ aplicado a todos.

En sus diferentes publicaciones, Enrique Jadad Bechara, odontólogo especialista en rehabilitación oral y máster en implantología oral y rehabilitación de las universidades de Maimonides y ESI de Barcelona, dice que “después de mucho camino recorrido, me di cuenta que la solución era la ortodoncia. La ortodoncia sería, hipotéticamente, el verdadero diseño de sonrisa del que tanto se pregona y aplica hoy día”.

En un artículo del Dental Tribune Hispanic & Latin America, publicado en 2016, afirma que el diseño de la sonrisa no es más que “una frase creada por unos brillantes mercaderes de la odontología, a quienes solamente les importa llenarse los bolsillos de dinero a expensas de los inocentes deseos de los pacientes por tener dientes lindos como las modelos de la televisión”.

“Es aterrador ver a pacientes con dientes extremadamente largos y blancos, sin tener en cuenta que los dientes tienen parámetros y rasgos propios, que cada ser humano es una entidad individual”, agrega.

La reflexión que deja el doctor Fernández De Castro es que un diseño de sonrisa no es sinónimo de carillas, “se hace según las necesidades de cada uno”, y –según él lo más importante- la importancia de “ir a un odontólogo que no vaya a mutilar la boca. Muchos especialistas lo han visto como un mercantilismo y lo que hacen es dañarles los dientes a las personas. La experiencia no se saca de la noche a la mañana”.

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