La caja registradora de Junior sigue sonando gracias a su cantera

Junior gasta, pero también recibe. La alta inversión en jugadores (con malas, regulares y buenas decisiones) para tener un equipo competitivo y protagonista en la Liga colombiana en cada temporada, se compensa con los jugosos premios que entrega la Conmebol por las participaciones en torneos internacionales, en los cuales vienen participando los rojiblancos consecutivamente desde 2015 (en Copa Libertadores o Copa Sudamericana, o en ambas), y, sobre todo, por concepto de transferencias al exterior.

El club ha traspasado a distintas ligas del mundo a jugadores profesionales que adquiere de otros equipos y que brillan con la rojiblanca como Víctor Cantillo y Yimmi Chará, por ejemplo, pero los que mayores ganancias y orgullo le generan son los que llevan el sello de Bomboná, la sede cercana al municipio de Malambo, Atlántico, donde cumplieron parte de su proceso formativo jugadores como Teófilo Gutiérrez, Carlos Bacca, Luis Carlos Ruiz, Vladimir Hernández, Guillermo Celis, César Haydar y Luis Díaz.

Los siete pasaron por el Barranquilla FC, la institución hermana de Junior que desde el 2005 les brinda formación y roce profesional a los jugadores de las divisiones menores rojiblancas, antes de convertirse en ‘Tiburones’ de primera y sumergirse en aguas extranjeras.  

En los últimos 13 años, desde que empezaron este tipo de exportaciones ‘made in’ Bomboná, primero con la transferencia de Teófilo al Trabzonspor (en 2010) en 3 millones de dólares, Junior ha sumado a sus arcas 113 mil millones de pesos, aproximadamente, según el precio del dólar y el euro en el momento en que se realizaron las diferentes operaciones.  

De las siete ventas de canteranos rojiblancos al exterior, la de Luis Díaz fue la más fructífera. De hecho es la cifra más alta que le han pagado a una escuadra colombiana por los derechos económicos de un jugador en toda la historia.

Los Tiburones han recibido, hasta ahora, un total de 16 millones de euros a través de Díaz: 7 millones al vender el 80% de sus derechos económicos al Porto y 9 millones por el 20% de la reciente transferencia del cuadro portugués al encopetado Liverpool de Inglaterra.

Y eso sin contar lo que recibe Junior por concepto de ‘mecanismo de solidaridad’ en esa millonaria operación en la que el cuadro inglés le pagó 45 millones de euros al Porto.

‘El mecanismo de solidaridad’, una norma de la Fifa de obligatorio cumplimiento en las transferencias internacionales, se refiere a repartir el 5% de una operación entre los equipos que contribuyeron en la formación del jugador, de manera equivalente al tiempo que permaneció en cada uno. En este caso reciben una rebanadita del pastel la Escuela de Barrancas, Barranquilla FC y Junior.

Y la caja registradora del equipo caribeño podría seguir sumando por cuenta del extremo guajiro. Si finalmente cumple las variables por objetivos cumplidos, la operación entre Liverpool y Porto ascendería a 60 millones de euros y Junior recibiría 3 millones más.

Mientras Díaz empieza su andadura en los ‘Reds’ y está por verse si cumple las metas trazadas para elevar su traspaso, por lo pronto, ya hay 40 mil 500 millones de pesos de este lado del ‘charco’ (9 millones de dólares).  Lo de ‘Lucho’ es mucho, y paga con creces la inversión que ha representado el Barranquilla FC desde el 2005 y le da un gran oxígeno a un Junior que apuesta fuertes sumas en fichajes.

Por su cantera ha salido airoso en medio de las grandes adversidades de la pandemia (César Haydar fue transferido justo en tiempos de covid), y la caja registradora ha seguido sonando.