El Heraldo
Cortesía de Miller García
Región Caribe

El dilema de las corralejas del 2022 en Sincelejo

El miércoles la Alcaldía de Sincelejo debe presentar el Plan de Acción de las corralejas que le fue pedido por la Procuraduría y la Gobernación de Sucre.

Mientras en los municipios de San Marcos y Sampués el año 2021 fue despedido con corralejas y el 2022 fue recibido de la misma forma, y en otras poblaciones como San Pedro, Buenavista y Majagual se desarrolla la fiesta brava, las de Sincelejo, que aún no empiezan, son un dilema.

La denominada fiesta buena, la fiesta en corraleja de la capital sucreña, se debate entre un universo de opiniones a favor y en contra por parte de la ciudadanía, del querer de la administración municipal en reactivar la economía con este y otros eventos, y de las exigencias de las autoridades departamentales y nacionales en materia de bioseguridad y seguridad.

A esto se suma la postura rotunda de los ambientalistas del municipio, el departamento y el país porque no se realicen las corralejas de Sincelejo por ser un atentado contra los animales. La Sociedad Protectora de Animales de Sucre y otras organizaciones de ambientalistas completan una semana ininterrumpida realizando acciones y alzando su voz porque la fiesta brava no se realice.

El médico Muffith Salaimán Fayad y la abogada Olga Barrios, presidente y representante legal de la Sociedad Protectora de Animales de Sucre, respectivamente, reprochan “el incumplimiento del alcalde Andrés Gómez Martínez en el compromiso que se hizo con nosotros de no haber corralejas y que también lo había hecho en campaña. Es una barbarie, una burla”, dice Salaimán que al igual que muchos ambientalistas se hará sentir este martes 11 de enero a partir de las 8:00 de la mañana con una movilización por calles de la ciudad.

“Los animales son seres sintientes y los de Sucre sí tienen dolientes”, anota Salaimán.

Cortesía de Miller García

Al igual que él que no está de acuerdo con la corraleja se muestran el artista Frank Rodríguez y el miembro de la Mesa Sucreña por la Paz, José Fredy Aguilera. Este último se pregunta cuál es el beneficio que esa fiesta le deja a Sincelejo y a su vez le recuerda a la administración de Andrés Gómez y a la ciudadanía en general que el pueblo sincelejano aún paga con sus impuestos las indemnizaciones que hace 42 años la Nación asumió por las centenares de víctimas que dejó la caída de las corralejas, en aquel entonces con palcos de tres pisos.

Adicional a ello hace tránsito desde el 7 de enero en el Juzgado Cuarto Penal Municipal de Sincelejo, con funciones de control de garantías, una acción de tutela en contra de la Secretaría de Gobierno de la capital sucreña y de la Curaduría Urbana Primera por el tema de las corralejas y que tiene como accionante a Jhon David Montoya Sánchez.

Reactivación

Si bien el alcalde Andrés Gómez Martínez no se ha referido desde lo local a este evento que es de un privado, pero que necesita un permiso de su administración para realizarse, en una entrevista con la W Radio dejó claro que es un evento que reactiva la economía.

Además en un consejo de seguridad efectuado el sábado por el gobernador Héctor Olimpo Espinosa un representante de la administración municipal expresó que si bien la corraleja se está construyendo porque tiene la licencia para ello, eso no quiere decir que esta se realice.

Reinará entonces la incertidumbre entre los miembros de Inversiones Sierra Munive S.A.S., que son los organizadores de esta fiesta brava y quienes han dicho a través de Luis Emiro Sierra que cumplen todos los requisitos que exige el Municipio para la realización de las cinco tardes de toros entre el 19 y el 23 de enero a partir de las 3:00 de la tarde jugando 40 astados, 20 de ellos de una ganadería, es decir, que habrá un mano a mano.

Sierra anunció que habrá servicio de salud, de toma de muestras para detectar casos de la covid-19 y también de vacunación contra el letal virus que por estos días ha aumentado los nuevos casos.

Y hablando de reactivación, hasta los taxistas y mototaxistas dan cuenta que desde el montaje de los palcos de madera para la corraleja se ha despegado un poco la economía porque ellos con contratados para realizar carreras a ese sitio por parte de personas que solo van a observar.

“Yo he venido a traer varios servicios a esta corraleja de familias que solo vienen a ver el montaje de los palcos”, dijo un taxista.

Quienes trabajan en el montaje de la estructura que tendrá 22 palcos --cada uno de ellos con 15 metros de largo-- dan fe que la economía sí se ha reactivado con este espectáculo y será aún mayor cuando la fiesta empiece.

Uno de ellos es Ever Garcés Díaz que ha invertido 24 de sus 50 años de vida a armar corralejas. Dice que tenía dos años de no ganarse un peso en este tipo de oficios que él aprendió como ayudante.

“Estuve dos años sin ganarme un peso construyendo palcos por culpa de la pandemia”, anota Garcés que construye uno de los 22 palcos de la llamada corraleja del renacer que se sitúa a un kilómetro de la vía que va de Sincelejo a Sampués.

En la construcción de un palco pueden demorar hasta 4 días si lo trabajan dos personas y para ello es necesario 300 tablas, 100 listones y 100 palos redondos, además de clavos y otros elementos.

Esta corraleja se construye de 6:00 de la mañana a 6:00 de la tarde y hay más de 50 hombres desarrollando esta labor.

Jonatan Vega Padilla, nativo de Córdoba, pero residenciado hace más de 30 años en el barrio Nuevo Bolívar, de Sincelejo, hace parte de la cuadrilla de hombres que construye los dos toriles de la corralejas. Asegura que desde niño trabaja en el montaje de corraleja y de eso hace 40 años.

El toril tiene una extensión de 2 metros de largo por uno de ancho y en él, al mismo tiempo pueden estar hasta 5 animales.

Leonel Alemán tiene 27 años y reside en el corregimiento La Gallera, cerca de donde se construye la corraleja en la que él desde el 28 de diciembre trabaja haciendo los huecos en los que van enterrados los palos redondos que soportan la estructura de madera que tendrá capacidad para albergar, sentados, a unos 6 mil espectadores.

Por cada hueco le pagan 2 mil pesos y para el montaje de un palco se requieren entre 75 y 80 de estos huecos.

Mientras las autoridades debaten si realizan o no las cinco tardes de corralejas, sus constructores siguen adelante en su labor. La última palabra la tiene el alcalde Andrés Gómez y esa decisión no puede desconocer la de un juez de la República que estudia la acción de tutela.

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