El Heraldo
Johnny Hoyos
Política

Aprobada reforma tributaria en primer debate

Petro agradeció al Congreso y dijo que la idea es un "sistema justo de tributación, donde los que más tienen sean los que más tributen".

Las Comisiones Terceras Conjuntas aprobaron este jueves, en primer debate, tras nueve horas de discusión, la reforma tributaria del gobierno de Gustavo Petro que espera recaudar $22 billones el año entrante.

La deliberación sobre los 96 artículos comenzó en el Salón Elíptico del Capitolio pasadas las 8 de la mañana y a las 5 de la tarde concluyó. Por eso, la oposición del Centro Democrático advirtió que el articulado fue 'pupitreado' pero el Gobierno sostiene que hubo antes al menos 300 horas de discusión con distintos sectores políticos, económicos y sociales.

Petro 'trinó' al término del debate: "Avanzar hacia un modelo de desarrollo sostenible y crear un sistema justo de tributación, donde los que más tienen sean los que más tributen, son los objetivos de la reforma que presentamos. Agradezco a las Comisiones Económicas por su aprobación en primer debate. El interés del gobierno es consolidar una política fiscal sostenible, fundamentada en ingresos corrientes y en la reducción de la dependencia de la deuda. La reforma tributaria es importante en su finalidad de equidad y como factor anticíclico en la recesión mundial venidera".

El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, agradeció a los distintos partidos y resaltó que "el proyecto ha sido objeto de un amplio debate, creo que estamos estableciendo un récord por las horas que hemos estado con los sectores políticos y los gremios".

A su vez, la presidenta de la Comisión Tercera de la Cámara, la representante Katherine Miranda, de la Alianza Verde, aseguró: "Le dimos la oportunidad a la oposición de expresarse y agradezco a los partidos políticos por su talante democrático".

Las células legislativas, inicialmente, negaron la ponencia negativa presentada por el senador Miguel Uribe, del Centro Democrático, quien explicó: "Decidimos presentar una ponencia negativa porque nuestras alertas no están siendo tenidas en cuenta. Desempleo, pobreza e inflación, eso es lo que va a lograr la reforma que hoy pretenden 'pupitrear'".

Esta reforma, añadió, "se ha justificado sobre unos planteamientos parcialmente ciertos: que la economía no va bien y que encontraron la olla raspada, y eso es falso: este gobierno está recibiendo más recursos que otros gobiernos, venimos creciendo a tasas históricas, tuvimos el mejor crecimiento en el mundo después de Arabia Saudita tras la pandemia".

Y advirtió Uribe, finalmente, "si se nos va la mano en el recaudo de impuestos el crecimiento de la economía no será el mismo, y lo que uno ve es que si se fomenta el crecimiento de la economía estimula el recaudo".

Por su parte, Cambio Radical se retiró de la discusión. Al respecto, el senador Antonio Zabaraín advirtió que el articulado "castiga al sector productivo, detiene la reactivación económica, agrede al sector agropecuario, pondrá nuevas cargas a trabajadores y pensionados y no plantea un control a la evasión y el contrabando".

Aunque Uribe propuso votar punto por punto, el articulado se votó prácticamente en tres bloques. Inicialmente fue avalado un bloque de 25 artículos, compuestos por 21 para eliminación y cuatro sin proposiciones; posteriormente fueron votados positivamente 47 artículos que tenían unas mil proposiciones y que quedaron como constancias para segundo debate en las plenarias de Senado y Cámara y finalmente pasaron 22 artículos nuevos.

En medio de la discusión, el senador conservador Efraín Cepeda, ponente, aclaró que en la reforma fiscal "no habrá sobretasa de renta para el gas natural, cuyo uso de los colombianos es el gas domiciliario y el gas vehicular, entre otros. Es energía limpia para generación eléctrica".

Además, aseguró que los coordinadores del proyecto fiscal han ejercido una labor en el sentido de moderar los artículos para proteger el empleo y la inversión.

"e requieren recursos para inversión social después de haber afrontado una pandemia, hoy tenemos un hueco fiscal. Como ponentes, nuestra labor se ha enfocado en moderar los temas para que no se frene la inversión ni el empleo", señaló el ponente durante el primer debate de las Comisiones Terceras Conjuntas.

En este sentido, enumeró Cepeda como "logros" el hecho de que "el impuesto a los dividendos del 39% máximo, lo bajamos a 20%; el impuesto a ganancias ocasionales del 39% máximo, las bajamos al 15% y en el Régimen Simple se moderaron los tributos, hoy hay 70 mil micro y pequeñas empresas formalizándose, queremos con esta nueva tabla que se alcance mínimo 500 mil. Le conviene a los informales acogerse al régimen simple por los bajos tributos que los benefician".

Así mismo, agregó que en cuanto al impuesto a bebidas azucaradas "alcanzamos una línea media que no afecte a los tenderos ni la canasta familiar; en la Vivienda de Interés Social (VIS) se estaba eliminando la renta exenta destinada a lotes VIS y desarrolladores, y logramos su preservación".

No obstante, radicó una proposición que afirma corrige el hecho de que "la sobretasa al gas haya quedado igual a la sobretasa al petróleo y la del carbón, el impuesto se cambió por las exportaciones, y el gas no se exporta. Además es una energía limpia".

Por su parte, el senador Mauricio Gómez, del Partido Liberal, afirmó que la reforma es necesaria pero hay que buscar un punto medio para no afectar sectores como el minero energético.

"Desde el principio dije reforma sí pero no así y creo que este Congreso en las últimas semanas lo ha venido haciendo así, el próximo año hay un déficit fiscal de 3 puntos, no importa por qué, pero el país va a estar tres puntos por encima y debe haber una reforma tributaria, por eso es que la estamos discutiendo", dijo el parlamentario ante las Comisiones Económicas.

Señaló además durante el primer debate del proyecto fiscal que van "21 reformas tributarias desde el 91, no hay un solo gobierno que no haya hecho una reforma tributaria, todos han tenido la necesidad de presentarla por distintas dificultades. Esto no es de izquierda ni derecha sino una discusión técnica, y durante estas semanas hemos hecho el trabajo y hemos logrado algunos triunfos, como bajar impuestos a dividendos y a ganancias ocasionales, gracias a un ministro de Hacienda que ha sido flexible y decente".

Y se mostró confiado en que "vamos a llegar a un punto medio donde la ciudadanía quede tranquila. Esta es una reforma progresiva porque debe pagar el que más tiene, pero hay cosas que me siguen preocupando y creo que el sector minero energético está sobrecargado, debe pagar pero hay que buscar un punto medio a un sector que en los próximos 15 años va a aportar mucho al país; el derecho adquirido de las pensiones hay que respetarlo, así que no acompañaré el punto de las pensiones. Y tenemos que revisar lo de las bebidas azucaradas y ultraprocesados, y es un tema cultural que hay que ir poco a poco trabajando, pero en este momento de inflación gravar estos alimentos puede aumentar la inflación".

También, su copartidario Juan Diego Echavarría coincidió: “No debemos tocar las pensiones de los colombianos. Pedimos que esta reforma afecte lo menos posible a la inversión en Colombia y que ojalá cada centavo que vamos a sacar sirva para desarrollar vías terciarias, educación y salud, y ojalá no se vaya a la corrupción”.

Entre los cambios principales que trae se incluyen que al sector minero-energético se le pondrá una sobretasa de renta que equivale al 10 por ciento el primer año, al 7,5 por ciento el segundo y 5 por ciento en el tercero, y tampoco podrán deducir las regalías del impuesto de renta.

Tampoco se incluyeron los días sin IVA, a pesar de que Ocampo había dado aval a la propuesta de incluir dos días para el 2023 solo para productos nacionales.

 

El impuesto al patrimonio quedaría a partir de $3.000 millones con una tarifa marginal del 0,5 por ciento; a partir de $5.000 millones del 1 por ciento, y desde los $10.000 millones del 1,5 por ciento.

Para los azucarados y ultraprocesados la tarifa sería gradual del 10 por ciento en el 2023, de 15 por ciento en el 2024 y de 20 por ciento en el 2025.

El grueso del recaudo lo aportarían las empresas extractivas, que entregarían $11,2 billones, mientras que las demás personas jurídicas darían $3 billones. Las personas naturales dejarían $3,3 billones, la mayor parte por impuesto de renta e impuesto al patrimonio.

El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, dijo el pasado miércoles a medios de comunicación que el proceso de socialización del proyecto se extendió por cerca de dos meses y contó con la activa participación de los legisladores, gremios, empresarios y la ciudadanía.

Frente a los cambios más notables, explicó el funcionario que se eliminaron los impuestos a exportaciones de carbón y petróleo, pero se restableció la no deducibilidad de regalías y el impuesto a las exportaciones se reemplaza por una sobretasa en el impuesto de renta de las empresas de estos sectores.

"La meta del proyecto de ley de la Reforma Tributaria para la Igualdad y la Justicia Social asciende a $22 billones, luego del proceso de consenso y acuerdos logrados entre el Gobierno del Cambio, los congresistas de las comisiones terceras y cuartas constitucionales y la ciudadanía, que se extendió por cerca de dos meses", indicó.

Los recursos, agregó, serán invertidos en el gasto social que el país demanda, y pone a Colombia en el nivel de tributación como porcentaje del Producto Interno Bruto de un país latinoamericano.

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