Corte Constitucional hunde el Tribunal de Aforados
Revive la Comisión de Acusaciones y deja a los magistrados y al Fiscal con el mismo fuero que el Presidente • Toma fuerza la idea de una Constituyente para reformar la justicia.
La Corte Constitucional propinó otro duro y mortal golpe a la reforma del Equilibrio de Poderes al tumbar el Tribunal de Aforados que esta creaba en reemplazo de la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes.
Así como lo hizo en el fallo que dejó en firme el Consejo Superior de la Judicatura y enterró el Consejo de Gobierno Judicial, diseñado para reemplazarlo, el tribunal constitucional determinó que los congresistas habían sustituido la Constitución al crear un nuevo órgano de juzgamiento para los magistrados de las altas cortes y el Fiscal General.
En su decisión, la Corte también acusó de vicios de procedimiento en el trámite del Acto Legislativo 02 de 2015, más conocido como la reforma de equilibrio de poderes, señalando que había violado el principio de consecutividad durante su paso por el legislativo.
El proyecto de fallo del magistrado Alejandro Linares, quien estuvo a cargo de estudiar la demanda interpuesta por el exfiscal general Eduardo Montealegre, argumenta que durante los debates en Senado y Cámara se cambió la esencia del articulado inicialmente propuesto por el Gobierno Nacional. En su momento Montealegre calificó como una “segunda toma del Palacio de Justicia” el cambio que introducía la reforma para juzgar a los 78 funcionarios aforados que tiene Colombia.
Con esta decisión, que estuvo acompañada de ocho de los nueve magistrados, se elimina casi en su totalidad la principal reforma constitucional que ha impulsado el Gobierno de Juan Manuel Santos en su segundo período presidencial y que buscaba darle respuesta a la crisis que enfrentó la justicia a raíz del escándalo que envolvió al magistrado de la Corte Constitucional, Jorge Pretelt, sindicado de recibir dádivas por fallar tutelas y cuyo caso habría pasado al Tribunal de Aforados si éste hubiera quedado en firme.
Retazos de la reforma
El fallo de la Corte eliminó otro gran pilar de la ambiciosa reforma que sin embargo todavía le quedan algunos cambios.
La reforma al Equilibrio de Poderes fue un Acto Legislativo impulsado por el Gobierno Nacional que inició su tránsito por el Congreso en 2014 con un finclaro, eliminar la reelección presidencial e introducir algunas modificaciones en la estructura de la Rama Judicial.
Sin embargo, en medio del escándalo que vivió la justicia en 2015 cinco fueron los cambios anunciados por Santos: despolitizar la justicia, crear un Tribunal de Aforados, eliminar el Consejo Superior de la Judicatura, cerrar la puerta giratoria (que los magistrados pasen de una corte a la otra) y cambiar la forma de elección de los magistrados.
El único pilar de la reforma que todavía queda en pie es la eliminación de la reelección presidencial. También está vigente la restricción a las prácticas del “yo te elijo, tu me eliges” y la de la “puerta giratoria”, que le permitía a los magistrados saltar de una corte a otra y participar en la elección de sus colegas.
Polémica
De acuerdo con el exmagistrado de la Corte Constitucional, José Gregorio Hernández, la decisión de la Corte es acertada porque en el fondo la reforma que buscaba el equilibrio de los poderes “discrimina entre los magistrados y el Presidente de la República, porque los magistrados pierden el fuero y el presidente si sigue con el fuero”.
Visión contraria tiene la directora de Excelencia por la Justicia, Gloria Borrero, para quien el argumento de “sustitución de la constitución” está siendo usado por la Corte con ligereza. “Si ellos siguen con esa teoría la constitución está llena de cláusulas inamovibles o pétreas que van a impedir cualquier ajuste a las nuevas dinámicas sociales y del Estado. La única salida que queda es una Asamblea Constituyente para poder pasar por encima del Congreso y de la propia Corte”, sostiene.
Congresistas piden Constituyente
Como sucedió con la decisión de revivir la judicatura, varios congresistas rechazaron el reciente fallo de la Corte y señalaron la necesidad de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente para reformar a la justicia ante la resistencia que parece colocar el tribunal constitucional. Armando Benedetti, copresidente de La U; Luis Fernando Velasco, presidente saliente del Senado; la representante Angélica Lozano, entre otros, se manifestaron a favor de una constituyente.
