El presidente Juan Manuel Santos no podía quedarse callado, sabía que era imperdonable estar en Santa Marta y no hablar del tema de moda: la Drummond y la suspensión del cargue de carbón por su puerto en Ciénaga. “Lo hicimos para sentar un precedente”, dijo.
En el discurso inaugural de la planta productora de leche Alquería, el mandatario de los colombianos les dijo a estos empresarios que “son bienvenidos siempre y cuando cumplan con su responsabilidad social y ambiental, y que, por supuesto, paguen sus impuestos.
Fue en ese momento cuando Santos se refirió a la multinacional Drummond manifestando que además de suspender el embarque del carbón, su gobierno “no permitirá que ninguna empresa, nacional o extranjera, vulnere las normas ambientales”.
Indicó que el Gobierno está procediendo de forma contundente para la protección ambiental y sostuvo que ya se han suspendido algunas licencias, a minas de carbón en el Cesar.
Afirmó que el desarrollo de la minería colombiana tiene que ser para la productividad y el equilibrio del país.
“Ese desarrollo tiene que ser, como su palabra lo indica, sostenible, es decir que sea compatible con la preservación de otro gran recurso que tenemos que es nuestro medio ambiente”, concluyó Juan Manuel Santos, quien recordó que la suspensión de la compañía irá hasta cuando presente un plan de contingencia satisfactorio para las autoridades ambientales.
Voces samarias. Las voces de la dirigencia gremial, profesionales y personas del común de Santa Marta ante la histórica medida del Gobierno Nacional, tienen puntos de vistas concordantes.
César Riascos Noguera, presidente del Comité Intergremial y director ejecutivo de Camcomercio, dijo que la decisión es “sumamente delicada y seria porque por primera vez en la historia reciente de Colombia, la autoridad ambiental se ve obligada a suspender una licencia de estas características”.
“Esto trae consecuencias no solo para la Drummond, sino para la región y el país”, anotó.
Dijo además que ve con preocupación también que la Drummond haya mentido. “A la ciudad y al país no se le puede mentir en una situación tan delicada como esta”, precisó.
El científico Armando Lacera Rúa manifestó que, aunque paradójico, “es una medida oportuna, pero muy tardía”.
Señaló que no es nada nuevo el vertimiento de carbón al mar Caribe, ya que eso se viene dando desde hace años a raíz del hundimiento de varias barcazas.
El especialista en temas ambientales Edgar Polo Flórez señaló que el procedimiento de la ANLA está sujeto a la normatividad. “Se presentó una circunstancia en la que el plan de contingencia no correspondió y se tomaron las medidas necesarias”, precisó.
Polo dijo que espera que la autoridad nacional ambiental, en el caso de Santa Marta, “aplique con rigor los reglamentos para que no sufra más detrimento nuestras costas”.
Jesús Carrascal, pescador de Don Jaca, zona de influencia de Puerto Drummond, manifestó que “eso debió hacerse mucho antes”. “Para qué la sanción, si ya el daño está hecho”, anotó.
En igual forma opinó el empresario Eduardo Correa Valdeblánquez, quien sostuvo que “¿ya para qué?”.
Respaldo del Gobernador. El gobernador del Magdalena, Luis Miguel Cotes Habeych respaldó de manera irrestricta la decisión que tomó la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, ANLA, con respecto a las irregularidades, en las cuales incurrió la empresa Drummond.
Por Agustín Iguarán González