
Venezuela muestra su apoyo al gobierno de Kazajistán tras masivas protestas
Las polémicas manifestaciones se registraron a principios de enero por la duplicación del precio del gas licuado.
El canciller de Venezuela, Félix Plasencia, expresó este viernes, en nombre del presidente Nicolás Maduro, su apoyo y solidaridad al gobierno de Kazajistán en la "defensa de la soberanía y de la Constitución" de ese país.
"Conversamos, vía telefónica, con el canciller de la República de Kazajistán, Mukhtar Tleuberdi, a quien le manifestamos en nombre del presidente Nicolás Maduro y del pueblo venezolano, toda nuestra solidaridad y apoyo en defensa de la soberanía y de la Constitución kazaja", escribió el canciller en su cuenta de Twitter.
Conversamos, vía telefónica, con el Canciller de la República de Kazajistán, Mukhtar Tleuberdi, a quien le manifestamos, en nombre del Presidente @NicolasMaduro y del Pueblo venezolano, toda nuestra solidaridad y apoyo en defensa de la soberanía y de la Constitución Kazaja pic.twitter.com/bqE7Wt3fyi
— Felix Plasencia (@PlasenciaFelix) January 14, 2022
Como se sabe, a principios de este mes se registraron protestas en Kazajistán, inicialmente por la duplicación del precio del gas licuado, utilizado en el país como una alternativa barata a la gasolina.
Las manifestaciones, alentadas por el descontento ciudadano con las élites económicas y políticas y la corrupción, devinieron rápidamente en disturbios y fueron reprimidas por las fuerzas kazajas en una operación "antiterrorista".
Incluso, el pasado 6 de enero, el presidente kazajo, Kasim-Yomart Tokáyev, solicitó a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) -alianza militar postsoviética liderada por Rusia- su asistencia para sofocar la "amenaza terrorista" como calificó las protestas violentas.
Nursultán intentó justificar la represión y la presencia de la OTSC en Kazajistán por la "amenaza terrorista" al país, ya que asegura que los manifestantes son "terroristas internacionales". Habló de unos 20.000 insurgentes de Asia Central, Afganistán y Oriente Medio, y de campamentos de entrenamiento, aunque no ha presentado pruebas de ello.
Las protestas han dejado un balance hasta el momento de al menos 164 muertos, 1.000 heridos y más de 10.000 detenidos.