Kamala Harris, la primera mujer vicepresidente de Estados Unidos
Es la primera mujer de color en alcanzar el cargo. Ha sido Fiscal y senadora.
Nacida en Oakland, California de madre india y padre jamaiquino, Kamala Harris demostró desde temprana edad que tenía un gran camino para recorrer.
Su mamá fue científica especialista en cáncer de mama y emigró a Estados Unidos en 1960, su papá fue profesor de economía de Stanford y llegó al país norteamericano en 1961 aunque aseguró ser descendiente de mujeres que hicieron parte de plantaciones de esclavos.
Tiene una hermana menor de nombre Maya quien es analista política de MSNBC. Sus padres se divorciaron cuando ella tenía siete años, y su madre asumió la custodia de sus hijas.
Estudió en la Escuela Secundaria Westmount en Westmount, Quebec, se especializó en ciencia política y economía en la Universidad Howard en Washington D. C. y obtuvo el Juris Doctor (J.D.) del Hastings College of the Law de la Universidad de California.
Está casada con el abogado californiano Douglas Emhoff desde el 22 de agosto de 2014, en Santa Bárbara (California) en un rito judío. Tiene dos hijastros adultos.
Inicios de carrera
Fue fiscal de distrito adjunta en el Condado de Alameda, California, desde 1990 hasta 1998 y fiscal de distrito de San Francisco de 2004 a 2011.
Comenzó la iniciativa Back On Track, un programa de re-inserción para delincuentes no violentos sin antecedentes criminales y que fue tomada como ejemplo por Arnold Schwarzenegger en 2009 en California.
En 2015 anunció oficialmente el lanzamiento de su campaña para el Senado. En las primarias del 7 de junio, Harris quedó en primer lugar con el cuarenta por ciento de los votos y ganó por mayoría simple en la mayoría de los condados.
En 2016, Harris derrotó a Loretta Sánchez y anunció su intención de permanecer en el cargo de Fiscal General hasta finales de 2016.
El 21 de enero de 2019, Harris anunció oficialmente su candidatura como presidente de los Estados Unidos sin embargo solo estuvo hasta el 3 de diciembre cuando se retiró de la contienda por falta de fondos. En Marzo de 2020 respaldó la campaña de Biden y en agosto fue anunciada como su fórmula presidencial.
Se convirtió así en la tercera mujer en ser candidata a la vicepresidencia después de Geraldine Ferraro y Sarah Palin en uno de los dos partidos principales de Estados Unidos.
Una vez que este sábado los grandes medios de comunicación declararon la victoria de Biden, Harris se convirtió no solo en la primera mujer en alcanzar la Vicepresidencia, sino también en la primera persona negra en ocupar ese puesto y la primera de origen indio o asiático en hacerlo.
Pese a su origen multicultural, Harris prefiere describirse a sí misma simplemente como "una estadounidense", y asegura que siempre se ha sentido bien con su identidad, como explica en su autobiografía "The Truths We Hold".
Un pasado polémico como fiscal
Como fiscal se opuso al empleo de cámaras corporales por parte de los agentes de policía y a la legalización de la marihuana con fines recreativos, aunque sobre este último tema ha modificado su visión.
Aun así, el diario The New York Times apuntaba que ella misma se ha descrito como "fiscal progresista": Impulsó medidas de izquierda sobre asuntos como el matrimonio gay y la pena de muerte, pero los más radicales le echan en cara no haber ido más lejos.
Como aspirante demócrata a la Presidencia, se presentó como una solucionadora de problemas "pragmática".
Politico ha indicado que si hay un asunto que puede perjudicar su apuesta son sus posturas cambiantes sobre la instauración de un seguro médico universal en EE.UU., ya que ha pasado de apoyarlo sin fisuras a no respaldarlo abiertamente.
Durante la campaña, desde la derecha se la bautizó como "la peor elección vicepresidencial de la historia de EE.UU." y "como justo lo opuesto a lo que Biden necesitaba para competir contra el presidente Trump en noviembre", según repitió constantemente el canal Fox Business.
Hoy, sin embargo, Fox reconoció que Harris estaba "haciendo historia", mientras que otros medios apuntaron que estaba "rompiendo un techo de cristal" para las mujeres.
La edad de Biden, de 77 años, y su convencimiento de que va a ser un "candidato de transición" colocan a Harris, de 56 años, en un puesto de ventaja para convertirse en la futura líder del Partido Demócrata.
