Embajador alemán expulsado por Maduro regresa a Venezuela
Su retorno sucede después de que el gobierno socialista decidiera “dejar sin efecto” -el pasado 1 de julio- un comunicado emitido en marzo mediante el cual se declaró persona “non grata” a Kriener.
El embajador alemán regresó a Venezuela tras ser expulsado en marzo por el gobierno de Nicolás Maduro, en medio de tensiones generadas por el respaldo de Alemania al líder opositor Juan Guaidó, informó este lunes la diplomacia alemana.
Daniel Kriener volvió el sábado para "nuevamente cumplir con sus tareas desde Caracas", señaló la embajada alemana en su cuenta de Twitter.
Según el portavoz del ministerio alemán de Asuntos Exteriores, Rainer Breul, el diplomático retornó al país petrolero tras "consultas en Berlín".
"Nuestra posición con respecto al reconocimiento de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, de conformidad con la constitución venezolana no ha cambiado", apuntó la cancillería alemana.
Su retorno sucede después de que el gobierno socialista decidiera "dejar sin efecto" -el pasado 1 de julio- un comunicado emitido en marzo mediante el cual se declaró persona "non grata" a Kriener.
Con la decisión de Caracas se inició un "proceso de normalización de las relaciones diplomáticas entre ambos Estados", reseñó la cancillería de Venezuela en un comunicado.
Kriener fue uno de los diplomáticos que recibió el pasado 4 de marzo en el aeropuerto internacional que sirve a Caracas a Guaidó, jefe parlamentario reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países, entre ellos Alemania.
Guaidó regresaba de una gira por Sudamérica luego de desacatar una prohibición de salida del país declarada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Tras ello, Caracas declaró al diplomático persona "non grata" y le ordenó abandonar el país en 48 horas por "recurrentes actos de injerencia en los asuntos internos", medida que el gobierno alemán tachó de "incomprensible".
La cancillería de Alemania reiteró que la expulsión del embajador fue una iniciativa de la administración de Maduro que se tomó "sin ninguna discusión o condición".
