Beatriz Camacho florece en Colombiamoda
La diseñadora cartagenera presentó en la pasarela de la feria de moda su colección ‘Flor de sal’, inspirada en “la poesía de la naturaleza”.
En el segundo día de eventos de Colombiamoda 2021, la diseñadora cartagenera Beatriz Camacho presentó a los asistentes su colección ‘Flor de sal’, inspirada en “la poesía de la naturaleza” y el arcoíris que “llena de esperanza”.
Con un aforo de 420 personas, el desfile empezó a las 8:00 de la noche en el Gran Salón del Centro de Convenciones Plaza Mayor de Medellín.
Con un atardecer frente al mar Caribe proyectado en una pantalla de fondo, una a una empezaron a desfilar las modelos sobre la pasarela de la feria de moda más importante de Colombia, que este año se reactivó para fortuna de la industria.
Lucieron maxis y minis vestidos, entre holgados y ceñidos al cuerpo, faldas, pantalones, enterizos, blusones y pareos. Los accesorios que acompañaron los atuendos fueron las grandes carteras y los sombreros playeros de tela.
Los flecos y los estampados también se destacaron durante la noche.
En total fueron 38 looks los que desfilaron las modelos y con los que la diseñadora cartagenera jugó con una paleta de colores refrescantes entre lilas, naranjas, limas, azules y rosas.
En materia de telas predominaron los algodones, las mallas y sedas con cortes asimétricos y volumen que, según la diseñadora, “le dan forma a una mujer femenina”.
Los detalles de flecos y los cinturones de cuerdas a la cintura complementaron cada pieza.
“Salimos de la paleta tradicional, casi nostálgica de Beatriz Camacho, para despertar con un nuevo amanecer. Siluetas sueltas y cómodas para el día a día de la mujer en la cotidianidad”, contó la diseñadora a EL HERALDO.
Fiel a sus orígenes, Camacho se ha inspirado en el Caribe para varias de sus colecciones y ‘Flor de sal’ no fue la excepción. De hecho, se basó en
las salinas de Galerazamba (Bolívar) para esta nueva entrega, que representa “la aparición del arcoíris que llena de esperanza y optimismo renovado”, sobre todo en estos tiempos.
“Tonos refrescantes casi efervescentes, que nos despiertan en un mar con patrones orgánicos que imaginariamente llamamos flores de sal, le dan forma a nuestros estampados”, explicó.
Un regreso con mucha adrenalina
Para la diseñadora radicada en Barranquilla, el regreso de las pasarelas y los eventos de moda a la presencialidad en medio de la reactivación económica la “llena de emoción y adrenalina” pues “recibir la linda energía de las personas hace que se convierta en un momento único”.
Al evento asistieron personajes reconocidos como la modelo y empresaria Belky Arizala y la actriz Mabel Moreno, entre muchos otros.
Moda y tecnología, una unión que toma fuerza
Esta colección contó con el trabajo en equipo de vivo, una compañía internacional de tecnología cuyos colores de su nuevo celular vivo V21, recientemente presentado en el mercado colombiano, coincidieron con la paleta de tonalidades que dominaron la colección de Beatriz Camacho.
Paula Parra, gerente de relaciones públicas y de gobierno de vivo, dijo a EL HERALDO que la alianza con Beatriz Camacho se da para “demostrar que la tecnología y la apuesta fotográfica pueden acompañar a los colombianos en eventos tan importantes como este, e invita a encontrar en su celular el complemento ideal para todas las ocasiones y para guardar los momentos que llenan de felicidad”.
Por su parte, Camacho explicó que “la moda ha ido evolucionando a tal punto que se ha convertido en un proceso experiencial”. Por eso, considera que lo que une sus diseños con la apuesta de esta empresa es que “utilizan la tecnología para construir un estilo de vida más allá de una intención comercial, que procura inspirar, transmitir emocionalidad genuina y conectar con los demás”.
“Beatriz Camacho y vivo comparten valores afines, ambas marcas se inspiran en la naturaleza y en los colores para poder crear piezas y momentos sorprendentes. Por eso esperamos sorprenderlos con esta colección y lograr brindarles una experiencia cálida, llena de color y vida”, finalizó la ejecutiva Paula Parra.
