“Contratar alimentos en el nivel central no es garantía”: Jairo Parada
Economista Jairo Parada dice que hay que evaluar contratación desde el nivel central. Directora regional Atlántico “respeta la decisión”.
Frente a la decisión de la directora nacional del ICBF, Cristina Plazas, de trasladar para Bogotá el próximo año los procesos de contratación de los Centros de Desarrollo Infantil (CDI) de todo el país, la directora regional de la entidad, Yolanda Ruiz Pinzón, señaló que acata la medida y que es “obediente” de las propuestas emitidas por el nivel central.
Jairo Parada Corrales, economista de la Universidad del Atlántico y docente de la Universidad del Norte, opinó que lo que está indicando la dirección del ICBF es “un fracaso” en el tema de la contratación de los operadores de los CDI del Departamento.
En su concepto, el problema central que llevó a tomar la decisión de la directora del ICBF es, al parecer, un tema de corrupción, no solo en el Atlántico sino en otras regiones del país. “Contrataron a quienes no tenían la capacidad de manejar esos contratos y lo resuelven es centralizando ese proceso en Bogotá”.
Sin embargo, el economista manifestó que hoy no es garantía que en el nivel central no vaya a haber corrupción al momento de la contratación. “Es de suponer que en el nivel central no hay corrupción, pero en Colombia no estamos seguros de eso. Ya no”, consideró.
Finalmente, Parada sostuvo que aparte de que se lleven los procesos de contratación de las regiones hacia la capital del país, lo que debe indicar la dirección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar es si realmente ha habido corrupción en la contratación de los operadores de los centros de atención de menores y, más allá, quiénes son los que están detrás de sus representantes legales.
“Importa cumplir”. En diálogo con EL HERALDO, Ruiz Pinzón manifestó que lo que “importa” es que las obligaciones pactadas en los contratos de aportes “sean cumplidas por los operadores” y que estos asuman el manejo de los centros de atención para menores entre los cero y cinco años.
Días atrás, cuando se conoció la situación que puso en evidencia la Secretaría de Salud Departamental con los alimentos contaminados que eran suministrados a niños del Atlántico, la directora nacional de Primera Infancia Karen Abudinén explicó que en vista de estas situaciones registradas, no solo en esta zona sino en otras del territorio nacional, la dirección del Instituto, en cabeza de Cristina Plazas, consideró que para el próximo año se escogería un banco de oferentes a nivel nacional y de esta forma se elegirían los mejores operadores de los CDI.
Abudinén precisó que debido a las “deficiencias” notadas en las 17.000 visitas hechas este año por el equipo de inspección del ICBF, compuesto por 600 funcionarios, se vieron en “la necesidad de hacer un banco de oferentes para que sean los mejores los que presten el servicio de primera infancia”.
Ante esto, la directora Regional reiteró que era “respetuosa” de la decisión de la directora, y que con esto, a su juicio, lo que buscaba el nivel central era que se cumplieran las obligaciones y que el servicio de los operadores llegue a los niños como debe ser.
