El Heraldo
Sepelio de Jeison Vásquez Cabrera, de 17 años. Cortesía
Judicial

Nada que reclaman cuerpo de joven linchado en Luruaco

Pobladores rechazan que sea sepultado en el municipio. Se cumplieron exequias del joven de 17 años.

Hasta las 6:00 p.m. de ayer,  el cuerpo de Keiner Pérez Cabrera continuaba en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Barranquilla.

En comunicación con EL HERALDO, el director regional del instituto, Camilo Hernández, corroboró que “en el sistema se indica que está pendiente por entregar”.

Keiner Pérez fue linchado el martes anterior por un grupo de personas del corregimiento de Santa Cruz, Luruaco, luego de que  fuera señalado como el homicida del agricultor de 78 años, Antonio Abel Ávila Cabrera, hallado descuartizado el lunes en la noche en los predios de su finca Los Cocos, situada a las afueras de la población.

La comunidad envió un mensaje anónimo a través de redes sociales en el que rechazaban que el cuerpo de Pérez Cabrera fuera sepultado en el cementerio del corregimiento.

“No vamos a aceptar que entierren a Keiner alias el Culebrito, si lo entierran quemamos el cajón con él adentro”, se leía en una pancarta.

Pérez Cabrera y sus hermanos Álex y Elvis, así como su primo Sergio Cabrera y su tío Luis Cabrera son señalados por la población de conformar una banda denominada ‘los Culebros’ que tenía azotado el pueblo con constantes robos y mutilaciones a sus moradores.

Un triste adiós

 “Todo el mundo con las manos arriba, prepárense, pónganse las pilas, un saludo para mis seguidores, gracias a ellos somos los mejores”, este es el inicio del único tema que alcanzó a grabar  Jeison Vásquez Pérez, el joven de 17 años que cayó baleado el martes pasado tras la asonada en el corregimiento de Santa Cruz.

Ayer una multitud lo acompañó no en un escenario, como era su sueño, sino a su última morada en el campo santo de la población.

Haber salido a comprar algo en la tienda cerca a su casa fue el peor error que pudo cometer, pues lo dejó en el lugar incorrecto donde la muerte lo alcanzó.

Sus exequias se cumplieron en total calma a las 4:00 p.m.

Por órdenes de sus superiores, uniformados de la Policía evitaron acercarse mucho para no generar molestias entre la gente, puesto que una bala disparada desde una de sus armas le habría arrebatado la vida al joven, según confirmó su familia.

Entretanto, se conoció que para hoy está previsto también la sepultura de los restos mortales del campesino Antonio Abel Ávila Cabrera.

Su familia, quien ya recibió su cuerpo, lo vela al interior de su vivienda para hoy llevarlo al cementerio.

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