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Las siete conclusiones de la Fiscalía sobre el caso Dieb Maloof

EL HERALDO conoció el llamamiento a juicio al exsenador por el asesinato del exalcalde de Santo Tomás • Defensa apelará la decisión e insiste en que “está concebida sobre mentiras”.

El llamado a juicio contra Dieb Nicolás Maloof Cuse por la muerte del exalcalde de Santo Tomás, Nelson Mejía Sarmiento, es la primera decisión que la Fiscalía profiere por cargos de homicidio a un excongresista del departamento del Atlántico, vinculado con paramilitares.

La investigación a Maloof, de 51 años, surgió con una denuncia del abogado José Humberto Torres, coordinador de la mesa nacional de garantías. La presentó en noviembre de 2011 ante la Corte Suprema de Justicia y esta la remitió a la Fiscalía

El caso fue asignado al delegado 12 de la unidad de Derechos Humanos, Sergio Gómez Hernández, quien vinculó a Maloof a través de una indagatoria hecha el 15 de enero del año pasado. Las decisiones clave, sin embargo, se tomaron este año.

En febrero, el fiscal ordenó la detención de Maloof en una cárcel, pero se frustró porque el exsenador alegó dolencias durante su captura y fue recluido en una clínica.

En abril, un juzgado revocó la medida en su contra y ordenó la libertad de Maloof Cuse. Pero en julio, magistrados del Tribunal Superior de Barranquilla revocaron el fallo y reafirmaron la orden de detención.

El pasado jueves la Fiscalía llamó a juicio al excongresista. EL HERALDO conoció el documento de 119 páginas y extrajo las principales conclusiones del fiscal para considerar que este fue el “determinador” del asesinato que  ocurrió hace 11 años. Un sicario del paramilitarismo baleó el 29 de abril de 2004 a Mejía, antes de que almorzara junto con una abogada en un restaurante del barrio Recreo.

Ese día Mejía, quien se había enfrentado a los paramilitares y estaba suspendido por la Procuraduría, iba a ser notificado por la Gobernación de que retornaría a ejercer como Alcalde.

Crimen fue cometido por las AUC

Mejía fue asesinado por paramilitares del frente José Pablo Díaz, brazo armado y político del Bloque Norte de las AUC en el Atlántico y parte del Magdalena.

“Buscaban apoderarse del presupuesto de la salud en el municipio de Santo Tomás, para lo cual apoyaron la candidatura de la víctima como Alcalde y luego, a través de la instigación del señor Maloof Cuse, ordenaron su muerte por negarse a aceptar sus imposiciones”.

El fiscal 12 agrega que “al repasar la pruebas recolectadas” encontró “que el motivo principal para ordenar la muerte fue la negativa a entregar los recursos de la salud, los cuales eran solicitados para esa organización delictiva por parte de Dieb Maloof Cuse, lo que permite concluir que actuó como determinador”.

‘Antonio’ no descartó encargo

Édgar Ignacio Fierro Flórez, alias Don Antonio, no descartó una posible petición del exsenador Maloof, quien dirigió el extinto Movimiento Colombia Viva, para asesinar al alcalde de Santo Tomás. Fierro, excomandante del frente José Pablo Díaz, ratificó en una de sus declaraciones la cercanía del exparlamentario con las AUC.

“A mí el señor Maloof no me solicitó la muerte del doctor Mejía, yo no me atrevería a decir que a ninguno de los integrantes del frente le habría podido solicitar que se llevara a cabo ese hecho, pero lo que sí puedo asegurar es que a mí no me lo solicitó”, declaró Fierro.

Interés en contratos de salud

Mejía comenzó el 1° de enero de 2004 su administración sin deudas en el sector de la salud. La Fiscalía lo concluyó así por la información de 2003 y 2004 que un perito del CTI halló en la Contaduría General de la Nación sobre el Municipio. Estableció que “el presupuesto de gastos aprobado por la Asamblea del Atlántico ascendió a $2.051 millones”, pero quedó en $3.073 millones por una adición, y unos créditos y contracréditos.

El fiscal indicó que ese concepto “robustece la teoría de la Fiscalía, según la cual el homicidio obedeció a la intención de las Autodefensas de apropiarse de recursos de la salud de la administración de Santo Tomás, como se probó que lo hicieron en tantos otros municipios de la Costa Caribe colombiana”.

Perteneció a la causa paramilitar



Maloof fue condenado en 2008 por un juzgado de Santa Marta, después de que aceptó cargos por concierto para delinquir. “Dicho en otras palabras, también reconoció ser parte de las Autodefensas y, por tanto, no es posible que pretenda eludir su responsabilidad en los hechos que cometió el ala militar del grupo al cual perteneció; mucho menos si existe prueba que lo vincula de manera directa en las decisiones que tomaba la misma”, señala el fiscal.

Para Hernández, la “pertenencia” de Maloof a las AUC, como senador y presidente del partido Colombia Viva, hace creíble la versión de que se reunió con Fierro para planear el homicidio. “Fue condenado precisamente por sus alianzas con el grupo de paramilitares que ejecutó el crimen”.

Tuvieron diferencias políticas

En indagatoria, Maloof sostuvo que no tenía sentido asesinar al único alcalde electo por Colombia Viva en el Atlántico, ya que hubiese sido una pérdida.

En el expediente, no obstante, hay indicios de que no estaba conforme con las decisiones de Mejía, ni mucho menos con su equipo de trabajo conformado por integrantes del movimiento denominado ‘Por ti, Santo Tomás’.

La Fiscalía menciona que las diferencias eran tan palpables que la Gobernación del Atlántico le solicitó a Colombia Viva que designara una terna para reemplazarlo mientras estaba suspendido y Maloof propuso nombres sin ninguna conexión con su movimiento. “Significa que no estaba dispuesto a perder el control de la administración municipal”, señala el fiscal.

Ni 'los perros' ni líos con rivales

En versiones libres de Justicia y Paz, Fierro declaró primero que a Mejía lo habían matado por conformar una banda llamada los Perros, pero después se retractó.

“Si hubiese tenido la sospecha de que Mejía tenía vínculos con un grupo criminal diferente a los que apoyaron los paramilitares, no hubiese respaldado su candidatura para la Alcaldía de Santo Tomás”, estimó Hernández.

Otra hipótesis apuntaba a una venganza del ‘Cartel del embargo’, como denominaron las supuestas deudas que el Municipio tenía con exempleados representados por el abogado José Maldonado Fontalvo (asesinado en 2012), cuya viuda dijo: “Por eso no pudo haber problema entre ellos, porque primero matan a Nelson y después capturan a mi esposo”.

Asesinato para mostrar poderío



La Fiscalía calificó de agravado el homicidio endilgado a Maloof.

Primero, porque Mejía estaba indefenso cuando fue asesinado. “Sentado y de espaldas con respecto al lugar desde el cual le dispararon”.

Segundo, porque se trató de un crimen selectivo. “Este tipo de homicidios tenían como finalidad amedrentar y aterrorizar a la población civil (...), buscando demostrar el poderío criminal que lograron las Autodefensas”.

Tercero, por el rol de la víctima y lo que dispone la ley penal colombiana: que sea o haya sido servidor público, (...) dirigente político. “Esto quiere decir lógicamente que si Nelson Mejía Sarmiento no se hubiese desempeñado en esa época como Alcalde del municipio, los paramilitares seguramente no lo habrían asesinado”.

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