La escalofriante confesión del asesino de Edixmar
Jairo Cordero Barraza fue capturado después de reportar la desaparición de la joven de 23 años.
Jairo Armando Cordero Barraza se dirigió la noche del lunes hasta las instalaciones de la URI de la Fiscalía a colocar una denuncia por la supuesta desaparición de Edixmar Henríquez González, su pareja sentimental. El ente investigador sabía quién era el hombre, pues tenía en su poder imágenes de videos de seguridad en los que se le veía, aparentemente, tratando de quemar algo en la Vía al Mar.
Edixmar había sido hallada muerta, con síntomas de violencia y quemada, la mañana del lunes en el sector conocido como la ‘Ye de los chinos’, en el municipio de Puerto Colombia, Atlántico, es decir, unas doce horas antes de que el hombre fuera a colocar el reporte por su desaparición.
El consorcio de esa zona del área metropolitana de Barranquilla se percató del escabroso hallazgo y alertó a la Policía. El CTI de la Fiscalía realizó la inspección y el levantamiento del cuerpo, que no fue identificado sino hasta la tarde del mismo día.
Al tiempo, Cordero Barraza estaba en la URI, ante los investigadores, ofreciendo detalles de la mujer para poder dar con su paradero. A medida que el hombre hablaba, los agentes percibían que se ponía nervioso. Su estrategia para contar cómo habían trascurrido las 24 horas antes de la desaparición de Edixmar no le dieron resultados. El hombre no tuvo otra salida que confesar que había asesinado a su compañera.
El hombre narró que el sábado por la noche, en su vivienda ubicada en la carrera 37B con calle 27, del barrio Santa Inés, de Soledad, golpeó a la joven de 23 años con sus manos en repetidas ocasiones, incluso la tiró fuertemente contra una pared y posteriormente la asfixió.
Al parecer, Cordero Barraza estuvo 24 horas con el cuerpo dentro de su apartamento; y el domingo por la noche (11:00 p. m.), aprovechando los 165 centímetros de altura de Edixmar contorsionó con los 190 suyos todo el cuerpo de la mujer, lo metió en una maleta que tenía en la casa y llamó a un taxi, a través de la línea 322 con rumbo a Puerto Colombia.
Al llegar a su destino, el confeso feminicida arrojó el cuerpo al suelo, lo roció con gas y le prendió fuego, para luego darse a la huida caminando con destino a Barranquilla.
El hijo de Edixmar Henríquez González, quien tan solo tiene tres años, habría presenciado la escena en la que su papá asesinó a su madre. Tras el crimen, el menor fue llevado a casa de su abuela paterna, donde el hombre de 36 años lo dejó para que “pasara el día allá”.
EL HERALDO conoció que todos los días en que la mujer se iba para el trabajo, el niño quedaba a cargo de una prima, la cual reside a escasas tres cuadras en el mismo sector.
El niño se encuentra con su abuela paterna en el barrio San Felipe; sin embargo, la Fiscalía habría mencionado a los familiares que se le hará entrega solo a la mamá de Edixmar, quien viene desde Venezuela a reclamar el cuerpo de su hija en las instalaciones de Medicina Legal.
La relación de Edixmar y Cordero se habría materializado en 2017 cuando llegó a Barranquilla, pero desde antes la pareja se había conocido a través de redes sociales cuando ella estaba en Venezuela. Luego de estar 5 meses en la capital del Atlántico, la mujer confesó a sus familiares en el vecino país que estaba en una relación sentimental con el hombre.
Antes del suceso, Cordero trabajaba en un negocio de zapatos, mientras que la mujer lo hacía en una panadería ubicada en la carrera 46 con calle 90, en cercanías a la Universidad Autónoma del Caribe.
“Parece que estuviéramos viviendo una novela”: Los familiares de Edixmar Henríquez González, la joven hallada incinerada en Puerto Colombia, sienten que están atrapados en una “novela de terror” protagonizada por Jairo Armando Cordero Barraza, su pareja sentimental, quien habría sido el presunto responsable de su muerte.
“Es bastante doloroso y muy triste y mucho más por la forma como pasó, siento como si fuese una novela o algo que veía en las noticias y ahora lo estoy viviendo”, dijo una prima de la víctima en dialogo con EL HERALDO.
El descubrimiento del cuerpo fue informado la mañana de este lunes. Sin embargo el asesinato, aparentemente, ocurrió el sábado por la noche. La familia de la joven de 23 años se enteró de su desaparición por boca del hombre el mismo lunes: “Él nos llamó y dijo que estaba desaparecida apenas, que no había llegado a la casa y nos dijo cómo iba vestida”.
“Nosotros entramos en alerta cuando él llama a mi casa para decirnos que mi prima estaba desaparecida, que no había llegado a su apartamento, ni al trabajo, inmediatamente comenzamos a regar las fotos de ella en redes sociales y a comunicarnos con sus compañeros”, afirmó la mujer.
Para los allegados de Henríquez Hernández la relación de ellos era, aparentemente, normal: “Tenían casi 5 años juntos, cuando ella llegó a Barranquilla y a los meses se metieron (…) de maltratos ella nunca habló, solo comentó problemas de pareja normales, pero hasta donde yo sé nunca hubo alguna agresión”, indicó la familiar.
Asimismo, la prima confirmó que el presunto responsable “era muy educado y tranquilo, por eso es que nosotros jamás nos esperamos que esto sucediera”.
