El Heraldo
Momento en que Elsa Ramos Fontalvo es llevada a la URI de la Fiscalía en calidad de capturada, por su presunta participación en la organización
Judicial

“El uniformado daba pistas de otras ollas a la Mona”: Fiscalía

La Fiscalía desmanteló una de las caletas de venta de droga con mayor alcance de distribución en el suroccidente de Barranquilla, llamada el ‘Taco de la Mona’. 

Como Fénix, el ave de la mitología griega que se consumía bajo el fuego cada 500 años para luego resurgir de las cenizas, fue bautizada la operación de la Fiscalía y el Ejército que llevó a desmantelar a finales del pasado mes de febrero una caleta u olla de droga llamada el ‘Taco de la Mona’, la cual estaba ocultaba en una vivienda con fachada de casa de familia en el barrio El Bosque, en la localidad Suroccidente de Barranquilla.

En el operativo, miembros del CTI y de la Fiscalía 39 local de la Unidad Antinarcóticos del Atlántico URA, reportaron las capturas de siete personas: Lorayne María Ramos Fontalvo, ‘La mona’, presunta cabecilla del grupo. Su captura se produjo en horas de la noche en el sector de Las Gardenias, donde al parecer pretendía huir del cerco de las autoridades.

De igual forma, Elsa Ramos Fontalvo, alias Elsa, hermana de la cabecilla de la organización; Édgar Alexander Barrios Navarro, alias Alex, quien estaría a cargo de una de las caletas; Edwin Aníbal Bovea Garcés, alias Flaco, expendedor; Luis Carlos Angulo Donado, alias Cachaco, expendedor, y Denny María Anaya Castro, alias Denis, expendedora de la caleta de ‘El Beta’, sitio ubicado también en El Bosque que según las autoridades sería utilizado como punto satélite y sucursal de la caleta el ‘Taco de la mona’ para el acopio y distribución de sustancias estupefacientes.

El otro capturado fue identificado como Pedro Navarro Castillo, patrullero de la Policía adscrito a la estación de Policía de El Bosque y que de acuerdo con las autoridades sería uno de los uniformados que colaboraba y permitía la operación de El Taco de la Mona.

 

Un policía se infiltró en la organización y grabó todo.

Casi un mes en la boca del lobo 

“La lucha contra el narcotráfico es una constante, le cortas un brazo operativo y te salen dos, por eso hay que ser perseverantes y resurgir, tal vez por eso, este operativo se bautizó Fénix”, comentó uno de los investigadores que participó en la investigación.

De acuerdo con lo entregado por el delegado de la Fiscalía de la URA ante un juez de control de garantías, casi un mes duraron los detectives, visitando la zona, familiarizándose con los sospechosos, “muchas veces los investigadores se hicieron pasar por consumidores o compradores de la droga, iban con equipos de comunicación y grabación para recopilar material probatorio”.  “En esas visitas constantes se constató lo dicho por denunciantes y habitantes del sector, uniformados estaban recibiendo dineros por dejar operar esta olla de droga”, puntualizó el delegado del ente acusador ante el togado, en audiencias de legalización de captura e imputación de cargos.

Sobre los investigados, se conoció que llevaban cuatro años en el negocio ilegal de venta de estupefacientes, así como también manejar la parte financiera de la estructura criminal.

En el caso del uniformado, la Fiscalía descubrió que compartía información privilegiada sobre operativos y puestos de control que iban a realizar sus propios compañeros en el barrio donde estaba ejercido el control de la banda.

Este también, de acuerdo con la investigación, podía “alertar sobre los movimientos de otras estructuras de microtráfico o de las mismas autoridades”, explicó el fiscal.

Y agregó que “con este tipo de operaciones, donde el uniformado al parecer daba pista de otras ollas de competencia para la Mona para que fueran destruidas, la casa que aparentaba ser de una familia del sector, logró aumentar sus volúmenes de acopio y venta de narcóticos para surtir a consumidores de casi 70 barrios de esta localidad”.

La quincena de La Mona

De acuerdo con la investigación develada en diligencias judiciales ante el Juez 18 Penal Municipal con funciones de control de garantías, la Fiscalía pudo establecer que Pedro Navarro Castillo, recibía un pago de $400 mil cada quincena por el “permiso de operación en la zona y labor de contrainteligencia a favor del grupo delincuencial”.

Sin embargo, en audiencias de legalización de captura, el togado decretó ilegalidad en el operativo de captura contra Navarro Castillo por una irregularidad en la aprehensión. “El uniformado fue puesto al escarnio de sus compañeros de la Policía al obligarlo a quitarse el uniforme durante la formación que se realizó en la estación donde este está adscrito”, argumentó el togado sobre su decisión, empero aclaró que aún se encuentra vinculado a la investigación.

 

Las transacciones eran hechas en presencia de menores.

Menores de edad: los correos del Taco 

Dentro de las conductas delictivas que utilizaba la olla de droga liderada por Ramos Fontalvo, según la autoridad, estaba la utilización de menores para el transporte de drogas, dineros, y mandados correspondientes al tráfico de estupefacientes. “Es así como las drogas poco a poco llegaban hasta las puertas de los colegios”, comentó el investigador del caso y agregó que “es fundamental la vigilancia de la familia, que estén pendientes con quien se relacionan sus hijos”.

Un sospechoso ‘negativo’. A pesar de las capturas de los siete sospechosos, las autoridades se llevaron una amarga sorpresa en el lugar del allanamiento: “el sitio estaba limpio, no se encontró ni un cigarrillo de droga, es como si los hubieran alertado”, agregó el investigador consultado.

Por este hecho, la Fiscalía abrió una investigación paralela para establecer si alguien dentro de la fuerza pública alertó a los procesados sobre el operativo. La Fiscalía señaló además que en cuestión de días se adelantarán más capturas.

Los seis procesados a quienes les fue decretada legalidad en el procedimiento de captura, no aceptaron cargos por los delitos de concierto para delinquir delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes; concierto para delinquir; destinación ilícita de muebles o inmuebles; cohecho impropio, cohecho por dar u ofrecer y uso de menores para comisión de delitos.

Para este martes a las 4:00 de la tarde en el Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla, está prevista la resolución por parte del togado de la medida de aseguramiento intramural solicitada por la Fiscalía contra Lorayne y Elsa Ramos Fontalvo, Edgar Barrios Navarro, Edwin Bovea Garcés, Luis Angulo Donado y Denny Anaya Donado.

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