El Heraldo
Ana Cristina Daza Cuevas junto a su expareja Jaime Jhonson Morrow y sus tres pequeños. Cortesía
Judicial

El drama de una barranquillera, víctima de violencia intrafamiliar, a la que le quitaron sus hijos

La mujer de 33 años no ve a los tres pequeños desde el 21 de febrero y a causa de la pandemia, no obtiene ninguna respuesta por parte de las autoridades competentes. Vive en un hotel tras separarse del señalado agresor.

Trece años de relación, tres hijos de 8, 2 y 1 año y dos denuncias por violencia intrafamiliar fue lo quedó entre la barranquillera Ana Cristina Daza Cuevas, de 33 años, y el estadounidense Jaime Jhonson Morrow, de 63.

La mujer, que desde octubre de 2018 reside en el municipio de Calarcá, en Quindío, dice denunció a su expareja ante la Fiscalía General de la Nación, pero que no ha recibido ayuda de las autoridades competentes y para colmo, el pasado 21 de febrero del 2020, sus hijos fueron separados de ella por orden de una Comisaría de Familia.

De acuerdo a lo expuesto por Daza Cuevas, en la citada fecha habría recibido la última agresión por parte del norteamericano dentro de la vivienda que compartían en el condominio Las Delicias, en el municipio cafetero.

“Él me levantó a patadas y caminaba con su arma (de fuego) en las manos por toda la casa, se encerró en el cuarto con los dos bebes (de 2 y 1 año), yo le puse unos audífonos a mi hija de 8 años y la guardé en su cuarto para que no escuchara nada, él se encerró en el cuarto que compartíamos con los niños. Yo gritaba muy fuerte para que me abriera la puerta y pues lo que estaba haciendo era cargar el arma. Luego abrió la puerta y me decía que me alejara, yo le decía que si me iba a matar lo hiciera enseguida, pero que ya no me dejaba más de él”, relató la barranquillera.

Acto seguido -cuenta la mujer- el hombre salió de la casa en busca de las autoridades.

“Cuando volvió, me acusó a mí de que yo era quien había ocasionado todo, él estaba tan tranquilo y calmado que los policías optaron por creerle, aunque yo tenía el antebrazo derecho golpeado, la espalda, las nalgas y la cara. En ese momento llegó un taxi que previamente había pedido y como yo tenía todo recogido con la intención de regresarnos a Barranquilla, pero la policía nos llevó fue a la Comisaría de Familia”, contó Daza Cuevas.

En el lugar, lejos de recibir algún tipo de ayuda en su condición de afectada, revela la mujer, que la comisaria encargada se fue en su contra.

“Una vez llegamos la señora Sandra Milena Hernández Sánchez me intrató, me insultó por un acto ocurrido en diciembre dónde ella intervino y pues llena de rabia me dijo que la tenía aburrida y que los niños, así por vía oral, se iban para un hogar sustituto hasta una nueva medida”, reveló Daza Cuevas.

La agresión recibida presuntamente por Jaime Morrow contra Ana Daza fue denunciada ante la Fiscalía y la valoración médica hecha por el Instituto de Medicina Legal le otorgó 15 días de incapacidad por los golpes recibidos; sin embargo, ya que según ella no ha recibido la atención necesaria por parte de las autoridades competentes decidió acudir a los medios para hacer público “el tormento que hemos vivido mis hijos y yo al lado de ese monstruo”.

“Se hizo una reunión por parte de la Secretaría de Familia del Quindío dónde se acordó que 15 días después de esa reunión, los niños se los iban a entregar a mi mamá pero eso jamás pasó. La secretaria de Familia ahora le tira la pelota a la comisaria, la comisaria a Bienestar, estos dicen que no es su competencia y por último hoy la comisaria dijo que por la pandemia no se había efectuado la entrega y eso debió ser el pasado 31 de marzo”, dijo la mujer y continuó “yo necesito que Bienestar Familiar se apersone del caso, se levanté un acta y me reintegren los niños para así yo poder ir ante un Juez de Familia con todas las pruebas correspondientes y que sea un Juez de la República quien decida qué se debe hacer”.

Facsímil de la denuncia hecha ante la Fiscalía General de la Nación.

No es la primera agresión

Es común que las mujeres víctimas de violencia intrafamiliar no denuncien al primer suceso dado que conservan las esperanzas que una nueva agresión no vuelva a ocurrir, pero está más que comprobado que eso no pasa, y en el caso de Ana Cristina Daza ocurrió exactamente lo mismo.

“Está no es la primera vez que me maltrata físicamente, emocional, económica y sicológicamente, de hecho, en Medicina Legal en Barranquilla reposa también una incapacidad por una fractura de clavícula hace como 4 años, pero realmente desde que iniciamos la relación. Pero yo era muy joven e inexperta, tenía 19 años y él tenía 50. Él tiene una agencia matrimonial que casa gringos con jóvenes latinas, y nos conocimos en su oficina en el barrio Porvenir (Barranquilla) cuando yo llegué a trabajar como secretaria y allí empezó la relación” contó.

Según Daza Cuevas, enviudó de su primer matrimonio de Jaime Morrow, llegó a Colombia hace más de 17 años y se casó con una mujer natural de Santa Marta de quien se divorció legalmente en 2015.

Situación actual

Desde el pasado mes de febrero Ana Cristina Daza Cuevas está alojada en un hotel en Calarcá a la espera de resolver la situación con sus niños y que estos le sean retornados, pero dice que tanto los recursos como la fuerza de seguir, se le agotan.

“No es fácil esto, en increíble que no solo sea víctima de este señor sino también del Estado colombiano que me vulnera mis derechos y me quita a mis hijos, sobre todo, en este momento de la pandemia que no podrían estar mejor que con su madre. Mi mamá, una mujer de 73 años se vino de Barranquilla para ayudarme y desde entonces estamos en un hotel y ya no puedo seguir solventando la situación”.

Pese a que los hechos ocurrieron desde febrero, solo hasta ayer llegó la citación para la valoración sicológica forense, que fue programada para el próximo mes de mayo; no obstante, la víctima de violencia intrafamiliar pide además que sus hijos también sean sometidos a una valoración física y sicológica por parte del Instituto Nacional de Medicina Legal para que se determine si estos han sido sometidos a algún tipo de abuso.

Facsímil de la denuncia hecha ante la Fiscalía General de la Nación.
Facebook
Twitter
Messenger
Whatsapp
Convierta a El Heraldo en su fuente de noticias
X
COMO REPORTAR A WASAPEA
1. Agrega a tu celular el número de Wasapea a EL HERALDO: +57 310 438 3838
2. Envía tus reportes, denuncias y opiniones a través de textos, fotografías y videos. Recuerda grabar y fotografiar los hechos horizontalmente.
3. EL HERALDO se encargará de hacer seguimiento a la información para luego publicarla en nuestros sitio web.
4. Recuerda que puedes enviarnos un video selfie relatándonos la situación.