Hoy hay mucho asombro entre los vecinos del barrio Santo Domingo de Guzmán, más los que habitan cerca del gimnasio Curvez Luz, localizado en la carrera 2 con calle 88 y propiedad de Luz Estella Machado Rodríguez, la mujer de 54 años de edad, amante del ejercicio, que murió en la noche de este jueves 31 de julio luego de intentar practicarse un procedimiento estético en la vivienda de una amiga.
“Ella estuvo normal ayer jueves (8:00 a. m.), en el gimnasio. La vimos haciendo ejercicio en la caminadora y luego continuó moviéndose por el lugar. Habló con clientes, como siempre, hasta que se fue”, comunicó un vecino del negocio.
Luego, esta misma persona manifestó que a eso de las 9:00 de la noche del mismo jueves varios vecinos del gimnasio se reunieron en la puerta del negocio, pues se había regado la noticia de que Luz Estella había fallecido.
“Nosotros llegamos hasta acá, a la puerta del gimnasio, porque pensamos que ella había muerto ahí adentro. Después fue que nos enteramos que ella había fallecido en la Clínica Murillo”, señaló el vecino de Curvez Luz.

La Policía Metropolitana de Barranquilla confirmó que el deceso de Luz Estella Machado fue notificado por personal de salud de la Clínica, ubicada en la calle 45 con carrera 20, entre 7:00 y 8:00 de la noche.
Hasta ese lugar había llegado acompañada de personas que manifestaron que ella se había sometido a un procedimiento estético en el apartamento de una amiga, ubicado en la carrera 31 con calle 45, en el barrio Chiquinquirá.
Según versiones tomadas por las autoridades, poco después de iniciado el procedimiento, la mujer empezó a sentirse mal. Por eso fue trasladada al centro asistencial y en el ingreso a urgencia se evidenció que llegaba en estado “jadeante”. Luego se produjo su deceso.
La Sijín asumió la inspección técnica al cadáver y, en medio de las primeras pesquisas dentro del caso, se estableció que la mujer habría intentado practicarse un “relleno en los glúteos” con “ampollas”.
Las autoridades buscan determinar ahora las circunstancias exactas de la intervención, así como la identidad de la persona que la practicó y si contaba con los permisos y la formación profesional requerida.
Este tipo de procedimientos clandestinos, realizados en lugares no habilitados, han sido objeto de reiteradas advertencias por parte de las autoridades de salud, debido a los riesgos que representan para la vida e integridad de quienes se los practican. No obstante, en esta ocasión la Secretaría de Salud distrital no se ha pronunciado oficialmente sobre el caso.
Lamentablemente, este no es el primer caso de fallecimientos por intervenciones estéticas que se conocen en la ciudad.
El pasado 24 de abril se reportó el fallecimiento de Carolina Isabel Marenco Lauren, una mujer que murió en un consultorio médico estético ubicado en la carrera 49C con calle 92, sector del norte de la capital.
La mujer se encontraba sometiéndose a un procedimiento estético, específicamente una liposucción, cuando se presentó su deceso en medio de la intervención.
En su momento se confirmó que Marenco Laurens habría acordado con una compañera de trabajo citarse para tal procedimiento y este se inició sin el consentimiento de los representantes del consultorio o centro de estética donde sucedió el deceso.