Caso Liliana Segovia: 'Hermano ese ‘overhaul’ te lo recomiendo. No pueden quedar rastros de fluidos'

Nuevos elementos se dieron a conocer en la audiencia de solicitud de aseguramiento contra Jairo Medina Vega, el confeso asesino de Liliana Segovia Navarro, la mujer que fue hallada muerta el pasado miércoles 2 de marzo en un sector enmontado de Tubará después de su desaparición el 28 de febrero, en Barranquilla.

En la diligencia, desarrollada de manera virtual y presidida por el juez Décimo Penal Municipal, Manuel Augusto López, el fiscal Rodrigo Restrepo, del ente investigador y acusador, para dar respaldo a su solicitud de aseguramiento en centro carcelario para el imputado, mencionó entre su exposición que él era consciente de lo que estaba haciendo y, además, reveló un audio que este envió vía WhatsApp a un hombre, propietario de un taller en el municipio de Soledad, en el que le pedía un favor con el lavado del vehículo en el que se transportó el cadáver de Liliana Segovia.

'Tenemos evidencia testimonial, técnica y un interrogatorio y confesión de Jairo Medina Vega… Pero los testigos son diáfanos, coincidentes, claros en señalar en que presuntamente Jairo Medina Vega es el probable autor de estos hechos…Esta persona (dueño del taller) rindió un interrogatorio y la Fiscalía consiguió además un audio que voy a exponer a continuación…', expresó el fiscal Restrepo.

En ese sentido, el investigador luego preparó su micrófono y expuso la prueba obtenida: 'Mi hermano, el ‘overhaul’ te lo recomiendo al 100%, marica. Esa cojinería debe oler como un carro nuevo, de concesionario', le pidió Jairo al dueño del taller, como quedó demostrado en el audio.

Seguidamente, se escucha la que sería otra vez la voz de Medina Vega: 'No pueden quedar rastros de fluidos, de nada ahí. Te agradezco, hermano', agregó el presunto autor del homicidio.

El carro en mención, según el fiscal, es un Chevrolet Ónix color blanco, placas NBL-911, al parecer, propiedad de Medina Vega, en el que habría permanecido el 28 de febrero el cuerpo sin vida de Liliana Segovia por alrededor de 13 horas, después de su muerte, mientras el sospechoso iba a Valledupar a vender la camioneta de la mujer y luego regresó a Barranquilla para deshacerse del cadáver.

Frente a ese regreso a la capital del Atlántico el mismo 28, el fiscal también reveló que Medina Vega llegó alrededor de las 8:00 de la noche de ese día y se puso en contacto con un primo para ir a recoger el vehículo donde permanecía el cuerpo.

'Después de recoger el carro, le dio plata a su primo para que comprara un tanque azul plástico, que, según se supo, costó 150 mil pesos. Luego el señor Medina Vega se va en el carro con el cuerpo y con el tanque para una residencia del Centro de Barranquilla. Ingresó al motel a las 9:22 de la noche y salió exactamente a las 9:30 p.m., es decir solo duró 8 minutos para meter el cadáver en el tanque, ponerle la bolsa en la cabeza, la cinta, e irse para su casa…', mencionó el fiscal Restrepo.

Ante ese material probatorio y los otros que ya se habían expuesto en la solicitud de medida de aseguramiento sobre como la forma cómo se le quitó la vida a la mujer, cómo le fue hurtado el vehículo y cómo le saquearon la cuenta virtual, pues el dinero aún no aparece, el representante del ente investigador reconoció que 'una detención domiciliara u otra, no es procedente'.

Esta solicitud también fue respaldada por el representante del Ministerio Público, David de Aguas Urrea, solicitó al togado la imposición de una medida de aseguramiento intramural.

En el momento de intervención del defensor de Medina Vega, el penalista Leovaldis Aarón Acuña, pidió un plazo de 2 o 3 días hábiles, con el fin de recabar unas pruebas que, según él, pueden respaldar su solicitud de que su defendido fuera cobijado con detención domiciliaria.

Aarón Acuña se basó en conceptos de ley para obtener el plazo, y el juez, de manera equitativa, acogió la solicitud y postergó la diligencia para el próximo martes 15 de marzo.