El Editorial | ¿Y los usuarios de Transmetro qué?
Amanece por séptimo día Barranquilla sin el servicio del sistema de transporte masivo, mientras tanto los más de 60 mil usuarios que diariamente se movilizaban siguen en aprietos para llegar a sus sitios de estudio y trabajo.
Quién podría imaginar que la segunda parálisis de Transmetro en lo que va corrido del año se prolongaría hasta alcanzar una semana sin operaciones.
Amanece por séptimo día Barranquilla sin el servicio del sistema de transporte masivo, mientras tanto los más de 60 mil usuarios que diariamente se movilizaban siguen en aprietos para llegar a sus sitios de estudio y trabajo.
La distancia entre los operadores Sistur y Metrocaribe con el ente gestor, lejos de acortarse, se profundiza por cuenta de las posiciones encontradas frente a los compromisos que unos y otros dicen tener para darle la vuelta a una problemática que se agudiza cada día y que –al menos de momento– pareciera no tener solución a la vista.
Es inconcebible que la cuarta ciudad más importante del país complete una semana sin su principal sistema de transporte público. Pierde el Distrito por el problema que le significa; pierden los operadores que no reciben nuevos ingresos por operar y se ahonda su crisis; pero ante todo pierden los usuarios del sistema, al final los más afectados.
Los bancos liberaron $1.700 millones para que Sistur y Metrocaribe pudieran retomar la operación de Transmetro, pero ellos insistieron en diálogo con EL HERALDO que los recursos alcanzarían para operar solo unos días más, “para luego volver nuevamente a un pare obligado por la falta de recursos”. Aseguran que “un operador pudiera salir por unos días a operar y el otro no”, por ello reiteran que su intención es reiniciar actividades para continuar prestando el servicio hasta que finalice el contrato de concesión, pero que para ello deben contar con las garantías ante el sector bancario.
Frente a la posición expresada por las empresas que operan el sistema queda claro que la liberación de los recursos no es para ellos suficiente y Transmetro seguirá paralizado.
Y aquí viene entonces otro cuello de botella. Fuentes de la junta directiva del ente gestor explicaron que al ser la demanda de pasajeros una responsabilidad de los concesionarios se podría considerar que se estaría dando en este caso un incumplimiento en las cláusulas contractuales que legalmente podrían llevar a la caducidad del contrato.
La pita se enreda cada día más en este asunto, crucial y fundamental para miles de barranquilleros y soledeños que tienen como principal medio para movilizarse el sistema de transporte masivo.
En este círculo vicioso de responsabilidades, de peticiones, de señalamientos, solo queda preguntarse por lo más importante: ¿y los usuarios de Transmetro qué? ¿Cómo hacen para contar con un sistema efectivo, seguro y permanente?
Más Editoriales
Pésimo mensaje de austeridad en el gobierno del cambio
De manera recurrente los hechos nos demuestran que Colombia, al margen de quien la gobierne, es un país de injustificables excesos y brutales contrastes. Bastante descorazonador por donde se mire. En vez de estar hablando acerca del devastador in
En defensa del ‘perro guardián’ de la democracia
Este 3 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Libertad de Prensa, fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993 para reconocer los principios de este derecho fundamental, evaluar la situación en la que se encuentra p
PAE a cuentagotas
Justo cuando comienza el cuarto mes del año en curso y dos meses después del inicio del calendario académico, de los siete departamentos de la región Caribe tres no han comenzado aún a ejecutar el Programa de Alimentación Escolar al que est
Inflación sin control
La decisión de la Junta Directiva del Banco de la República de subir las tasas de interés al 5 %, en un nuevo intento para contener la galopante inflación en el país, podría quedarse corta o ser insuficiente ante el alza de los precios que,