El Heraldo
Vista panorámica de Barranquilla.
Economía

La Costa tiene menor desempleo, pero más informalidad

El Observatorio del Mercado Laboral de Cartagena analiza el mercado laboral de la región.

Hay 5 capitales costeñas (Barranquilla, Sincelejo, Santa Marta, Cartagena y Montería) entre las 13 con menor tasa de desempleo en el país, pero también hay 5 entre las 10 con mayor proporción de población ocupada informal (Sincelejo, Santa Marta, Riohacha, Montería y Valledupar).

El Observatorio del Mercado Laboral de Cartagena elaboró un análisis del mercado laboral de la región Caribe en el periodo agosto a octubre de 2018, según las cifras del Dane.

Dewin Pérez, director del Observatorio, señala que no basta con crear más empleos en una ciudad, pues el ritmo de creación de los mismos debe ser superior al crecimiento de la población en edad laboral y al de la tasa global de participación (número de personas que buscan empleo), solo así se podrá aumentar el coeficiente de empleo. 

Barranquilla, desempleo sigue en un dígito

La ciudad y su área metropolitana tiene la menor tasa de desempleo y la cuarta del pais. Si bien el coeficiente de empleo tuvo un leve aumento, fue inferior al de la participación laboral, lo que llevó a que la tasa de desempleo aumentara de 8,6% entre agosto y octubre de 2017 a 8,8% en el mismo periodo de 2018. En el trimestre se crearon unos 25 mil empleos frente a los que había en el año anterior, con un crecimiento del 2,8%, sin embargo, 29 mil personas entraron al mercado laboral buscando una oportunidad remunerada, lo que representa un crecimiento del 3% en la población económicamente activa, es decir, hubo más gente buscando empleo que los nuevos empleos que se crearon. Las personas que entraron al  mercado de trabajo, son un grupo representativo de 22 mil jóvenes que no tuvieron la posibilidad de acceder al sistema educativo y unas 7 mil personas que se habían mantenido inactivas y decidieron volver al mercado, más los flujos migratorios de población venezolana. En el periodo analizado la tasa de informalidad laboral fue de 55,2%. Por ramas de actividad económica las que más generaron empleo en Barranquilla fueron: comercio, restaurante y hoteles que aporta el 32% de empleo total; servicios comunales, sociales y personales, el 22%; industria manufacturera, el 16%; transporte, almacenamiento y comunicaciones, el 11%; construcción el 8%; y actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler, el 8%.

Cartagena, 85 mil trabajadores insatisfechos

Pese a que la tasa de ocupación se mantuvo en 52,3% frente al mismo periodo de 2017, la tasa de desempleo aumentó del 8,4% al 9,6% por una mayor participación laboral (57,0% vs 57,8%). La tasa de subempleo subjetivo creció en más de 4 puntos porcentuales y pasó de 13,9% a 18,2% evidenciando mayor deterioro de las características de los puestos de trabajo para 85 mil personas que se encuentran insatisfechas con su empleo actual, especialmente por la precariedad de los ingresos recibidos, seguidos por quienes desean trabajar más horas a la semana. La tasa de subempleo objetivo pasó de 4,4% a 8,4%, lo que indica que el número de trabajadores insatisfechos que buscan cambiar su situación se duplicó al pasar de 20 mil a 39 mil. Por posición ocupacional, los empleos por cuenta propia en la capital de Bolívar pasaron de representar el 50,4% al 51,2% del empleo total, esto indica que más de la mitad de los empleados actuales, 216 mil trabajadores, 7 mil más que los de 2017, trabajan en la economía del rebusque en actividades de baja productividad. La tasa de informalidad laboral fue 55,2%. 

Sincelejo tiene la más alta informalidad

Su tasa de participación laboral del 68,1% es la segunda en Colombia, solo superada por Bogotá, es decir, tiene la segunda más alta proporción de población en edad laboral que participa activamente en el mercado ya sea trabajando o buscando empleo. A diferencia de la capital de Colombia, donde por su dinámica económica se mantiene una alta participación laboral, el caso de Sincelejo podría ser resultado de los altos índices de pobreza, el deterioro de la calidad de vida y las escasas oportunidades educativas, que mandan a los jóvenes y cónyuges, entre otros miembros del hogar al mercado de trabajo a rebuscarse en cualquier actividad generalmente ligada a la informalidad para apoyar a la generación de ingresos del hogar. Sincelejo también representa la segunda tasa de ocupación a nivel nacional, superada por Bogotá, sin embargo la diferencia es que mientras que en esta los empleos formales representan más de la mitad, en la capital costeña es al contrario, el mayor peso en la estructura del empleo lo tienen los informales. La tasa de desempleo es de 8,9% y la de informalidad del 66,1%, que es la más alta de la Costa para el periodo analizado.

En Montería no crece  la tasa de ocupación

La tasa de desempleo disminuyó del 11,15% al 10,2%, más por la menor participación laboral que de mejoras en la actividad económica y la demanda de empleos, pues la tasa de ocupación se mantuvo en 57,7%. Por posición ocupacional los empleos por cuenta propia se mantuvieron alrededor del 46% de los empleos totales y la tasa de informalidad laboral pasó del 61% al 61,4% indicando que de las 165 mil personas ocupadas en Montería tan solo 63 mil son formales, mientras que 102 mil desempeñan trabajos informales. Por otro lado, la tasa de subempleo subjetivo bajó de 20,2% a 18,8%, mientras que la de subempleo objetivo pasó de 6,4% a 7,9%, si bien disminuye el porcentaje de trabajadores insatisfechos con su trabajo actual, por insuficiencia de ingresos, horas laboradas o por no correspondencia entre las personas competencias y la actividad económica que desempeñan, aumenta el porcentaje de insatisfechos que hacen gestiones y trámites para cambiar su situación actual lo que muestra un mayor desespero frente a su realidad unos 15 mil trabajadores.

Riohacha, con la mayor tasa de desempleo

Tiene la más alta tasa de desempleo de la región y la cuarta a nivel nacional, entre agosto-octubre de 2018 aumentó un punto porcentual (pp) frente al mismo periodo de 2017 y se situó en 14,6%. El aumento del desempleo fue el reflejo de una caída de unos tres pps en la tasa ocupación (55,1% vs 52,7%) cuyo impacto sobre el desempleo fue amortiguado por una caída en más de dos pp en la participación laboral (64% vs 61,6%). La caída en la participación laboral podría estar relacionada con el comportamiento de unos 7 mil jóvenes que no entraron al mercado de trabajo y que se reflejaron en el aumento de la población inactiva. La tasa de jóvenes que hacen parte del grupo denominado “Ninis” es del 25,4%, es decir, una cuarta parte de los jóvenes con edades entre 14 y 28 años no trabaja, no estudia ni está buscando empleo (Nini). Los empleos por cuenta propia que representan actividades de rebusque pasaron del 58% al 60% y la proporción de informalidad fue de 62,2%.

Valledupar tiene 58 mil trabajadores por cuenta propia

La reducción de la tasa de ocupación (52,7%) refleja unos 3 mil empleos menos, frente a unas 9 mil personas que entraron a formar parte de la población en edad laboral. La menor tasa de participación laboral se explica por el comportamiento de los jóvenes, quienes no pasaron a formar parte del mercado de trabajo sino que se mantuvieron inactivos. Por posición ocupacional, los empleos por cuenta propia pasaron del 57% al 58% mostrando que 58 mil trabajadores de los 100 mil ocupados totales de la capital vallenata desempeñaban oficios que generalmente son actividades de bajísima productividad e ingresos precarios. La informalidad laboral pasó del 57% al 59,5%, evidenciando que hay 102 mil trabajadores en actividades informales. Las ramas con mayor generación de empleos fueron actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler con el 8,0% del empleo total, la que creció 15% y la industria que aportó el 10% y aumentó 7,0%.

Santa Marta, más jóvenes buscan trabajo

Pese a que la tasa de ocupación se mantuvo casi con el mismo indicador del año anterior (54,8% vs 54,9%), la tasa de desempleo aumentó del 8,2% al 9,1%  por el incremento de la participación laboral (59,7% vs 60,4%). Hubo 5 mil personas ocupadas más que el año anterior, sin embargo, esto no impactó la tasa de ocupación porque al tiempo que eso ocurría la población en edad laboral aumentaba en 8 mil personas (los nuevos jóvenes samarios y/o migrantes). Mientras el número de ocupados en Santa Marta aumentó en 2,3%, la población en edad laboral creció al 2,1% lo que hace que la tasa de ocupación se mantuviera prácticamente estática. En Santa Marta, al parecer más jóvenes entraron a presionar al mercado laboral contribuyendo al aumento de la población económicamente activa, la tasa de participación laboral y el desempleo. Por otro lado, la informalidad laboral aumentó en 3 puntos porcentuales para representar el 66%.

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