El bolo es más que una moñona
Los bolicheros colombianos han superado las 300 medallas en los últimos tres años para nuestro país.
Al entrar a una bolera, lo primero que se les viene a la cabeza a muchas personas es hacer al menos una chuza. Con eso se conforman. Un bolichero profesional ve una moñona o strike, como también se le conoce a la principal jugada de este deporte, como el principio de un juego perfecto.
Muchos colombianos creen que el bolo solo es un deporte más en nuestro país, pero no es así.
En Malasia, donde es considerado deporte nacional, cuando escuchan Colombia, los habitantes de inmediato tratan de conseguir un autógrafo o una foto con algún jugador.
Para ellos, nuestra patria es una de las máximas potencias de bolo en el mundo, tal como Corea del Sur o Estados Unidos.
Álvaro del Gordo, entrenador de las ramas masculina y femenina del departamento del Atlántico, es uno de los apasionados por este deporte desde hace largo rato.
“A principios de los años 80 yo jugaba con mi hermano varios días a la semana. Nuestro tío, Roberto del Gordo, era el presidente en ese entonces de la Federación Colombiana de Bolo (Fedecobol) y cada vez que él iba a la bolera nos llevaba. En unas vacaciones familiares me enseñó algunos trucos y comenzó a gustarme”.
Igual que el tenista o el golfista, el bolichero depende de sí mismo para llegar a lo más alto. Los músculos que requieren fortalecimiento para jugar son los de la espalda, hombro, cuadríceps y gemelos. El bolo es un deporte que no requiere tener un estado físico al ciento por ciento, lo ideal es al menos tener bien fuerte esas partes del cuerpo.
Jaime Monroy, entrenador de la Liga de Bogotá y que practica este deporte hace 30 años, asegura que “el jugador de bolo debe tener una buena preparación física, pero sobre todo aeróbica. Si bien es cierto que en un momento puede haber cansancio físico, el desgaste mental puede afectar más”.
Como todo deporte, en el bolo también se corren riesgos de lesiones. Las más comunes son las de tendinitis de flexores de mano y rodillas. También está la lesión de muñeca que se origina por mal movimiento a la hora de lanzar la bola. Es por eso que los instructores recomiendan hacer un buen calentamiento previo antes de entrar en acción.
En la actualidad, un referente en nuestro país sobre el bolo es el bogotano Jaime Andrés Gómez Ardila. Además de ser el primer colombiano en obtener un título en el PBA Tour (Asociación Profesional de Bolicheros), Gómez es el único cafetero que ha conseguido llegar a este nivel en el que se encuentran los mejores jugadores del mundo.
59 bolicheros están registrados hoy por hoy en el PBA Tour. La lista de países que lo componen es la siguiente: Estados Unidos (49), Canadá (2), Inglaterra (2), Australia (1), Suecia (1), Dinamarca (1), Finlandia (1), Venezuela (1) y Colombia (1).
