Para un buen número de periodistas deportivos especializados en boxeo, la figura de Rocky Marciano no es la gran atracción del deporte de los puños, cuando por su récord debería serlo con letras mayúsculas. Marciano llegó al pugilismo con una corta estatura para peso completo, pero supo atenuar o cuando menos lo esperaban sus adversarios desaparecer esa desventaja con la potencia de sus puños y el número de veces en el que su propietario se los soltaba a sus adversarios. 

Marciano tuvo un récord de 49 peleas todas ganadas. 43 de estas por nocaut y 3 por el fallo de los jueces. Este average —para hacer un préstamo al béisbol— no lo han logrado la totalidad de los pugilistas de peso completo. Marciano, entre otras cosas, tuvo la triste particularidad de haber ocasionado el retiro del gran Joe Louis, propinándole un doloroso nocaut a un grandioso pugilista de todos los tiempos, que tuvo que volver al boxeo después de haberse retirado, acosado por el fisco norteamericano, que no le perdonó nunca la gran deuda que Louis tenía con el gobierno, a pesar de haber sido un gran colaborador, pues protagonizó varios combates sin ganar un céntimo, entregándole la recaudación de varios combates suyos al estado.

Un gran misterio prevalece entre las sombras del boxeo, por conocer el motivo del retiro de Rocky Marciano del pugilismo, cuando se fue del deporte de los puños al cumplir 49 combates, negándose de plano a verificar el ‘match’ número 50 de su vida de boxeador.

Su negativa a subir al ring para su combate número 50 tiene numerosas versiones nunca confirmadas. La que más crédito tiene es la que afirma que a Marciano le contaron sigilosamente  que su manejador firmaba un contrato para las autoridades, pero por debajo de la mesa existía otro que era el que prevalecía a espaldas de Marciano y fue según muchos el leitmotiv de su retiro del boxeo.

Marciano cumplió una tarea que objetivamente lo coloca entre los cinco mejores pesos completos de la historia. Obtener 49 victorias consecutivas —que incluyeron 46 combates por nocaut— es un récord que no aparece en la totalidad de los grandes pesos completos del boxeo.

Marciano podría estar incluido en la historia del boxeo como el máximo castigador de los púgiles negros. A todos los que enfrentó (Joe Louis, Joe Walcott, y numerosos adversarios más) fueron superados, casi siempre por nocaut por el púgil italoamericano. 

En la historia del boxeo hay un lugar que no se ha fijado con justicia para señalar el sitio que Rocky Marciano merece en el deporte de los puños.