La tensa situación por el paro indígena en el Cauca
Los indígenas exigen una reunión con el presidente, pero Duque dijo que no negociará mientras se mantengan las vías de hecho.
Durante este fin de semana subió de tono el paro indígena que arrancó desde el pasado 10 de marzo en el Cauca, y que tiene como núcleo el municipio de Caldono. Uno de los comuneros fue detenido con explosivos y hubo un atentado con un artefacto de bajo poder contra una misión de la Defensoría del Pueblo, mientras los manifestantes siguen esperando la presencia del Gobierno de Iván Duque, que ha dicho, por su parte, que no dialogará mientras no se levanten los bloqueos.
Los cierres, principalmente en la Vía Panamericana, se han visto agravados con los enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía en El Cairo, Cajibío. Allí se produjo el ataque al ente del Ministerio Público, que de inmediato se retiró de la misión de verificación hasta cuando se ofrecieran garantías para los funcionarios.
"La Defensoría del Pueblo se sirve informar que debido a la falta de garantías para hacer monitoreo y verificación de la situación de derechos humanos en el marco de la movilización, suspende sus actividades hasta tanto los manifestantes generen acciones concretas que aseguren la integridad personal de nuestros funcionarios", se lee en el comunicado del organismo.
Por su parte, la Fiscalía informó en su cuenta de Twitter que un juez envío a cárcel "a Diego A. Camayo Quitumbo, comunero resguardo indígena de Morales #Cauca, detenido en flagrancia el 14 de marzo con 8 artefactos explosivos en hechos relacionados con paro indígena. #Fiscalía imputó fabricación, tráfico y porte de armas y explosivos".
Entre tanto, la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria, Fensuagro, denunció este fin de semana "una arremetida desbordada de parte de la fuerza pública, en su afán de recuperar la movilidad", con el uso de "gases y bombas aturdidoras y afirman escuchar disparos de escopeta", con los que "fueron heridos campesinos y dos defensores de derechos humanos"..
Los indígenas, que esperan dialogar directamente con Duque, esperan que el mandatario llegue este lunes a la localidad de El Pital, donde los propios pueblos originarios lo protegerían con 1.000 de sus guardias. Oliverio Lame, líder del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric, aseguró que los garantes de este encuentro serán las Naciones Unidas.
Pero el jefe de Estado dejó en claro el pasado sábado desde Vaupés que el suyo "es un Gobierno abierto siempre al diálogo, pero no sobre la base de las vías de hecho, porque así no se construye país".
Recordó Duque que en su mandato se acordó por primera vez un Plan de Desarrollo con un capítulo específico para las comunidades indígenas, que fue dialogado y concertado, y se están destinando en este cuatrienio cerca de $10 billones a intervenciones integrales que mejoren la calidad de vida de los pueblos nativos.
"Muchas veces se han hecho acuerdos imposibles, acuerdos multimillonarios que el Estado firma sin tener la capacidad de cumplir. Y eso no está bien. Pero como presidente no puedo aceptar ninguna vía de hecho, ni ningún flagelo a los derechos fundamentales de ningún ciudadano, como un mecanismo para llegar a la atención del Estado colombiano. Y tenemos que seguir avanzando en esa dirección", señaló.
Los indígenas, que representan al menos el 3,4% de los 42 millones de colombianos, se han organizado para exigir derechos y denunciar crímenes y atropellos. La Defensoría ha denunciado la muerte de 462 líderes sociales y activistas de derechos humanos, entre ellos indígenas, desde enero de 2016 a febrero de este año.
A su vez, la Alta Comisionada de la ONU para Derechos Humanos reportó 113 asesinatos de activistas -el 27% indígenas- en 2018.
