El escándalo que deja el caso de Rodrigo Granda
El exmiembro de las extintas Farc tiene activa una orden de extradición por sus presuntos nexos con el crimen de Cecilia Cubas, en Paraguay.
Rodrigo Granda, uno de los exlíderes de la extinta guerrilla de las Farc, dijo este miércoles que decidió regresar voluntariamente desde México después de ser retenido en el aeropuerto para no causar un problema diplomático entre estos dos países ni con Paraguay, que tiene activa una orden de extradición en su contra.
“Nosotros tomamos la determinación de que yo regresara a Colombia, primero, porque no queremos un incidente diplomático entre Colombia, Paraguay y México”, aseguró Granda, conocido como el ‘canciller’ de las Farc y que el martes fue retenido a su llegada a México para asistir a un congreso al que estaban invitados varios líderes del ahora renombrado Partido Comunes.
Sobre Granda pesa una ficha roja —de búsqueda y captura—, a petición de Paraguay, por “secuestro, asociación criminal y homicidio doloso”.
El exmiembro del Secretariado de las extintas Farc aseguró que se marchó a México después de cumplir “todo el rigor de ley en Colombia”, con autorización de la JEP, donde tiene casos pendientes, y haber visto que en Migración Colombia y en la Interpol estaba “todo normal”.
El ministro de Defensa, Diego Molano, aseguró que “Interpol Colombia no está facultada ni tiene acceso para modificar, aclarar o cancelar la información publicada por otros países”, y que es Paraguay quien tiene activa esa circular roja.
Además, la Dijín reveló una notificación que le enviaron a Granda, por una petición que él mismo había hecho, del pasado 28 de septiembre, en la que se especificaba que sí tenía activa la notificación roja, solicitada por Paraguay, por tres cargos criminales.
Granda es sindicado como presunto autor intelectual del secuestro y posterior muerte de Cecilia Cubas Gusinky, hija del expresidente paraguayo Raúl Cubas Grau, ocurridos en septiembre de 2004.
Según investigaciones, Granda se ve involucrado en este crimen debido a la información que fue encontrada en el computador del excomandante de las Farc Raúl Reyes, tras el bombardeo en el que murió en la frontera entre Colombia y Ecuador.
Cecilia Cubas Gusinky fue secuestrada a metros de su vivienda por el brazo armado del Partido Patria Libre, que hoy es conocido como EPP.
La mujer estuvo en cautiverio hasta el 16 de febrero del 2005, fecha en la que, 135 días después de haber sido secuestrada, se dio el macabro hallazgo de su cuerpo, que estaba enterrado en una casa en Ñemby.
