Drama en la Sierra Nevada: no hay ni paz total, ni cese al fuego

Según organizaciones de derechos humanos, la escalada de violencia ha tocado diferentes puntos de la región que une la cadena montañosa (La Guajira, Cesar y Magdalena); sin embargo, los números rojos se han focalizado en Ciénaga, Zona Bananera, El Retén y Palmor, donde se han registrado masacres y homicidios en los últimos días.

“Estas estructuras (AGC y ACSN) se están matando entre ellas mismas por controlar todo el territorio. La situación en este momento es que tenemos un cese de hostilidades y –en teoría– el Estado renuncia a la acción de perseguirlos, mientras que ellos deben detener acciones violentas. El tema es que esto no está pasando. Estos grupos siguen peleando, ahora menos que antes, pero particularmente cada uno de ellos está cometiendo delitos en diferentes modalidades”, indicó Lerber Dimas, presidente de Plataforma de Defensores de Derechos Humanos, Activistas y Líderes Sociales de la Sierra Nevada.

Según el experto en conflicto, tras el cese al fuego, el número de homicidios –que mantenía una tasa altamente preocupante en 2022– disminuyó en las últimas semanas, en cambio, otro tipo de delitos como la extorsión, el secuestro, el desplazamiento, el reclutamiento y la compra de armas han aumentado.

“Esto es muy grave. Estamos midiendo el cese de hostilidades solamente a partir de una acción violenta que es el homicidio, pero no estamos revisando otros delitos en el territorio que están aumentando. El cese al fuego no se ha respetado. Las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra (Los Pachenca) han respetado parcialmente el cese. El Clan del Golfo no lo ha respetado. Ellos cometieron una masacre en La Guajira y cometieron dos masacres en el Magdalena”, reveló Dimas en diálogo con EL HERALDO.

De acuerdo con expertos en conflicto del Magdalena, la situación en mención se ha recrudecido porque –según ellos– el 31 de diciembre retiró gran parte de las tropas de la Sierra Nevada de Santa Marta.

“Se está cometiendo un error porque se está perdiendo de vista la opción de resguardar la vida y la honra de las personas. Cumplir con el decreto es importante, pero tendrían que haberse hecho de manera paulatina. ¿Qué ocurre? Pues que claramente las comunidades están a la merced de los actores armados porque no está el actor principal que es el Estado para resguardar el orden. Y cuando esto ocurre y se quiere generar algún tipo de denuncias, pues sencillamente los amenazan o los desplazan. Básicamente la situación es que la gente está desprotegida”, explicaron.

“Las comunidades están cansadas de la violencia. Una posible ruptura de este cese de hostilidades podría generar acciones alarmantes de violencia y los campesinos no quieren eso. Si el cese al fuego falla, la cantidad de muertos puede ser abrumadora”, agregaron.

Según Indepaz, la guerra entre el Clan del Golfo y los Pachenca suma más de tres años y ha generado cientos de muertos, desplazados y desaparecidos.

Norma Vera, defensora de derechos humanos del Magdalena, consideró que para que se cumpla el proyecto de paz total debe haber esclarecimiento de la verdad. En este sentido, explicó que Hernán Giraldo Serna, conocido como ‘Taladro’ o ‘el Patrón de la Sierra’, no debe ser reconocido como facilitador o vocero de paz.

“Las víctimas que no han sido reparadas deben tener acceso a la verdad de hechos como los crímenes de desaparición forzada cometidos por estas estructuras en los últimos 30 años”, explicó.