
Centro Democrático califica de “desleal” la renuncia de Miguel Ceballos
La organización política mencionó, además, que “no estuvo a la altura” de las tareas de su cargo.
Luego de la polémica por la renuncia y las declaraciones del Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, quien afirmó que “incomodidades” con el expresidente Álvaro Uribe Vélez habrían incidido en la decisión de dejar su cargo, el Centro Democrático respondió tildando a este de “desleal” y de “no estar a la altura”.
En un comunicado la organización política aseguró que “la abrupta renuncia de Miguel Ceballos, Alto Comisionado de Paz y delegado principal para negociar el paro, es un acto de deslealtad en el momento más inoportuno, que evidencia que no estuvo a la altura de las difíciles y trascendentales tareas a su cargo”.
En lo que respecta a las “incomodidades” que este aseguró haber sentido con el expresidente Uribe, el partido respondió: “No se renuncia por ‘incomodidades’ cuando se tiene una alta responsabilidad en medio de la crisis que atraviesa el país. Insólito además, que invoque gestiones del expresidente Álvaro Uribe Vélez, que conoce en detalle el presidente de la República Iván Duque. Hay que poner fin drásticamente al grave y continuo daño que hacen al tejido económico y social de la Nación quienes allanan los terrenos legales de la inconformidad”.
Asimismo, el Centro Democrático instó al Gobierno nacional enfrentar la situación con “decisión“, “autoridad” y “con funcionarios idóneos para enfrentar los muy graves retos del momento”.
Miguel Ceballos deja su cargo en medio de las negociaciones
El alto comisionado para la Paz de Colombia, Miguel Ceballos, informó este sábado que el pasado 3 de mayo presentó su renuncia al presidente Iván Duque, quien recientemente agregó a sus funciones la mediación entre el Gobierno y el Comité de Paro Nacional que promueve las protestas en su contra.
"Deseo manifestarle que por razones de carácter personal, siguiendo los llamados de mi conciencia y en cumplimiento de las responsabilidades que mi alma han elegido, renuncio irrevocablemente a mi cargo como Alto Comisionado para la Paz, a partir del día 26 de mayo", se lee en la carta enviada a Duque.
Aunque alega motivos personales, la renuncia del alto comisionado ocurre en medio de la mayor crisis que ha tenido que enfrentar este Gobierno debido a las protestas que comenzaron el pasado 28 de abril en contra de la política social y económica de la administración de Duque.
Ceballos ha sido la voz del Gobierno en las conversaciones que desde hace más de una semana sostiene con el Comité Nacional de Paro, principal convocante de las manifestaciones que han estado empañadas por la violencia y el vandalismo, así como en el diálogo con distintos sectores políticos, académicos, religiosos y empresariales.
El presidente Duque no ha confirmado si la renuncia de Ceballos, abogado de la Universidad Javeriana de Bogotá, con maestría en Filosofía Política de la Universidad Gregoriana de Roma, fue aceptada o no.
Polémica con Uribe
En una entrevista que otorgó el alto comisionado a El Tiempo mencionó sentir una “incomodidad” con el ex presidente Uribe que habría incidido en su decisión de abandonar el cargo. “Siento una incomodidad con el expresidente Uribe, y se refiere a algo esencial que tiene que ver con mi trabajo como Comisionado”, afirmó Ceballos.
Explicó el funcionario que “en dos ocasiones, desafortunadamente, no fui consultado por el ex presidente Uribe en un par contactos que tuvieron él y representantes suyos con el ELN. Un primer contacto se produjo en un viaje a Cuba a través de uno de sus representantes, sin que yo fuese consultado; y hubo un segundo momento en el cual él se reunió en su casa, como él mismo lo ha expresado, con el señor Juan Carlos Cuellar, quien es un ex combatiente del ELN que acaba de ser nombrado por nuestro Gobierno como gestor de paz (…) En esas dos ocasiones no fui consultado por el expresidente Uribe”.
Agregó Ceballos que “siento que él tenía la confianza, pero, además, el deber de consultar al Alto Comisionado para la Paz sobre contactos con el ELN, y no lo hizo. Y eso, por supuesto, creó en mí una incomodidad, que aún permanece, no porque no solamente no haya sido consultado, sino porque hay el respeto a la dignidad de un cargo tan complejo como el mío, en el cual el contacto que pueda derivar en un resultado que ayude a la paz o que aleje a la paz, hace parte esencial de mis funciones”.
Sin embargo, aclaró que Uribe no fue irrespetuoso con la institucionalidad. Pero al responder si se sentía “bypaseado” por el expresidente respondió: Pues ese es un término médico que podría utilizarse. Pero, Uribe, más que “bypasbearme”, me desconoció.