
Cartagena, epicentro de la discusión de la crisis migratoria del continente
El defensor del Pueblo de Colombia señaló que la “cruzada global” busca centrar el debate en el respeto a la vida y a la dignidad humana de los migrantes.
Más de 22 defensores y directores de las instituciones nacionales de derechos humanos del continente y algunos invitados de Europa, África y Asia, además de organizaciones internacionales y la cooperación internacional, se reunieron este miércoles con el objetivo de unir esfuerzos para hablar sobre la crisis migratoria que atraviesa el continente.
En el encuentro la “Migración y el Refugio como Derechos en Riesgo” se buscaron sentar bases para la construcción de acciones, entre todas las defensorías, para atender la migración y el refugio, con un enfoque de derechos humanos.
Carlos Camargo, defensor del Pueblo de Colombia, señaló que la idea que los funcionarios se comprometan con lo que ha llamado “una cruzada global”, en la que el objetivo principal sea el respeto a la vida y a la dignidad humana.
“En este encuentro busca afianzar los lazos ya construidos entre las Defensorías del Pueblo con relación al intercambio de información y experiencias para hacer más efectivos los esfuerzos y así lograr que los procesos migratorios sean seguros, regulados y ordenados”, señaló Camargo.
Por su naturaleza, el encuentro, abordó la crisis humanitaria que se vive actualmente en el Urabá, especialmente en Necoclí. “Este era uno de los temas a analizar y del que salieron propuestas que se sumaran a las que hemos hecho para aliviar la situación”, señaló el funcionario.
“Esperamos que fruto del encuentro el intercambio de información sea mucho más efectivo y que compartamos buenas prácticas para mejorar la capacidad técnica para la protección de los derechos humanos de estos migrantes”, precisó Camargo.
La emergencia en Necoclí, explicó el jefe de la entidad, es el paso de migrantes transcontinentales y del Caribe proveniente de Asia, África, Europa y Latinoamérica que buscan llegar a los países del Norte del hemisferio.
“En esta materia se ha documentado que han cruzado la frontera entre Colombia y Panamá aproximadamente 95.000 migrantes en lo que va corrido del año”, detalló el defensor colombiano.
Es por eso que Camargo hizo un llamado para habilitar de manera permanente una ruta humanitaria que permita salvaguardar las vidas y la integridad de todas estas personas que hacen uso de las embarcaciones y legales.
“Lo más preocupante es la vulnerabilidad de esta población como son los niños niñas y adolescentes y las madres lactantes y gestantes y personas en situación de inferioridad en condiciones de discapacidad, eso nos preocupa mucho y venimos haciéndole seguimiento permanente”, enfatizó Camargo.