Compartir:

Adelina Guerrero, esposa del ministro del Interior, Armando Benedetti, contó los detalles de cómo fue el allanamiento en su casa, ubicada en Puerto Colombia, Atlántico, por parte de la magistrada Cristina Lombana.

Leer también: Las frases subidas de tono de Benedetti contra la magistrada Lombana por las que es blanco de críticas

Guerrero dijo que la magistrada, antes de hacerle preguntas, la amenazó: “Si yo le contestaba de una manera que no era la correcta me metían en la cárcel 30 días”, dijo en entrevista a Caracol Radio.

Describió el operativo, que tuvo un despliegue de Policía, como algo inusual, porque había funcionarios del GOES con “armamento fuerte”.

“Cuando yo bajo, nunca me imaginé el despliegue que trajeron. Vinieron unos funcionarios del GOES con un armamento muy fuerte”, relató Guerreo el medio nacional.

Por otro lado, aseguró que fue tratada de forma humillante por parte de la magistrada Lombana.

“La magistrada me habló de una manera muy humillante, muy descalificativa. En todo momento me habló de una forma denigrante… Me hablaba de que yo no sabía de ley, que yo no sabía de derecho”, declaró.

Además, contó que su abogado, David Benavides, tuvo que intervenir en varias ocasiones cuestionando el procedimiento.

“El abogado se metió y dijo que eso no era interrogatorio, que ella había dicho que nada más me iba a hacer tres preguntas y se estaba excediendo”, contó Guerrero.

“La señora puso a una funcionaria del GOES a que me escoltara. O sea, me puso al lado mío una señora fuertemente armada, como si yo fuera una delincuente”, agregó.

Por otro lado, reveló lo que le reclamó a la funcionaria del GOES en pleno allanamiento: “Le dije: mire, yo sé que usted está cumpliendo órdenes, pero me hace el favor. Yo no soy ninguna delincuente, yo no soy ninguna criminal. Usted no tiene por qué estar al lado mío. Usted me está intimidando”.

Importante: Corte Suprema llama a la “prudencia” a Benedetti luego de sus señalamientos contra la magistrada Lombana

Otro hecho que le llamó la atención a Guerrero fue que durante el operativo la magistrada le impidió que se comunicara con su esposo y con su abogado al inicio del procedimiento.

“Ella me dijo que yo no podía llamar a nadie, que eso era un tema reservado”, dijo. Ella insistió y pudo contactar a su abogado y ponerlo en altavoz.

Cuando llegó Benavides, según cuenta Guerrero, la magistrada Lombana dijo la siguiente frase: “Me la tiene ahí y me la tiene calladita”.

Sobre los resultados del allanamiento, Guerrero dijo que “no se llevaron nada. Absolutamente nada… Lo que vinieron a hacer no encontraron lo que querían encontrar, es lo que yo creo que pasó al final”.