“Dios y los médicos hicieron el milagro con mi esposa y mi hijo”
Jaider Ruiz, esposo de Carlota Barrios, que dio a luz intubada con covid, narra la alegría de tener a su esposa y su recién nacido recuperándose.
Con nombre bíblico, Carlota Barrios y su esposo, Jaider Ruiz, bautizarán a su recién nacido, dado a luz mientras la mujer se encontraba afectada con covid e intubada en la Clínica Laura Daniela en Valledupar.
“Decidimos llamarlo Emmanuel David, porque la verdad Dios ha mostrado su amor a mi familia”, dijo Jaider, quien además agradeció a los médicos y a todo el personal del centro asistencial que con dedicación y profesionalismo, de la mano de Dios, lograron este milagro de vida en medio de la pandemia.
Según su origen bíblico, Emmanuel significa: “Dios está con nosotros”, y en el Antiguo Testamento se profetiza “el nacimiento de un varón que poseerá este nombre como símbolo de una nueva época en la que Dios acompañará y llenará de dicha a su pueblo antes de que el niño hubiese cumplido la llamada edad de responsabilidad”.
La salud del bebé y de la madre siguen evolucionando: el pequeño está en una unidad de cuidados intensivos neonatal y Carlota en el área de hospitalización bajo observación y cuidado tras superar el coronavirus, que la tuvo junto a su hijo en riesgo de morir.
En busca de atención
Carlota es nacida en Astrea, Cesar; su esposo Jaider, es de Valledupar, pero desde hace algunos años se radicaron en Santa Marta, donde trabajan y forman el hogar con sus dos hijas, al que se suma ahora Emmanuel.
La mujer de 34 años llevaba un embarazo normal, el cual se constituyó en motivo de felicidad para la familia; venía en camino el primer hijo varón de la pareja.
Pero a finales de Semana Santa comenzó la odisea para esta pareja. “Carlota inició con una pequeña gripa y malestares, después tuvo fiebre, dolor en el cuerpo y tos, decidimos ir a una clínica en Santa Marta, pero nos dijeron que no había cupo para hospitalizarla; entonces fuimos a otra, y luego de hacer todo el proceso de ingreso nos dijeron que no la podían atender porque no había ginecólogo, que buscáramos otro lugar”, relató Jaider. En medio de la angustia por las complicaciones de salud de su esposa, decidió llamar a sus familiares en Valledupar. Era la noche del cuatro de abril, y al recibir el apoyo de los suyos, sin dudarlo, emprendieron un viaje de cuatro horas por carretera hacia la capital del Cesar.
“Llegamos a la media noche, acudimos a una IPS y nos dijeron que no manejaban ginecólogos en urgencias.
La mañana del lunes 5 de abril ingresaron a la Clínica Laura Daniela en donde Carlota dio positivo para covid-19, por lo que procedieron a hospitalizarla, y el viernes, trasladada a uci con intubación.
Con una gestación de seis meses y medio, empezó a tener problemas respiratorios agudos, presentando dos paros cardíacos, ese día los médicos pidieron hacerle una cesárea urgente, naciendo el bebé prematuro con 980 gramos de peso; el niño pasó a sala de neonatos, y Carlota continúo en uci, pero con la posibilidad de aplicarle medicamentos más efectivos contra la neumonía aguda que presentaba.
Carlota necesitó ventilación mecánica invasiva con alto riesgo de mortalidad tanto de ella como del bebé.
La mujer hizo dos paros cardiacos, por lo que consultaron a los gineco-obstetras para realizarle la cesárea por urgencia.
Luego del procedimiento Carlota siguió con ventilación y después de más de 30 días, gracias al trabajo de la unidad de cuidados intensivos, fue trasladada al área de hospitalización, explicó Richard Villacob, médico intensivista.
“Los dos siguen en la clínica. Lo más grave ya pasó, estamos prácticamente en la recta final”, sonríe tranquilo Jaider.
