Siendo la corrupción un acto delictivo que impera en el país y que ocurre cuando un funcionario público abusando de su poder adquiere millonarios beneficios económicos para si mismo, para sus familiares y amigos, los cuales están denunciados y evidenciados en vivo y en directo por todos los medios de comunicación nacional e internacional, en el actual y pasados gobiernos de turno, han puesto la precaria credibilidad de nuestro país en el ámbito internacional, como un verdadero Estado de Derecho.
El objetivo de conocer el tercer puesto mundial de corrupción que existe en Colombia, la conclusión es que este ilícito que se da en todas las instituciones de la administración publica , establecimientos autónomos, semiautónomos y sector privado del país, debe ser combatido no solo por los entes responsables del exterminio, sino con la participación activa de la ciudadanía en general evitando caer en actos de putrefacción y denunciando dichos actos criminales ante las instancias existentes, las cuales directa o indirectamente están comprometidas .
Para justificar estos ejemplarizantes males expuestos, tenemos la fuga del criminal supuestamente desmovilizado de las FARC-EP, Alias Jesús Santrich, hoy padre de la patria con orden de captura solicitada por Colombia a la Interpol, con recompensa gubernamental de tres mil millones de pesos, por no hacerse presente a la diligencia de indagatoria citado por la Corte Suprema de Justicia por los delitos de asociación para delinquir y narcotráfico, lo cual viene hacer la gota que faltaba para derramar el vaso de indignación de los colombianos que a diario bebemos y, que no queremos seguir siendo rehenes permanentes de estos males gubernamentales, que ven la corrupción y la impunidad con rabia, cargando un peso de odio hacia las instituciones oficiales, que practican la falta de condena judicial, que viene sin razón alguna , no siendo una buena idea que viene de repente, es todo lo contrario, proviene de una reacción poderosa en contra de la falta de castigo hacia las instituciones, que no administran justicia en nombre de la republica y por autoridad de la ley .-
Jorge Orlando Salazar Santander
jorgesalazarsantander@yahoo.com
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