Voy a referirme textualmente a lo que escribí en su prestigioso periódico hace unos meses sobre el deportista porteño: “En estos momentos es el jugador más exitoso de los colombianos en el exterior. Un jugador que casi se pierde para el fútbol, que deambuló por Venezuela, que regresó a Barranquilla y fue cobrador de un bus de Puerto Colombia, que fue acogido por el Junior y se destacó en lo futbolístico como en lo indisciplinado. De él hay que decir que después de su paso por Bélgica es otro Carlos Bacca en lo personal, y en lo deportivo está inmenso. Así como la crónica deportiva llenó cuartillas por su indisciplina, así deberían escribir sobre el otro Carlos Bacca. Ejemplo para tantos talentos colombianos que se pierden por la indisciplina. Felicitaciones Carlos Bacca, sigue así”.
Hoy día, Carlos Bacca ha conseguido la más alta distinción de cualquier futbolista colombiano, en una de las ligas más exigentes como lo es la de España, con centenares de pergaminos.
Ahora que se va a elegir nueva junta directiva de fútbol del Atlántico, sería bueno que los elegidos hiciesen un esfuerzo por traer a Carlos Bacca para que les dicte una charla a los jugadores menores del Departamento, al lado de su señora esposa, quien ha sido protagonista número uno de su cambio. A todo gran señor, todo honor. Nuevamente, ¡felicitaciones!
Coletilla: el gran Teo, elogiado mundialmente por su fútbol, mas no por su disciplina, parece que va rumbo al camino correcto.
Antonio M. Guzmán G.
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