La paz, tema obligado en la Cumbre Iberoamericana
El Centro de Convenciones de Cartagena fue la sede del conversatorio que se dio ayer entre los presidentes y representantes de 22 países.
El proceso de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las Farc se abrió este sábado un espacio en la agenda de la XXV Cumbre Iberoamericana, en Cartagena, que tuvo como temática principal “Juventud, Emprendimiento y Desarrollo”.
Los Jefes de Estado y de Gobierno de los países iberoamericanos felicitaron al presidente Santos por el premio Nobel de Paz y reiteraron su apoyo para continuar, luego del negativo resultado plebiscito, en la búsqueda del fin de un conflicto armado que se ha extendido por más de 50 años.
Desde las 9:30 de la mañana, los 22 presidentes y representantes de las naciones iberoamericanas comenzaron a llegar al Centro de Convenciones. El presidente Santos, junto a la primera Dama, Clemencia Rodríguez de Santos; y la secretaria General de Iberoamérica, Rebeca Grynspan.
A la llegada de los mandatarios se notó que la paz tendría un papel protagónico en la jornada. Los asistentes firmaron un cartel dispuesto a la entrada del salón, en estaba estampada la imagen de la paloma de la paz. Además, cada uno de los asistentes llevaba puesto un prendedor dorado con la paloma que ha sido el símbolo del Acuerdo, el cual les fue obsequiado por el presidente colombiano.
La lista de invitados estuvo conformada por 10 presidentes más el Rey Felipe VI de España; tres vicepresidentes, dos primeros ministros y seis cancilleres de América Latina, el Caribe y la Península Ibérica, que conforman el grupo iberoamericano.
Los gobernantes de Chile, Michelle Bachelet; Ecuador, Rafael Correa; Perú, Pedro Pablo Kuczysnki; Panamá, Juan Carlos Verela; Honduras, Juan Orlando Hernández; Guatemala, Jimmy Morales; República Dominicana, Danilo Medina; México, Enrique Peña Nieto; y Portugal, Marcelo Rebelo De Sousa.
En horas de la mañana hubo expectativa por la supuesta llegada del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien había anunciado, a última hora, su asistencia. Solo hasta después de 1:00 de la tarde se supo que Maduro desistió y envió a la canciller, Delcy Rodríguez.
La paz
Durante la instalación de la Cumbre, Santos recordó que, hace unos días, la secretaria Grynspan expresó que hubiera querido que esta cumbre se llamara “de la paz”, pero -dijo- tal vez ahora toca llamarla “por la paz”. Así se fue abriendo espacio este tema en la agenda.
“Yo diría, apreciada Rebeca, que esta Cumbre, que se reúne en un momento crucial de la historia de Colombia, es una cumbre por la paz pero es también -es decir, no ha dejado de ser- la Cumbre de la Paz”.
El mandatario señaló que con “ajustes y clarificaciones, que se harán en un término muy breve”, va a conseguir que el conflicto con la guerrilla, que ha dejado más de 200 mil muertos y 8 millones de víctimas y desplazados, “llegue a su fin”. “Hoy lo reafirmo -en este escenario inmejorable- ante los pueblos de Iberoamérica: ¡la paz de Colombia será una realidad!”.
El Rey Felipe VI expresó a Santos su apoyo por el proceso con las Farc y lo felicitó por el Nobel. “Es una paz que todos deseamos para esta Nación hermana. Y, el premio, es un orgullo para Colombia, pero también lo es para toda Iberoamérica”.
“Lo felicito, Presidente, por haber retomado ese hilo después de la derrota del referendo. Usted no flaqueó, eso ha sido importante”.
Peña Nieto sostuvo que alcanzar el fin del conflicto implica “grandes desafíos y altos costos. La ruta de cambio, paz y reconciliación que ha elegido vale el esfuerzo. Así lo ha reconocido el mundo al celebrar el Nobel”.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet consideró que Colombia está viviendo un proceso clave para la búsqueda de la paz. “Ustedes van a poder contar siempre con el apoyo nuestro y nuestra disposición, no solo como lo hicimos como país acompañante en el diálogo con las Farc y también como país garante con otros colegas en el diálogo con el ELN, sino también para avanzar en el posconflicto”.
Para Bachelet, la paz en Colombia es “también la paz de América Latina, de la región y de Iberoamérica”. “Por eso nos alegra mucho, y es muy merecido el premio Nobel a la Paz. Nos sentimos muy orgullosos de eso”.
Juan Orlando Hernández, de Honduras, enfatizó en que desde su país esperan que “pronto” los colombianos consoliden este proceso. “Estoy seguro que será un tremendo aprendizaje no solamente para Iberoamérica, para nosotros sino también para la humanidad”.
El presidente Rafael Correa pidió que “cese la violencia” en Colombia, y ofreció el apoyo “incondicional” de Ecuador en la búsqueda de “ese bien supremo que es la paz”.
Pedro Pablo Kuczysnki señaló que es “fundamental” apoyar el Acuerdo con la guerrilla, aunque mencionó que “a veces hay controversias”. “Sin paz no hay progreso. Y lo felicito, presidente, por haber retomado ese hilo después de la derrota del referendo. Usted no flaqueó, eso ha sido importante”.
El presidente colombiano destacó finalmente que son los jóvenes, en su mayoría, los que “llenan calles y plazas, escriben en foros y pancartas, hacen proclamas y manifestaciones artísticas, exigiendo su derecho a vivir en paz”.
En Iberoamérica -dijo- hay unos 160 millones de jóvenes entre los 15 y los 29 años (una cuarta parte del total de la población), que deben sentirse “acompañados por el Estado, por sus gobiernos, en su búsqueda de la realización y la felicidad”. “Queremos jóvenes que tengan acceso al estudio y no a cualquier estudio, sino a una educación de calidad que les abra las puertas del mundo laboral”.
Afirmó que su gobierno quiere que los jóvenes que puedan encontrar empleos dignos, y también de que jóvenes emprendedores, empresarios, innovadores, que “lideren la nave del futuro”.
Según el mandatario, Colombia está “avanzando” en varios frentes: desde una estrategia integral para atender a las madres gestantes y los niños en la primera infancia, pasando por un programa en el que los mejores maestros capacitan a sus pares para mejorar la calidad educativa en los colegios, hasta iniciativas para que más jóvenes tengan acceso a educación superior de calidad.
Recordó que en 2010 promovió una ley que se llamó de Primer Empleo, para dar incentivos a las empresas que contrataran a los jóvenes, y “evitar así la paradoja de que no los emplean porque no tienen experiencia, pero al mismo tiempo no les dan la oportunidad de tenerla”.
Así mismo, señaló que este año 2016 sancionó la Ley ProJoven, que elimina algunas barreras para la contratación de los jóvenes, como, por ejemplo, la exigencia de la libreta militar como requisito para la contratación. “Con iniciativas como estas, hemos disminuido el desempleo de nuestros jóvenes de más del 25% en 2010 a menos del 20% en 2015, pero sabemos que todavía queda mucho por hacer”.
Rafael Correa cuestionó el hecho de que no existe una Universidad de la región entre las 100 mejores del mundo. “Debemos asumir el desafío de que, en el mediano plazo, al menos alguno de nuestros centros de educación superior entre en el top. No debemos tener temor de evaluarnos con los más altos estándares de calidad”.
La primer mandataria chilena señaló que los jóvenes tienen “compromiso” por hallar soluciones en temas como medioambiente, educación, lucha contra la corrupción e igualdad. Hizo un llamado a garantizar la inserción de los jóvenes a “empleos justos”.