El cierre de Playa Blanca se pospuso, pero está en firme
Distrito de Cartagena está a la espera del plan de acción que debe entregar la fuerza pública para controlar y garantizar la ejecución de la medida en la zona turística.
Esta semana será definitiva para el cierre de una parte de la Isla de Barú, específicamente en el balneario de Playa Blanca, decisión que fue tomada por el Ministerio del Medio Ambiente para garantizar la anidación y el desove de las tortugas Carey, especie en vía de extinción. La medida inicialmente estaba programada para el 1 de mayo y luego para el 10 del mismo mes.
Sin embargo, el motivo de este retraso es que tanto el Ministerio como el Distrito de Cartagena están a la espera del plan de acción que debe entregar la fuerza pública esta semana para controlar y garantizar la ejecución de la medida, dado que nativos y comerciantes se han opuesto abiertamente a la decisión.
El cierre de la zona norte de Playa Blanca busca garantizar esta importante especie y se extenderá por siete meses, hasta el próximo mes de noviembre. La Armada Nacional, la Policía Nacional y Parques Nacionales Naturales serán los encargados de ejecutar la medida. La zona donde se prevé desovarán las tortugas Carey es conocida como la Playa del Níspero y se hace necesario que este punto se encuentre protegido para que ellas puedan mantener su especie.
Una gran disposición
El biólogo marino y ambientalista, Gabriel Luna, le manifestó a EL HERALDO que esta es una de las grandes disposiciones que estaba en mora de tomar el Ministerio, pues con relación al turismo este debe plantearse en términos de responsabilidad y de protección a una zona tan importante como esta.
Luna manifestó que el turismo debe dejar de ser principalmente de cerveza, arroz de bijao y comida chatarra, para comenzar a explotar en Colombia, especialmente en esta zona, un turismo ambiental importante como lo hace Costa Rica. El país centroamericano es ejemplo a nivel global por convertir la sostenibilidad en una política de Estado y al turismo de naturaleza en una industria de enorme éxito.
El trabajo, según explica el ambientalista, ahora se encamina a propender porque este destino de Playa Blanca se constituya en un sitio para ir a visitar por la importancia que adquiere al ser protegido para una especie como la tortuga Carey. Al respecto, sostiene que esta especie tiene la particularidad de desovar en horas de la noche y en la playa donde nació.
Cuando alcanzan la zona, las tortugas suelen hacer una búsqueda del lugar de anidación. Una vez seleccionado este, la tortuga mueve la arena de la superficie con las aletas delanteras eliminando restos de vegetación y basuras; después de preparar el sitio, comienza a extraer arena cuidadosamente con las aletas traseras, construyendo el nido justo debajo de la cola.
Las tortugas Carey no realizan excavaciones muy profundas, los nidos tienen una profundidad aproximada de 50 cm. Los huevos son liberados de uno en uno o en pequeños grupos de dos a cuatro huevos. Una vez finalizada la puesta, la tortuga los cubre tirando arena con las aletas posteriores y anteriores. Todo este proceso dura aproximadamente de 1 a 1,5 horas.
Nativos rechazan medida
Los nativos de Playa Blanca en Cartagena rechazaron la medida de cierre parcial y señalaron que no lo concertaron con ellos ni con el consejo comunitario, y que esta medida los llevaría a la quiebra. “Recibimos esta decisión con sorpresa, porque no consultaron con la comunidad, ni con el consejo comunitario, siguieron un conducto irregular. Tiene que haber una consulta previa sobre el tema y concertar con la comunidad”, señaló el líder comunitario José David Miranda.
La comunidad está preocupada porque la mayoría de los nativos subsisten de las actividades turísticas en el balneario. “Nosotros vivimos del turismo, de las playas. ¿Cómo vamos a vivir tanto tiempo sin trabajar? Siete meses es demasiado largo, nos vamos a quebrar, nos vamos a morir de hambre”, indicó Germán Guerrero, comerciante de la playa.
Los nativos afirman que no se oponen a la protección de las especies y del medio ambiente, pero calificaron de excesivo un cierre del balneario. Pidieron a las autoridades que los tengan en cuenta para dialogar y reversar la medida.
“Nosotros siempre hemos convivido con las tortugas Carey, así como también con los corales. Las tortugas siempre han estado en nuestro hábitat, por eso rechazamos la decisión del Ministerio de Ambiente y le pedimos al Ministro que se abstenga de emitir cualquier acto que conlleve al cierre temporal de cualquier espacio de Playa Blanca. Es atentar contra la humanidad”, denunció Wilman Herrera Imitola, abogado de la comunidad.
Habla Aseo Urbano de la Costa
Por su parte, Pedro Gutiérrez Bahoque, gerente del consorcio Aseo Urbano de la Costa, resaltó la disposición del Minambiente como una medida que merece la zona; sin embargo, el representante legal de esta entidad responsable de adelantar la recolección de desechos en la isla sostuvo que se debe acordar la forma cómo se hará esta importante tarea para colaborar de la mejor manera para salvaguardar esta área que será protegida.
