Unos $8.000 millones invertirán en el muelle, luego del último desplome

Con un mínimo asomo de turistas permanecieron ayer las playas de Puerto Colombia, luego del anuncio de la restricción del acceso al muelle, tras caerse el viernes cerca de 60 metros de la vieja y deteriorada estructura. A raíz de ese suceso, que según las autoridades estaba previsto, anunciaron que mañana inician las obras de la primera etapa de la restauración del monumento nacional. La Alcaldía invertirá entre seis y ocho mil millones de pesos.

Desde el pasado viernes 11 de marzo está en jurisdicción del municipio la maquinaria con la que se empezarán los trabajos del proyecto de restauración del muelle, que contempla tres etapas, entre las cuales no están incluidos los tramos caídos, sino la estabilización de las playas del sector y la reintegración de los 200 primeros metros de la estructura.

El primer trabajo en el anclaje del muelle tiene el objetivo de disminuir el embate de las olas sobre este, para proteger los aproximadamente 769 metros de estructura que se mantienen en pie, de los casi 1.219 que había originalmente.

Esta fase consiste en construir un enrocado de piedra de 150 metros en el lado izquierdo del muelle. En el derecho será ubicado un espolón semisumergido de unos 100 metros y un relleno de arena de 25 metros que se encontrará con uno de los espolones ya existentes.

El primer tramo que se realizará es el izquierdo por estar expuesto a la erosión costera, su levantamiento se calcula que demorará unos 90 días; sin embargo, todo el trabajo de esta primera etapa llevará entre 9 y 10 meses.

En un año, aproximadamente, comienza la segunda etapa que es la restauración de los primeros 200 metros del muelle, símbolo de inmigración y desarrollo portuario del Atlántico, necesitará un presupuesto de 12 mil millones de pesos más, dinero que ya está gestionado la gobernación del departamento.

La tercera etapa será la renovación urbanística y turística de toda la zona alrededor del muelle, que se conoce como la plaza de los inmigrantes y que se conectaría con el malecón. Así se tiene proyectado la segunda fase del malecón con un parque lineal, para hacer un nuevo entorno a todo este sector turístico

“Las ruinas existentes de esa vieja estructura deben quedar en los recuerdos de cada uno de nosotros como significado del desarrollo de nuestro departamento, mientras la administración propicia una nueva oferta turística. Y en un futuro esperamos poder hacer una gran réplica de lo que fue el muelle”, expresó Steimer Mantilla, alcalde de Puerto Colombia.

Inversión
El alcalde de Puerto Colombia dijo que el costo del trabajo de la primera etapa oscila entre seis y ocho millones de pesos, dinero destinado de las regalías del municipio.

Para la segunda fase el gobernador del Atlántico (e), Pedro Lemus Navarro, anunció ayer que los recursos que la Administración Departamental percibirá por concepto de la venta del predio denominado Distrito No. 20 de carreteras, adquirido mediante escritura pública No. 1001 de 12 de junio de 1997, tiene una destinación específica e inmodificable: la reconstrucción del muelle de Puerto Colombia.

Esta financiación ya se había proyectado desde 1996 cuando el Gobierno Nacional entregó al Departamento del Atlántico el mencionado lote, cuyos recursos recaudados por su venta debían ser usados para financiar la intervención de la que fuese la puerta del progreso del Atlántico. Pero la promesa no se cumplió en ese entonces porque los recursos de la venta no eran suficientes para los trabajos, y se declaró desierta la licitación. Pero este año el predio por fin será comprado por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

“La ministra de Transporte, Natalia Abello, nos dice que ella tiene los recursos porque esa plata hace parte del contrato de la construcción del nuevo puente Pumarejo. Después de la ordenanza, emitida por la Asamblea, ella se encuentra haciendo los avalúos del lote y una vez arroje los resultados, que nosotros pensamos deben estar entre los 8 mil y 9 mil millones de pesos, ellos procederán a girarlo”, anotó Lemus Navarro.

El resto del dinero de la primera fase del proyecto de reestructuración del muelle de Puerto Colombia lo pondrá el Ministerio de Cultura con un aporte de $1.500 millones y Fontur (Ministerio de Comercio) con $2.000 millones. Eso completa una inversión inicial prevista por $12 mil millones.

“Estamos en conversaciones con el Área Metropolitana para estudiar la posibilidad de hacer una gran intervención que incluya el malecón, parque lineal y la Plaza de Inmigrantes, y así generar más impacto en Puerto Colombia”, dijo Lemus.

Proyecciones sin cumplir
El último pedazo de estructura que se vino abajo y la amenaza de destrucción de los metros que quedan aceleraron el trabajo que las autoridades tenían previsto hacer desde hacía varias décadas.

En 2003 hubo una propuesta del sector privado que planteaba convertir al muelle en un gran espolón, con la instalación de un enrocado a su alrededor que protegería cerca de 25 hectáreas de playa de los efectos de la erosión costera. Aunque financiaron un estudio de prefactibilidad, la idea fue desechada ante la ausencia de respuestas de la Gobernación.

Solo fue en el año 2008, cuando las intenciones por recuperar el muelle llevaron a que el gobernador Eduardo Verano incluyera en el Plan de Desarrollo Departamental la elaboración del Plan Especial de Protección del Muelle, un estudio de patología del monumento, y a “apoyar los trabajos de rehabilitación del uso del muelle de Puerto Colombia según estudios contratados”.

Pero el deterioro ha sido progresivo y ha tardado varias décadas, aunque fue desde 2009 cuando empezó su destrucción, específicamente el 7 de marzo con 200 metros, el pedazo más grande que se ha caído. Ni la conformación en 1956 de la Junta Pro-defensa del Puerto que velaría por la conservación de la estructura, ni la inscripción de un plan de mantenimiento ante el Banco de Proyectos de Planeación Nacional en 1994, sirvieron para prevenir el colapso de alrededor de 450 metros desde el 2009 hasta la fecha.

Aunque las fuertes brisas, que se presentan siempre a finales y principios de año por las diferencias de presiones del litoral Caribe, han ocasionado el derrumbe de la estructura, es la falta de mantenimiento la que la ha debilitado al punto de que cede con el incremento de las corrientes marinas.

La historia precisa que el único mantenimiento realizado al muelle fue en 1989 con recursos gestionados por Eduardo Santos, entonces alcalde de Puerto Colombia.

Mientras se materializan todos los trabajos previstos, la comunidad teme que las brisas, que se extenderán unas semanas más, terminen de derribar la última parte del muelle, donde está la casilla y lo que las autoridades visionan que reconstruirían.