Por sedimentación restringen ingreso a barcos en canal de acceso
El calado autorizado se redujo nuevamente de 9,6 metros a 9, 1 metros. Cada tres días hacen monitoreo. Las fuertes brisas no les han permitido realizar la batimetría.
Por tercera vez en lo que va corrido del año, el calado autorizado para ingreso de buques al canal de acceso al puerto de Barranquilla bajó por la sedimentación que se presenta en la zona de Bocas de Ceniza, donde en los últimos días se han formado bancos de arenas.
A comienzos de febrero el calado autorizado estuvo en 9, 1 metros y posteriormente subió a 9, 6 metros, pero ayer volvió a bajar a 9, 1 metros, lo que quiere decir que buques de gran calado tienen restricciones para el ingreso.
Según representantes del sector portuario, el Gobierno nacional, a través de Cormagdalena, debe garantizar un calado de al menos 10,4 metros.
Alfredo Carbonell, director ejecutivo de Asoportuaria, expresó su preocupación por la situación, ya que se ve afectada la competitividad del sector portuario de la ciudad.
Dos embarcaciones que estaban programadas para llegar ayer a los puertos locales, las cuales tienen calado superior a 9,1 metros, no habían podido ingresar y estaban en zona de fondeo con los motores apagados a la espera de que cambie la situación.
En horas de la tarde, un buque procedente de Turquía con calado de 9,8 metros tuvo que aligerar carga en Cartagena para poder ingresar.
Navelena, consorcio que tiene a su cargo el contrato de recuperación de navegabilidad del río Magdalena, tiene abierto un proceso sancionatorio por parte de Cormagdalena, debido al incumplimiento de su obligación de garantizar la profundidad del canal de acceso.
Carbonell explicó que las condiciones meteorológicas no han permitido realizar las batimetrías (medición de la profundidad) por el fuerte oleaje que se registra entre dos y tres metros de altura.
Para hoy a las 8 de la mañana tienen previsto hacer la batimetría y apenas tengan los resultados revisarán para ver si hay mejorías o si continúa la restricción. Y en horas de la tarde se realizará una reunión del comité de seguridad portuaria, que preside la Capitanía de Puertos, para analizar las condiciones que se están presentando en el canal de acceso.
Diana Mercedes Casas, directora ejecutiva de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Exterior, Fitac, considera que lo ideal sería que en Barranquilla tuvieran una draga permanente para que no se repitan los episodios que han ocurrido a través del tiempo, porque siempre “con el tema de los contratos por cualquier motivo, estas empresas han quedado mal”. Sostuvo que Barranquilla, Cormagdalena y las demás instituciones que se han visto involucradas han invertido grandes sumas de dinero, que si sacan cuentas, con esos recursos “fácilmente se podría tener una draga propia”.
“El Gobierno debe entregar en convenio a la Armada Nacional, Dimar, o algunas de esas entidades competentes en compañía de Cormagdalena la operación, pero indiscutiblemente se requiere que contemos con una draga permanente en Barranquilla, esa podría ser una solución”, sostuvo Casas.
Según la dirigente gremial, “por estas restricciones pueden perder entre 30 mil o 40 mil dólares diarios”, porque no se trata solo de la sedimentación del río y el acceso de los barcos, sino de toda la afectación que hay de la cadena logística (operadores portuarios, agentes de carga, los trámites, entre otros).
René Puche, presidente de la Sociedad Portuaria Puerto de Barranquilla, considera que con esta situación queda una vez más demostrado la inestabilidad del canal de acceso. “Hace más o menos cuatro semanas tuvimos una restricción de calado de 8,1 metros durante más o menos dos semanas. Después durante un fin de semana, hace 10 días aproximadamente, se limpió el canal gracias a efectos de la naturaleza y llegamos a tener nuevamente un calado operativo de 9,6 metros y ahora se bajó el canal operativo a 9,1 metros, lo que demuestra la inestabilidad del canal de acceso”, detalló el dirigente portuario.
Puche insistió en la petición que hicieron los portuarios al Gobierno Nacional para que hagan una evaluación completa del canal de acceso y se identifiquen las razones por las cuales se están presentando estas inestabilidades temporales.
“Hoy tenemos 9,1 metros, pero mañana podemos amanecer con 8,5 o 10 metros y pienso que para Barranquilla y su zona portuaria es importante que se busque una solución de fondo con respecto a la sedimentación del canal de acceso”, detalló.
Indicó además que al final del año pasado recibieron con buen agrado la noticia en el sentido que el Invías aportaría $5.000 millones para el estudio de factibilidad y ver si es posible profundizar el canal de acceso a 15 metros y ampliar su ancho 300 metros, pero aún siguen esperando el estudio para identificar qué es lo que pasa con el canal de acceso.
Extremar medidas
El capitán del Puerto de Barranquilla, Germán Escobar, informó que en horas de la mañana de ayer se reiniciaron las maniobras de zarpes y arribos de motonaves por mejoras en las condiciones meteorológicas en el área de Bocas, pero se recomienda “extremar las medidas de seguridad en la zona del límite exterior, zona de precaución y sobre el canal navegable” para evitar emergencias.
Según la Dimar, en Barranquilla, Santa Marta, Riohacha y Puerto Bolívar, se presentan fuertes vientos que oscilan entre los 60 a 70 kilómetros por hora y oleajes entre 2 y 3 metros de altura.
Esta restricción es para embarcaciones menores y bañistas que por estos días visitan las playas de esta zona del Caribe.
La Dirección General Marítima asegura que seguirá trabajando de la mano de los diferentes gremios, para facilitar el desarrollo marítimo y portuario en el país.
Limitan horarios de zarpe de embarcaciones en Cartagena
Debido a los fuertes vientos, que según la Capitanía de Puerto pueden alcanzar velocidades que oscilan entre los 18 y 20 nudos, fueron implementadas este miércoles restricciones en el zarpe de embarcaciones desde la bahía interna de Cartagena.
En diálogo con EL HERALDO, el capitán de navío Julio César Poveda, capitán de Puerto de Cartagena, explicó que el zarpe de embarcaciones es permitido solo hasta las 9:00 de la mañana y el retorno debe hacerse a las 3:00 de la tarde, con el fin de evitar accidentes marítimos.
“Estamos haciendo monitoreo permanente para determinar hasta cuándo se mantienen estas medidas preventivas en la bahía interna de la ciudad”, dijo Poveda.
De acuerdo con el oficial, los turistas que deseen trasladarse a zonas como las islas del Rosario, entre otras zonas recreativas ubicadas en el área insular de Cartagena, deben hacerlo desde el muelle de La Bodeguita, que dispone de la vigilancia de la Armada Nacional y la Corporación Turismo Cartagena de Indias.
Los controles en la zona, según las autoridades, se han incrementado para evitar percances como el ocurrido el 19 de diciembre del año pasado, cuando una turista ecuatoriana perdió la vida tras el naufragio de una embarcación en la que se disponía a disfrutar de un paseo familiar hacia las islas del Rosario.
El comandante del Cuerpo de Bomberos, José Magallanes, dijo que se debe evitar el ingreso a playas como La Tenaza, en Marbella, para no exponer la vida ante el incremento de las brisas y el oleaje.
Restricción en actividades náuticas en Riohacha
Una depresión en la superficie del centro y norte del litoral Caribe ha generado un aumento en las velocidades de los vientos que están entre los 20 y 25 nudos y alturas del oleaje entre los 1.5 y 2.5 metros, es decir una fuerte marejada, según informó la Capitanía de Puerto de Riohacha.
Se prevé que estas condiciones aumenten durante las próximas 36 horas, por lo que se recomendó extremar las medidas de seguridad para la navegación de las embarcaciones menores, el flujo de bañistas cerca de las costas y demás actividades náuticas.
Fuertes brisas azotan Santa Marta
Fuertes vientos azotan a Santa Marta a raíz de un fenómeno natural que se extenderá hasta el cuatro de marzo. ‘La Loca’, como se le denomina a esta brisa, ha causado problemas en diferentes puntos geográficos de la ciudad.
El hecho más notorio se presentó en la Ye del barrio Once de Noviembre, al oriente de esta capital, donde una valla de señalización se cayó poniendo en riesgo a los conductores que transitan a diario por esa arteria de intenso flujo vehicular.
El capitán de fragata José María Plazas Moreno, titular de la Dimar, reportó que se han presentado velocidades de hasta 89 kilómetros por hora (48 nudos), las más altas en lo que va corrido del año.
Destacó que el fenómeno es generado por la conjugación de las bajas presiones en el suroccidente del Caribe colombiano y las altas presiones en las Islas Azores.
Como medida preventiva, la Capitanía de Puertos restringió el zarpe de embarcaciones menores en áreas protegidas, especialmente las que tienen ruta hacia el Parque Tayrona.
Guardacostas monitorean el área marina evitando que pescadores se adentren al mar abierto, poniendo en peligro sus vidas.
El primero de enero pasado se presentaron fuertes brisas que ocasionaron la caída de una lámina de la cubierta de la galería comercial del mercado público. Por esa razón la Alcaldía ordenó retirar toda la cubierta para optimizar el diseño y evitar riesgos para los 438 vendedores que fueron reubicados en este sitio.
