Murillo, con los puntos más críticos de accidentalidad
Ayer un hombre fue arrollado por un bus articulado cuando intentaba cruzar la avenida. Este año van 3 lesionados.
El cruce indebido de transeúntes, vendedores ambulantes por el carril “solo bus” de Transmetro y la invasión de la misma vía por parte de motocicletas y vehículos, son parte de las imprudencias recurrentes a lo largo de las troncales Murillo y Olaya Herrera.
Sin embargo, la situación se vuelve más critica en la avenida Murillo, desde la carrera 41 hasta el puente de la Circunvalar, ubicado en jurisdicción con el municipio de Soledad, en donde peatones y usuarios del sistema masivo sortean la velocidad de los buses articulados.
“Es un cruce peligroso, porque en este punto no hay cebra, hay que pasar a toda prisa”, indicó José Ferreira, un mensajero, luego de atravesar la Murillo a la altura de la carrera 31, lugar donde ayer un peatón fue arrollado.
La víctima del accidente fue identificado como Bernelís Martínez, de 25 años, según Transmetro el hombre atravesó sin percatarse que un bus articulado venía en marcha, hasta el cierre de esta edición, Martínez se encontraba en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica La Victoria.
Precisamente en este sector, los transeúntes en su defensa manifiestan que para cruzar hacia el otro lado de la calle deben ir hasta la carrera 33 para cruzar por el semáforo.
“La opción que hay es tirársele a los articulados y a los carros, porque son dos cuadras para hacer el cruce permitido y casi nadie lo hace”, señaló Jazmín Turizo, una transeúnte.
En otro sector de la Murillo, esta vez con carrera 1 E se evidencian decenas de usuarios que al salir de la estación pasan la avenida esquivando el tráfico denso a las 12:00 del medio día.
“Debí cruzar por las cebras, pero pienso en el ahorro de tiempo”, indicó Adolfo Ledezma, usuario de Transmetro.
La misma opinión tiene Aldair Chalá, un docente quien argumenta que debe cruzar rápido para tomar el bus alimentador al otro lado de la calle y si va hasta el cruce peatonal no alcanza a subirse.
“Lo ideal es ir al semáforo para evitar un accidente, pero después se me pasa la ruta alimentadora ”, señaló.
Los usuarios del sistema masivo dicen que en hora pico, las razones son más justificables.
“Al medio día y al final de la tarde hay mucha congestión y todo el mundo quiere llegar rápido, así que cruzan por donde sea”, explicó María Hernández.
La mayoría de los usuarios consultados por este medio aceptaron sus infracciones, otros las justificaron aludiendo al inclemente sol, la falta de cultura ciudadana, la falta de señalización y a la ubicación de las cebras y semáforos.
“En esta ciudad hasta que no pasan las tragedias, la gente no escarmienta. Es una cuestión de civismo, un comportamiento que es bastante escaso entre los ciudadanos”, dijo Felipe Cruz, un estudiante universitario, que usó el semáforo luego de salir de la estación La Arenosa.
Índices de accidentalidad
En los 9,3 kilómetros que comprenden la troncal Murillo, se registran los puntos más críticos de accidentalidad, así lo confirmó Transmetro.
Según el balance del sistema masivo, en el 2018 se redujo los índices de accidentalidad en un 22%, pasando de 376 eventos registrados en el 2017, a 295 en el 2018.
Las causas más relevantes fueron ocasionados por infracciones de terceros en vehículos particulares, esto sumó un total de 224.
Mientras que por imprudencias de peatones se registraron 18.
El número de víctimas fatales, pasó de 4 en el 2017, a 1 en el 2018. Los lesionados bajaron de 195 en el 2017 a 89 en el 2018.
En lo que va corrido del 2019 se han presentado 15 eventos en vía, que dejaron 3 lesionados. 11 de ellos han sido por infracciones de terceros en vehículos particulares, 3 por imprudencias de peatones y 1 por incidentes en la operación.
Recomendaciones
Álvaro Sánchez, subgerente de operaciones del Sistema de Transporte Masivo, Transmetro, dijo que es importante que la ciudadanía tenga en cuenta que se pone en riesgo la vida de quien atraviesa por lugares no adecuados, del conductor y la de los ocupantes del vehículo.
“Los buses del sistema viajan a velocidad constante. Por ser de gran peso y tamaño el frenado tiene que ser progresivo”.
Además, explicó que cuando un vehículo o ciudadano invade el carril, al operador le toca frenar de manera abrupta, de esta manera pone en riesgo su vida y la de los usuarios que viajan en el bus.
Por su parte, la Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial del Distrito, dijo que en el 2018 fueron impuestos 77 comparendos a vehículos por circular en el carril de Transmetro. En los primeros 21 días del año aún no se han reportado sanciones.
