Barranquilla

‘Golpe’ al corrientazo por alza en los precios de los alimentos

Dueños de restaurantes y comerciantes de Granabastos dijeron que sus ventas han bajado en un 50% por el alto costo de materia prima.

“Todo está caro”. Esta es la conclusión a la que llegaron comerciantes y dueños de restaurantes de la Gran Central de Abastos —Granabastos— sobre el precio de los alimentos.

El alza en los principales productos de la canasta familiar ha impactado significativamente en el precio del ‘corrientazo’ en las diferentes zonas de venta de comidas en Barranquilla y su área metropolitana.

Asimismo, de acuerdo con este gremio, las ventas se han visto afectadas entre un 40 y un 50%, con respecto al año inmediatamente anterior.

Productos como la papa, la yuca, el plátano, granos y verduras, así como también las carnes, el queso y el huevo se mantienen a la alza.

Emilse Pérez Guerrero, propietaria de un restaurante, manifestó que todos los alimentos están “súper caros”, por lo que decidió aumentar el valor de los platos en su comercio. Así —según dijo— no representaría tanta pérdida para su bolsillo.

“Aquí estamos vendiendo la mojarra a $12 mil, el bocachico a $10 mil y las corrientes con carne asada a $10 mil y la carne guisada a $8 mil, antes estos platos se vendían a $7 mil. Por otra parte, sancochos que antes costaban $4 mil ahora los vendo a $6mil”, contó.

Sostuvo que sus comensales han manifestado cierto descontento por el alza en los precios pero indicó que era necesario debido al alza que han tenido la mayoría de productos en el mercado.

“Se compran todos los alimentos pero se ve reflejado en la venta del almuerzo, se vende un poquito más caro”, puntualizó.

Entretanto, Jeison Andrés López, administrador de un restaurante en Granabastos, dijo que ante el panorama preocupante de los precios de los alimentos se ha tenido que reemplazar la papa por la yuca en el sancocho, que aunque también está cara es menos costosa que el primer tubérculo.

“Actualmente las ‘corrientes’ están en un valor de $10 mil y normalmente antes se manejaban a $8 mil. Tratamos de tener la variedad en los platos y con todos los productos pero para ello subimos un poco también los precios”, dijo.

Aseguró que el comensal es consciente de la situación del alza en los alimentos y decide pagar un poco más de lo habitual, en otros casos algunos clientes han decidido irse por falta de dinero.

“Se compran todos los alimentos pero se ve reflejado en la venta del almuerzo, se vende un poquito más caro”, puntualizó.

“Las ventas han disminuido en un 50% por este panorama”, precisó López.

Por su parte, Álvaro Acosta, trabajador de un restaurante de la zona, sostuvo que el plato que por economía solicitan más en este comercio es el sancocho.

“El sancocho está a $5 mil y es más factible para las personas que trabajan en este sector. O en ocasiones la gente cuando no le alcanza resuelve el almuerzo comprándose un pan con gaseosa”, aseveró.

Costo de fletes y dólar, inciden en precios de alimentos

El costo de los fletes marítimos y la alta cotización del dólar, son los dos factores que — según Leonardo Mulford, gerente de Granabastos— han incidido en el elevado precio de los alimentos en la ciudad.

“Para nadie es un secreto que los precios están aumentando. Lo que más está en alza son las frutas, verduras, que es lo que más volatilidad tiene. Los productos de origen animal (cárnicos, lácteos y huevos) tienen precios altos pero se mantienen estables”, dijo. 

El directivo sostuvo que los tres productos con mayor costo actualmente son el arroz, azúcar y el aceite de cocina.

“El alza se debe principalmente por los altos costos de los insumos y materias primas que se utilizan en la industria agropecuaria. Todo esto está influenciado por la logística internacional, muchos de los insumos como abono, fertilizantes, pesticidas —utilizados en el agro—provienen del exterior en su gran medida y los fletes marítimos están más caros”, explicó.

Mulford indicó que este panorama podría extenderse un mes y medio más con precios altos en los diferentes productos.

“Esto es un tema externo y no es fácilmente gestionable por los comerciantes sino por el Gobierno nacional con el ajuste de los aranceles para que la mercancía ingresen con menores costos y de esta forma tener un alivio en toda la industria agropecuaria”.

Sostuvo que de enero de 2021 a enero de 2022 los aumentos han sido de un 100 a 150%.

“Ha sido impresionante este tema, es algo nunca antes visto en la historia reciente de los últimos cinco años y está influenciado por el tema de costo de fletes y la cotización del dólar”, puntualizó.

Alimentos al alza

Pedro Atencia, comerciante de verduras, tubérculos y especias, manifestó que hace unos 4 meses atrás se conseguía el bulto de papá a $55 mil, actualmente cuesta entre $140 y $150 mil, es decir un alza de aproximadamente del 100%.

“La yuca antes estaba en $40 mil y ahora está en $60 mil, el plátano antes se conseguía en $550 pesos la unidad, ahora cuesta $1.000”, dijo. 

Indicó, además, que si bien los precios están elevados, no ha dejado de comprar los productos porque aduce son sumamente necesarios para la canasta familiar y para su consumo.

Por otro lado, manifestó que las ventas en su negocio, así como también del gremio comerciante de alimentos, se han visto afectadas. Los compradores redujeron sus pedidos ante el aumento elevado de los productos.

“El que llevaba un bulto de papa, ahora lleva medio. Los clientes disminuyeron sus compras, no se vende lo que anteriormente vendía. Esto actualmente está solo y los clientes no viene porque a ellos también se le aprietan las ventas en sus negocios”, expresó Atencia.

Miguel Galeano, comerciante de granos, contó que este producto en su variedad ha subido de precio, especialmente los importados como la lenteja, la arveja y el alpiste.

“Un kilo de lenteja en noviembre costaba $4.000 y ahora tiene un valor de $5.500 al por mayor. La zaragoza, que es un producto nacional, ha subido un 25%, antes estaba en $5.000 y ahora en $7.000; el kilo de arveja se conseguía en $1.300 ahora está en $3.200”, dijo Galeano.

Agregó que antes se comercializaban cinco camiones de granos a la semana y ahora solo lograr vender uno a la semana.

“Estos altos precios afecta mucho el bolsillo del pueblo”, recalcó.

Roberto Igirio, comerciante de frutas y verduras, manifestó que la habichuela y la papa criolla son otros de los productos que actualmente tienen un costo elevado. El primero, se encontraba en $60 mil y ahora cuesta $80 mil y, el segundo, el bulto tenía un valor de $135 mil y ahora se encuentra en $200 mil.

“El precio de los alimentos está por las nubes, los productos no se vende en la misma proporción pero la gente lo compra porque no hay de otra. Los tenderos se quejan porque las ventas se le han bajado a raíz de los precios”, afirmó.

Cárnicos

Por otra parte, Mildreth Páez, propietaria de un expendio de carnes y vísceras, indicó que el valor de la carne está muy alto y que los consumidores que llegan a su negocio escasamente pueden comprar es una libra o entre $3 mil y $5 mil de este producto. 

“Antes la carne blanda se conseguía en $10.000 la libra, ahora está en $14.000; la carne para desmechar o guisar estaba en $9.000 y ahora está en $12.000; la costilla se encontraba en $5.000 y ahora está en $7.000”. 

Asimismo, explicó que a medida que van pasando los meses está aumentando el valor del ganado y a los cortadores “nos toca ajustar los precios también”.

Indicó, además, que ha mermado las ventas en su negocio en un 50%. “Antes nosotros vendíamos 3 reses y ahora solo alcanzamos a vender una sola”.

A su turno, Andrea* quien es propietaria de un expendio de pollo, huevos y queso, mostró el panorama de estos productos en el mercado.

“El huevo tiene una tendencia a subir, mientras que el pollo ha tenido una constante variación en su precio que a veces sube y otras veces disminuye. Por su parte, el queso se ha mantenido, sin embargo, aún sigue siendo costoso”, explicó.

Sostuvo que el queso tuvo una leve reducción, antes costaba $18 mil el kilo y ahora se vende a $16 mil: la pechuga de pollo pasó de $8 mil a $12 mil el kilo; la unidad de huevo pasó de 420 pesos a 480 pesos.

Precio de la papa se mantendría al alza hasta el mes de julio

Germán Palacio, gerente de Fedepapa, aseguró este miércoles que el incremento del costo de los insumos agropecuarios ha afectado la cosecha de papa en el país y ha llevado a un aumento en los precios, el cual se prevé se extienda hasta julio de este año.

“El incremento de los precios en los insumos agropecuarios, por ejemplo, el del fertilizante se duplicó, y esto ha hecho poco viable la producción de papa, que en este 2022 ha sido baja. Normalmente, en el primer trimestre los precios son altos”, añadió Palacio.

 Explicó que en el inicio de 2021, el sector comenzó con mucho optimismo en su producción, pero todo se fue apagando debido a las marchas del paro nacional en Colombia.

“Los bloqueos constantes junto con los cierres viales en el país, afectaron mucho las cosechas de la papa, por lo que no se pudo sacar y se perdió gran parte de esa producción”, señaló.

Agregó que “a la fecha, de los cerca de 100.000 productores de papa, entre un 10 % y un 15 %, se pasaron a otras actividades productivas como la ganadería, lo que impactó las cosechas de las mismas en todo el país”.

De acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del DANE, los alimentos que más incrementaron los precios en 2022 frente a enero de 2021, fueron la papa, (140,16 %), seguido por los aceites comestibles (48,52 %), y la yuca, con un 46,56 %.

En el caso de la región, según el último informe de precios de la papa única expedidos por Granabastos, dicho producto se encuentra en $119.000 la bolsa de 50 kilogramos, y aunque las ventas se han mantenido estables, el incremento en su valor ha hecho que las familias consideren un ‘Plan B’ en su canasta familiar.

“Debido a la gran dificultad que ha presentado no solo la región Caribe, sino también los colombianos de comprar papa por su alto costo, se ha recomendado comprar y consumir yuca, plátano y pastas”, indicó Germán Palacio.

La Costa norte se nutre la mayoría de las veces de la papa que se produce en Antioquia y los santanderes, aunque esta tendencia puede cambiar dependiendo de la competencia en precios. “Para el final de 2022 los valores de estos productos volverán a tener una tendencia a la baja, pero perjudicados serían pequeños y medianos productores”.

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